Chiara
"Al entrar de nuevo, el medico estaba allí. Me apresure a unirme con todos. Mi corazón latía con fuerza mientras esperaba las noticias sobre Joey."
- Bueno familia, podéis calmaros, Joey esta fuera de peligro.- dijo el medico con una expresión de alivio.
Todos soltamos un suspiro de alivio. Por mi rostro caían algunas lagrimas, mire a mis padres quienes se abrazaban entre si y Jasmín se cubría la cara para que nadie la viese llorar.
- Joey es un niño muy fuerte, al llegar aquí había perdido mucha sangre pero si no llega a ser por la chica que le estaba tapando la herida, hubiésemos lamentado otra situación.- explico el medico.
- ¿Podemos pasar a verle?.- pregunto mi padre limpiándose las lagrimas.
- Ahora mismo esta recuperándose de la anestesia, cuando lo suban a la habitación les avisaremos.
- Muchas gracias doctor, muchas gracias.- le dijo de nuevo mi padre al medico mientras le apretaba la mano.
El doctor se fue y todos nos dimo un abrazo que libero cualquier tensión en el momento. Me alegraba un montón que a Joey no le hubiese pasado nada pero ahora la que me preocupaba era Violeta. Me gire hacia la salida pero mi madre me llamo la atención.
- ¿Dónde vas?.
- Voy a contarle a Violeta las buenas noticias.
- ¿Cómo esta?- volvió a preguntarme
- Mal.- le respondí muy sincera.- Piensa que Joey esta aquí por su culpa.
- ¿Puedo ir yo a hablar con ella?.- me pidió mi madre.
- Mama, esta muy nerviosa. Antes me ha hablado mal, no se si deberías ir.
- Por favor, hija. Se que quieres ser tu quien este a su lado pero necesito decirle una cosa.
Mi madre llevaba toda la razón del mundo. Quiero ir a estar a su lado y abrazarla pero también sabia que mi madre tendría mejores palabras que las mías.
Violeta
Seguía sentada en el mismo sitio, envuelta en la oscuridad de la noche, alumbrada únicamente por una farola con una luz bastante tenue. Y aunque estábamos en pleno junio, yo sentía una oleada fría me atravesaba pero lo acepte como un castigo. Mire mis manos, aun manchadas de sangre, sangre que evidenciaban mi fracaso. Por mas que intentaba no darle vueltas, no podía dejar de escuchar en mi mente las palabras "Esto es tu culpa".
De repente, escuche pasos acercarse hacia mi. Levante la mirada y vi a Emma delante mía. Su expresión era suave.
- ¿Puedo sentarme?- me pregunto con amabilidad pero sin esperar ningún tipo de respuesta ya que tomo asiento a mi lado.
- No tienes porque decirme nada.- murmure sin mirarla.- Se lo que piensas.
- ¿ Ah, si?, ¿Qué es lo que pienso?.
- Que todo esto es culpa mía- dije con la voz apagada.- Que no debí enfrentarme a esos hombres, que no fui lo suficientemente fuerte.
Emma dejo escapar un suspiro.
- Violeta, si eso es lo que piensas que voy a decir, entonces no me conoces en absoluto.
La mire confundida. Claro que pensaba aquello, por mi culpa su hijo esta debatiéndose entre la vida y la muerte.
- Escucha, Joey esta bien, nos lo acaban de decir. Violeta, Joey esta vivo gracias a ti. Fue tu valentía y tu rápida actuación la que han provocado todo esto. ¿Sabes lo que ha dicho el medico?. Que fue por la presión que hiciste sobre la herida la que salvaron a Joey de una muerte muy segura.
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Hogar- Kivi
RomanceComo la vida puede dar un cambio de 360 grados por una decisión mal tomada. La vida de Violeta dará un giro que hará replanteárselo todo. Menos mal que Chiara estaba ahí con ella cuando se encontraba en el abismo mas oscuro. Una historia llena de a...