MUÑEQUITO DE PORCELANA [LIANKUEA]

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Parte 2

—Quiero bailar —dijo Nunew.

JJ observó a su amigo, que estaba mirando el salón donde la gente bailaba al ritmo de la música, y notó sus ojos ansiosos y pendientes de lo que estaba ocurriendo.

Quería negarse, pero se dijo que debía disfrutar esa fiesta a pesar de que hubiera gente que le desagradara, y asintió.

—Bueno —aceptó girándose hacia Kuea—. ¿Quieres bailar?

Antes de que Kuea pudiera responderle fueron interrumpidos por un grito de emoción, y JJ no necesitó girarse para saber que era Wheein.

—¡Chicos! —saludó sonriendo—. ¡Vinieron!

JJ le pellizcó la mejilla, arrancándole un quejido.

—Obligado —contestó JJ, viendo el disfraz de Wheein: estaba vestida de hada—. Te ves muy bonita, Wheein.

La chica se ruborizó, riéndose.

—Ustedes se ven geniales también —contestó Wheein.

—Quiero bailar, JJ —insistió Nunew, tomándole el brazo.

El aludido suspiró, sabiendo que a Nunew no le gustaba que le ignoraran demasiado tiempo.

—¿Por qué no van a bailar ustedes? —preguntó Wheein—. ¡Yo puedo bailar con Kuku! —la muchacha miró al chico—. ¡Estás bonito hoy, Kuku! ¿Bailamos?

Kuea sonrió con emoción, tomando la mano que Wheein le ofrecía, y JJ quiso negarse al inicio. Sin embargo, se dijo que debía confiar en la chica y que Kuea estaría en buenas manos, por lo que terminó asintiendo con una sonrisa algo débil, antes de girarse para guiar a Nunew a la pista de baile.

Al inicio, Nunew parecía moverse de forma tiesa, sin saber muy bien qué hacer en medio de tanta gente que le estaba tocando y rozando la ropa. Luego de varios minutos, al ver la sonrisa relajada de JJ, pareció reaccionar un poco mejor y empezó a moverse ahora con más ritmo, algo relajado y contento.

—¿Te gusta mucho bailar, Nu? —preguntó JJ, por sobre el ruido de la música.

—¡Mucho! —gritó Nunew con una pequeña sonrisa en sus labios—. ¡Mamá dice que me ayuda a mejorar mis habilidades motoras y a no ser tan torpe! —dio una vuelta, feliz—. ¿Crees que ya no soy tan torpe?

Le sonrió, sacudiendo su cabeza.

—¡Eres increíble, Nunew! —apoyó.

Los ojos de su amigo brillaron con emoción.

—¿De verdad lo crees?

JJ se rió con cariño, alegre de ver a Nunew fuera de su zona de confort, tratando de desenvolverse como cualquier otro chico con ellos y forzándose a estar rodeado de personas, aunque le pusiera un poco incómodo y ansioso.

Mientras, Wheein estaba guiando a Kuea en los pasos de baile, el chico luciendo algo perdido y desorientado porque alegaba que no podía saber el ritmo de la canción. Wheein se limitaba a reírse y regañarlo, tomándole las manos, tirando de él para hacer que se moviera, y Kuea se forzaba a seguirle los pasos. 

—Kuea, eres tan guapo incluso con ese disfraz —dijo Wheein sonriéndole.

Kuea la miró con confusión.

—¿Qué cosa dijiste? —preguntó Kuea, inclinándose un poco.

—¡Que eres un chico fantástico! —dijo Wheein con las mejillas algo coloradas por la repentina cercanía del muchacho.