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amor con hielo , morat

Que en el amor y en la guerra, todo vale.





Me removí en mi cama al sentir los rayos de luz golpeando mi cara. Agarré la almohada y la puse cubriendo mi cara y oídos al escuchar mi alarma.

Odio ir a trabajar.

No, de hecho no.

Amo mi trabajo, pero odio los entrenamientos matutinos.

Apago la alarma y volteo a mi lado observando la espalda descubierta junto a mi. Sonreí inconscientemente y acaricié la nuca del uruguayo que yacía tranquilamente junto a mí.

¿Cómo es posible que no se despierte ni con el sol cubriendo su cuerpo, ni con la alarma?

— Rayitooooo. — dije dejando un beso en su mejilla. — Despiertaaaaa…

— Rubia, un rato más… — se quejó con su voz adormilada que me ponía mal.

— Tienes entrenamiento y yo quiero un beso. — dije yo haciendo puchero y vi como una sonrisa se dibujaba en su rostro aunque todavía tuviera los ojos cerrados.

— Te puedo dar un beso, pero nos quedamos otro ratito más aquí. No pasa nada si llegamos unos minutos más tarde.

Me reí cuando sentí su brazo rodear mi cintura y acercarme a él. Abrió sus ojos por fin y sonreí al verlo aún adormilado.

Amaba despertar a su lado. Amaba a este niño.

— Buenos días. — susurró para darme un beso profundo y delicado.

— ¿Tienes hambre? — dije en cuanto nos separamos.

— Mmm… a mí se me antoja más… otra cosa. — dijo para moverme y ponerme sobre él. Sonreí y acaricié sus mejillas.

— ¿Si? ¿Cómo que? — pregunté sonriente.

Movió su mano para apretar mi nuca y atraer mi cara más cerca de él. Su otra mano apretó mi pezón por encima de su playera que traía puesta. Solté un gemido bajo y cerré los ojos.

— Brian… — advertí. — Vamos a llegar tarde.

— Como si me importara. — dijo para después dejar un camino de besos desde mi mejilla hasta mi cuello.

— Es en serio… Me vas a meter en problemas si no llegamos a tiempo y Jardine te va a matar.

— Creo que hay otros problemas más urgentes que solucionar. — dijo mientras seguía dando besos en mi cuello.

Mordí mi labio replanteandome su propuesta.

— Te odio. Ven… — me paré de la cama, jalando su brazo para ponerlo de pie.

— ¿Qué haces? — dijo sonriendo.

— Vamos a la ducha. — dije haciéndolo sonreír y yo rodé los ojos divertida.

***

Mientras cepillaba mi cabello frente al espejo, Brian estaba sentado en la cama viendo el celular.

Estaba raro, fruncía el ceño y escribía rápidamente, mandando mensajes.

Terminé de arreglarme y me acerqué a él.

— ¿Todo bien? — dije suavemente mientras acariciaba sus mejillas, él dejó su celular a un lado y una mueca se dibujó en su rostro.

— ¿Podemos hablar? — lo miré confundida y asentí sentándome junto a él.

— ¿Sobre qué?

— Mmm… no sé por dónde empezar. — se quedó unos segundos pensativo, buscando como expresar lo que pasaba. — Hablé con mi representante… Me dijo que hay ofertas por mí, de varios clubes.

Apreté mis labios en una línea al oír eso.

Sabía que era posible que Brian saliera del América, había estado evitando ese pensamiento por el bien de mi salud mental.

Brian había hecho un torneo impresionante, hasta que el idiota de Gallardo lo lesionó, por lo cuál era más que obvio que varios clubes lo querian. También las últimas semanas había habido rumores por todos lados sobre la salida de Brian del club. Los cuales intentaba ignorar.

— No hay nada seguro, pero la que me mencionó que era más probable era en la Fiorentina… en Italia.

Lo miré sorprendida. Eso realmente era genial, ir a jugar a Europa era el sueño de Brian y que lo quisiera un equipo de una liga europea, era increíble.

— ¿La Fiorentina? ¿En la Serie A? Rayito, ¡es increíble! — dije sonriente, aunque por dentro un sentimiento amargo cubría mi pecho.

No podía ser tan egoísta de decirle que no quería que cumpliera su sueño, aunque eso significaba que tendríamos que separarnos.

— ¿Estás feliz? — susurró.

— Obvio que estoy feliz, bobo. Es tu sueño. — Tomé su rostro y lo acerqué a mi. — Si tienes que irte… nos las arreglaremos, pero tú vas a Europa por qué vas.

Él sonrió y me atrajo en un abrazo cálido y cariñoso.

— Eres increíble, rubia. — suspiró acariciando mi cabello. — No quiero separarme de ti…

— Yo tampoco, pero si es necesario para que tu sueño se cumpla… compraré un jet privado si es necesario para ver todos tus partidos.

— Estás loca, te adoro. — dijo para besar mi cabeza.

Me reí y los abracé más fuerte.

Me encantaría ver a Brian cumplir su sueño, pero muy en el fondo y una pequeña parte de mi, deseaba egoístamente que el fichaje no pasara, que no se concretara y él se quedara en México, en el América.

Conmigo.

***

Nos dirigimos al club y aunque intenté pensar en cualquier otra cosa, que no fuera Italia, no lo logré. Todo me llevaba a eso y a la incertidumbre que me provocaba la situación. Sé que nada estaba decidido, pero aún así los nervios que me provocaba, sobrepasaban mi paz mental.

Sé que Brian lo sabía, sé que lo notaba. Me conocía más que yo misma, pero decidió no decir nada. Por el momento.  Porque sé que en cuanto estemos nuevamente solos, sacará el tema otra vez. Y espero tenga noticias.

Al terminar su entrenamiento, se acercó a mí, dejó un beso en mi labios e indicó que iría a bañarse y volvería para que después fuéramos a cenar a algún lado.

— Te quiero, ¿sabías? — dije abrazándolo una vez que habíamos ordenado nuestra comida.

— Te quiero más, rubia. — rodeó mis hombros con su brazo haciendo que volteara mi cara hacia él. — Hablé con mi representante…

— ¿Y qué te dijo?

— La Fiore tiene hasta el miércoles para decidir si me compran o no, el club mandó una cifra final y lo único que queda es esperar a que lo acepten o lo rechacen.

— Bien, entonces… esperemos al miércoles.

— Si, esperamos al miércoles.

***



notita de nadsss!

Hola chicasssss! I'm backkk. Cómo andan? las extrañé mucho y extrañé también muchísimo escribir al rayito. Por fin salí de vacaciones y ayer pude terminar por fin el capítulo que tenía. Espero les guste mucho y prepárense para los nuevos capítulos y el drama que se viene. Este capítulo es un poco triste pero aguanten que ya viene lo bueno :)

también vengo a decirles que el ame es oficialmente el único y primer tricampeón del fútbol mexicano.

no se olviden de votar y comentar, las amo de aquí al Azteca :)

RUBIA | brian rodriguez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora