Burbuja

904 41 1
                                    

Violeta

Era jueves y Chiara y yo estábamos en la sala de espera de la consulta para la analítica de sangre. Yo me encontraba sumida en un estado de nervios, mi pierna se movía muy rápido y mi respiración era algo irregular.

- Hey, respira.- me dijo Chiara una vez se dio cuenta de mi estado de nervios.- No va a pasar nada, yo voy a estar todo el tiempo a tu lado.- dijo intentando calmarme.

- Es que no puedo Kiki, es que solo pensar en como esa aguja va a atravesar mi cuerpo... no puedo... además tengo que llenar dos botes. No voy a poder.- dije sumida ya casi en un estado de ansiedad.

- Tranquila.- volvió a repetirme.- Mira cuando vayan a pincharte cierra los ojos y piensa en algo que te guste mucho, no pienses en el momento y recuerda que yo voy a estar a tu lado, no te va a pasar nada.- siguió Chiara mientras me cogía la mano para dejarme caricias en esta para tranquilizarme.

- ¡Violeta Hódar!- dijo una enfermera.

Había llegado mi turno, respire muy hondo antes de entrar y Chiara me dio su mano para apoyarme. Entre en aquella sala fría y me senté en la silla, vi como Chiara le decía algo a la enfermera y luego se dirigía a mi.

- Si estas mas cómoda, puedes tumbarte en esa camilla.- me dijo algo seria aquella enfermera. Mire directamente a Chiara y le sonreí, sabia lo que había echo y estaba muy agradecida con su gesto.

Me tumbe en la camilla y Chiara me dio la mano y no dejo de mirarme en ningún momento.

- Ahora cierra los ojos y piensa en algo que te haga sentir segura.- me volvió a repetir Chiara mientras me acariciaba la mejilla.

Volví a respirar hondo y cerré los ojos para pensar en aquello que me hacia sentir segura. Tampoco tuve que pensar mucho pues nada mas cerrarlos lo primero que se me vino a la mente fue Chiara, se me vinieron miles de recuerdos en los que Chiara me protegía, me cuidaba, se preocupaba por mi. Estuve tan concentrada pensando en los buenos momentos con ella que no me di cuenta de cuando me pincharon hasta que Chiara me aviso.

- Vio, ya esta.- me dijo con una sonrisa.- Has sido muy valiente. Estoy muy orgullosa de ti.

- Todo a sido gracias a ti.- le respondí con la misma sonrisa.- Han sido todos esos recuerdos que tengo contigo los que han hecho que mi cuerpo se relajara, se sintiera seguro. Gracias.

Las dos nos estábamos dando las manos mientras nuestros ojos se miraban fijamente, veía en su pupila como el verde de sus ojos se mezclaba con el color miel de los míos y ese era un signo de que estábamos en nuestra burbuja, un lugar donde nadie nos podía hacer daño y donde nos protegíamos mutuamente pero nuestra burbuja exploto cuando de fondo se escucho el carraspeo que procedía de aquella enfermera que parecía amargada. Tras esa llamada de atención decidimos irnos de aquel lugar.

Una vez fuera de la consulta, Chiara recibió una llamada de Denna y se separo para cogerla. Mientras atendía la llamada no pude evitar quedarme embobada mirándola, el verano le estaba sentando muy bien, como los vestidos le marcaban mas sus curvas y como el moreno, que cada día iba cogiendo mas, le daba un brillo distinto.

- Me ha dicho Denna de ir a la playa esta tarde con todos, ¿te apetece?.- me pregunto una vez finalizada la llamada.

- Claro.- le respondí con una sonrisa.

- Vale, pues le confirmo ahora.

Tenia muchas ganas de ir, no solo por el ambiente y de estar con todos sino también de ver a Chiara en bikini.

Chiara

La verdad tenia muchas ganas de bajar a la playa y cuando Denna me propuso la idea, no me pude negar, no solo por pasar tiempo con los chicos y estrenar la temporada de verano, sino también de ver a Violeta en bikini.

Hogar- KiviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora