《Puedes hacerlo deja que tu corazón hable》- se dijo a si misma la chica - Ok Phineas...- la pelinegra suspira con fuerza, baja la cabeza, cierra los ojos y al abrirlos dirije su mirada hacia enfrente luego de minutos - Esto es algo que te he querido decir desde hace mucho tiempo pero no encontraba el momento indicado...de echo aun me cuestiono si este es el momento. Al estar frente a tí como ahora me llenaba de valor pero cuando abria la boca las palabras se me iban. Hablare antes de que pase eso tu...tu...¡Me gustas! ¡Ahh! ¿¡Por qué no puedo hacer esto!?
Isabella mira con frustración su reflejo apoya ambos codos en la madera de su tocador y la cabeza en sus manos.
- ¿Por qué decirlo al espejo es más sencillo? ¿Por qué no simplemente salgo de casa cru...- la chica detiene su dialogo consigo misma al escuchar el ruido de su puerta al abrirse un poco. De inmediato voltea en esa dirección pero la ve aun medio cerrada tal y como la dejo, se levanta y se asoma pero solo ve el pasillo vacio - Debo estar enloquesiendo.
- ¡Isabella! ¡Phineas ya llego! - le grita su madre desde la planta baja.
- ¡Ya voy mamá! - grita la chica en respuesta.
Isabella toma una mochila que esta junto a su cama se dirije al tocador para darse un ultimo vistazo, retoca su labial y corre escaleras abajo para encontrarse con el pelirrojo que esta sentado en el sofá esperandola.
- Hola Phinny - lo saluda con una sonrisa él se levanta y ella le da un beso en la mejilla.
- Hola Isabella - responde con una sonrisa algo hueca al parecer de la chica - ¿Ya nos vamos?
- ¿Y Ferb? - pregunta desviando la cabeza a traves del hombro del chico buscando al peliverde.
- Se resfrio así que se quedara en cama unos días.
- Que lastima - responde ella - Bueno es hora de irnos - dice mientras se encaminan a la puerta - ¡Adios mamá! - grita desde afuera.
- ¡Adios hija! - le responde desde el interior.
Ambos chicos caminan en silencio hacia la parada del autobus. Y solo hasta que se detienen Isabella rompe el silencio.
- Estas muy callado ¿No?
- ¿Encerio? No lo había notado - responde algo distraido - Lo siento.
- Descuida es solo que es muy raro en tí.
- Amm...ya se hace tarde ¿Por qué no vendran Buford y Baljeet? - responde cambiando de tema.
- ¿No lo sabes?
- ¿Saber qué? - pregunta el pelirrojo arqueando una ceja.
- Buford fue suspendido dos días por que hizo algo malo ayer y Baljeet tenía cita con el dentista hoy.
- ¿Osea qué hoy solo seremos tu y yo?
- Eso creo - responde la chica dandose cuenta de la situación.
Por fortuna ya que el silencio incomodo volvio el autobus llega en dicho momento. Ambos jovenes suben y se sientan al lado del otro.
Depues de unos minutos comienzan a charlar como normalmente, lo hacen hasta que el autobus llega a la escuela y ambos bajan.
Antes de ir a clase los chicos pasan por sus casilleros que convenientemente estan a la par para tomar algunos libros luego de eso pasan a su salón y toman la primer clase de dos horas al terminar se dirijen a la siguiente que es de dos horas también. Todo luce más o menos normal si le quitamos el asunto de que no estan el resto de sus amigos, las clases han impedido que ellos sostengan una conversación muy larga o definida y todo apunta a que las cosas sigan igual. Ahora caminan a su siguiente clase, al llegar al aula en la puerta ven una nota que dice: <Grupo 301 hoy no habra clase de literatura tienen hora libre>
- Vaya suerte - dice sonriente Isabella - Una hora libre ¿Qué quieres hacer? - se dirije al pelirrojo.
- No lo sé ¿Quieres ir a las canchas y tirarnos en el cesped?
- Eso suena bien.
Ambos caminan hacia su destino, al llegar se sientan bajo la sombra de un árbol.
- ¿Y me diras qué te tiene tan callado? - pregunta la pelinegra.
- ¿Seguiras con eso?
- Si, almenos hasta que me des una respuesta.
- Isabella en verdad no estoy callado yo me siento igual.
- Pues yo no te veo así. Te siento distante, te conozco bien.
- Yo...Si te lo digo te enfadaras - el chico baja la cabeza.
- ¿De qué hablas? ¿Por qué me enfadaría? - pregunta arqueando una ceja.
- Pues yo...sin querer...esta mañana yo...
- Phineas ¿Podrías dejar de hacer tantas pausas y hablar claro?
- Ok - suspira y levanta la cabeza - Esta mañana cuando fuí por tí sin querer escuche cuando tu practicabas frente al espejo una confeción de amor.
La chica abre los ojos como platos al escuchar las palabras del pelirrojo, se le hiela la sangre y palidece, se suponía esa práctica era secreta y él había escuchado todo...absolutamente todo.
- Oh no - susurra aun impactada - Phineas no era mi intención que lo descubrieras de esa forma pero ahora que lo sabes...
- ¿Por qué no me lo dijiste? - la interrumpe el pelirrojo.
- Pues tenía miedo de que tu me...
- Soy tu mejor amigo yo debería saber si te gusta alguien ¿Almenos puedo saber de quién se trata?
- Espera un momento...¿No lo sabes? - levanta una ceja señal pura de confución.
El chico niega con la cabeza.
- ¿Pero cómo? dijiste que me escuchaste, yo mencione tu...amm in...for...mación ¡Si eso es! tu información pedida osea él nombre de la persona.
- Bueno supongo que cuando llegue a tu puerta ya lo habías dicho por que yo solo escuche lo que practicabas. Pero nada del nombre.
La chica suspira un poco más aliviada pero luego frunce el ceño - ¿Estabas espiandome? Eso era algo privado - dice molesta - No tenías por que escuchar eso.
- Fue un accidente - se escuda - Estaba por tocar cuando te escuche hablar, primero creí que estabas con alguien por eso decidi esperar afuera luego note que la puerta estaba algo abierta y me asome y te vi frente al espejo, despues me fuí no pensaba mencionarlo pero he estado todo el día cuestionandome ¿Quién es él? ¿Quién puede ponerte de esa forma?
《Tu y nadie más que tu》- piensa la chica mientras continua viendolo molesta.
- ¿Por qué no me habías dicho que te gustaba alguien? - pregunta Phineas.
- No lo sé - responde con los brazos cruzados evitando dirijirle la mirada.
- ¿Acaso no me tienes confianza? - la chica lo mira de inmediato a los ojos.
- Claro que sí, eres en quien más confio.
- ¿Entonces por qué ocultar este detalle tan importante de tí?
- Esto que siento es un imposible no vale la pena mencionarlo. No es importante.
- Todo lo que tiene que ver contigo me importa ¿Quiero saber quién es él afortunado que entro en tu corazón?
- ¿Para qué quieres saberlo?
- Por qué...por qué...soy tu mejor amigo.
- Bien...- suspira con fuerza - Te propongo un juego.
- ¿Qué clase de juego? - pregunta confundido.
- No pudo decirte quien es pero tampoco quiero que pienses que no te tengo confianza. El juego que propongo consiste en que me hagas preguntas, las cuales te ayudaran a descubrir quien es él. Si lo descubres lo sabras pero si no seguira siendo mi secreto ¿Qué te parece?
- Que no es justo - responde haciendo pucheros como niño pequeño - Pero se que no habra otra forma así que acepto.
- Bien. Tu preguntas yo respondo, de ti depende descubrirlo, tienes quince preguntas.
- ¿Qué? Nunca dijiste eso.
- Nunca preguntaste - responde sonriente la chica - Son quince no las desperdicies. Empecemos lanzame la primera pregunta.
- ¿Es de nuestra edad?
- Sí.
- ¿Es divertido?
- Mucho.
- ¿Es un patán?
- No.
- Para ti pueda que no pero que tal si para mi no es así.
- Lo estamos viendo desde mi puento de vista Phineas, además no he escuchado que alguien haya dicho que lo sea.
- ¿Eso significa qué es de nuestro grupo?
- Si, va en esta escuela.
- ¿Es popular?
- Se podría decir que sí, aunque a él no le importan esas cosas lo cual amo.
- Eso suena bien - dice con la mirada perdida - ¿Es atletico?
《Considerando que eres él capitan de futbol...》- se dice a sí misma - Sí.
- ¿Es alguien educado?
- Supongo que sí.
- ¿Es creativo?
- No tienes ni idea - suelta una risita.
- ¿Es inteligente?
- Demasiado.
- Probablemente para tí si - responde algo frío.
- No lo creo, en verdad ha demostrado ser muy inteligente.
- ¿Es guapo?
- Si.
- ¿Qué te hace creer eso?
- No lo sé, solo lo sé y bueno creo que la mayoría de chicas me lo confirman cuando suspiran y hablan de él aunque a mí me da igual yo no me enamore de eso si no de su forma de ser - la chica tiene un brillo singular en los ojos y a la vez sus labios curvados forman una sonrisa. Su mirada se pierde en el horizonte.
- Hey, sigo aquí - dice Phineas con el ceño fruncido mientras chasquea los dedos frente a la cara de la pelinegra.
- Lo siento - dice sonrojada.
- Bien continuemos ¿De qué color son sus ojos?
- De un hermoso azul fuerte.
- ¿Lo conozco?
- Mejor que a nadie - Isabella le dedica una media sonrisa.
- ¿De qué color es su cabello?
- Si te lo digo lo descubriras, así que eliminemos esa te quedan dos.
- ¿Haz hablado alguna vez con él?
- Infinidad de veces. Ultima pregunta.
- ¿Por qué te gusta?
- Lo conozco desde hace mucho, amo su forma de ser conmigo y con los demás, amo su sonrisa, él es optimista en todo lo que hace nunca se rinde y si esta por hacerlo yo me encargo de que no sea así. Cuando estoy con él me siento diferente una persona más feliz, fuerte y mejor se podría decir que es mi razón para sonreir a diario - al terminar de hablar la pelinegra sonrie caso contrario Phineas pone los ojos en blanco y suspira sin que ella se de cuenta.
- No.. puede...ser - dice sorprendido y con los ojos abiertos como si hubiese descubierto algo impactante - Creo que ya se quien es.
- ¿A sí?
- Bueno como datos tengo que es un chico: Que asiste a esta escuela y a parte va en nuestro grupo_Tiene 16 años_Es divertido_No es un patán_A pesar de que es popular_Y atletico_Es inteligente_Muy creativo_Para empeorar es educado_Y lo rematamos con unos ojos azules_Que quedan con el aspecto de alquien guapo por él que las chicas suspira. No me quisiste decir el color de cabello lo que me indica que no es un color muy común_Al parecer lo conozco y según tu mejor que a nadie_Y por la forma en la que hablas tu lo debes conocer más o menos como yo por lo que es alguien cercano a nosotros.
Solo se me ocurre una persona que entra en esa descripción ¿Por qué no me habías dicho que te gustaba Ferb?
- ¿¡Qué!? ¿Ferb? - abre los ojos como platos y se levanta a toda velocidad - Eres un idiota ¿Cómo no te diste cuenta de que...¡Ahh! - la chica molesta da una fuerte pisada en el cesped - ¡Es algo tan obvio! - la pelinegra sale corriendo deprisa.
- ¡Isabella espera! - corre tras ella, como es más rápido la alcanza de inmediato y la toma del brazo a mitad de la cancha - ¿Si no es él quién es?
- Eso no importa ahora se que ha sido una estupides amar a alguien como...
- ¿Cómo quién? ¿Por qué te molestaste?
- Yo...quiero estar sola Phineas.
- Isabella necesito que me digas quien es el tipejo.
- ¿Tipejo?
El pelirrojo suspira con fuerza -
Bueno el chico ese que te gusta - dice con un tono de molestía.
- ¿Por qué hablas de él como si no te agradara?
- Por que no me agrada - responde con seriedad.
- Ni siquiera sabes quien es - frunce el ceño.
- Lo sé pero...- el pelirrojo guarda silencio.
- ¿Pero qué? - le exije ella.
- Nada.
- ¿Cómo nada?
- Pues...esto es raro, nunca te había visto interesada en alguien. Y hablas de este chico como si fuera la maravilla, estas muy atontada con él temo que pueda hacerte daño por eso necesito saber quien es, para cuidarte y ver si en verdad es todo lo que tu dices.
Isabella mira a los ojos a Phineas, este parece sinsero y preocupado por ella, al principio le provoca ternura tanto que inclina su cabeza y sonrie de lado pero luego de pensarlo le provoca mucha gracia y suelta una carcajada.
- ¡Jaja! ¡Jaja! ¡Jaja! Hay Phineas ¡Jaja! eres tan inocente - el pelirrojo la mira confundido - ¿Cómo es qué jaja no te das cuenta? - la chica recupera la compostura - Espera un momento...Si no te conociera diría que estas celoso y lo peor es que no sabes ni de quien.
- ¡Yo no estoy celoso! - grita sonrrojado.
- No tienes por que estarlo, ahora podrías soltar mi brazo - la chica señala la mano de Phineas que aun esta sujetando con fuerza su brazo.
- Lo siento - responde soltandola de inmediato - Entonces no me diras quien es el chico "perfecto" - el chico hace comillas con los dedos.
- Teníamos un acuerdo perdiste el juego por lo que aun será mi secreto.
- Isabella nadie encaja con los datos que me diste. Nadie puede ser tan perfecto como las maravillas que dices de él.
- Claro que lo hay, él es así no puedes culparme por que sea perfecto.
- Seguro es un idiota más, que se cree él mejor incluso tu lo llegaste a creer - dice molesto cruzandose de brazos - ¿Por qué él? Yo creía que te gustaban otro tipo de chicos.
- ¿Alguna vez te pusiste a pensar en qué clase de chicos me gustaban?
- Pues no pero no creí que te gustaría alguien así. No creo que alguien como ese sea tu tipo de chico.
- Y según tu ¿Cuál sería el chico para mí? - le pregunta con una sonrisa burlona de lado.
- Alguien como...
- ¿Cómo quién? - le interrumpe.
- Como yo.
La sonrisa de la chica desaparece de inmediato formando una línea perfecta y sus ojos se abre como platos en verdad no esperaba una respuesta así.
- Izzy ¿Estas bien? - pregunta al verla con esa expreción.
- Yo...wow...no vi llegar eso. Es tan wow...yo...amm...estoy sin palabras. ¿Qué quisiste decir con eso?
- ¿No es obvio? - pregunta Phineas levantando una ceja y dando un paso hacia enfrente.
- Para mí no - responde ella aun confundida.
Sin pensarlo o decir una palabra más Phineas toma las mejillas de la chica con ambas manos y se acerca a ella hasta juntar sus labios, la pelinegra se queda helada, completamente estatica sin mover un solo musculo, Isabella no lo cree hasta que se deja llevar y cierra los ojos, poco a poco va correspondiendo al beso, es dulce y lento sus labios se mueven con lentitud y mucho cuidado como si temieran lastimar a los labios vecinos con los que tienen contancto. La chica sigue igual, sin moverse desearía que el momento jamas se rompiera pero es inevitable Phineas se separa con lentitud.
- Tenía que hacerlo aunque fuera una vez - susurra y libera su rostro - Lo lamento - vuelve a hablar y comienza a caminar para alejarse de ella.
Isabella tarda unos segundos en procesar lo que acaba de pasar, por fortuna el chico no ha corrido lo que le permite alcanzarlo y tomarlo del brazo como él hizo con ella.
- ¿A donde cres qué vas?
- No lo sé. Por favor sueltame.
- No puedes simplemente besarme e irte como si no fuera algo importante.
- En verdad lo siento, no debí pero es verdad que tuve celos, escucharte hablar del amor que le tienes a alguien que parece inalcanzable y es todo lo que quieres me hizo quererte demostrar que hay más de una posibilidad para tí. Se que no te importara y la verdad es que quiero que seas feliz, acercate a él dile lo que sientes seguro te aceptara sin pensarlo y serán felicez, si tu eres feliz yo soy feliz. Pero recuerda que siempre estare para tí, si te hiciera algo malo yo lo mataría y ten en mete que siempre tendras tu otra posibilidad.
- Oh Phinny, para mí no hay más posibilidades, me enamore desde hace más de diez años creeme que te digo que no me atonte con un idiota quizas si me atonte y enamore pero fue de alguien especial que ve por los demás antes que a él. Gracias por el consejo en verdad alfin podre decir ahora mismo lo que siento. Solo tengo una posibilidad...
El chico no lo resiste más y con todas sus fuerzas se libera de la mano de la chica y le da la espalda para continuar con su camino.
- ...y esa eres tu - el chico se detiene en seco esta helado ni siquiera se molesta en voltear a verla pero se queda ahí para escucharla hablar - Mi idiota distraido de 16 años divertido, para nada un patán, atletico, educado, popular, listo, creativo, divertido de hermosos y soñadores ojos azul fuerte, mi dulce y guapo pelirrojo que al parecer a demostrado ser celoso de su competencia imaginaria. No se como no lo descubriste - ella suelta una risita él se gira de inmediato.
- ¿Lo dices en serio? - ella afirma con la cabeza - Oh Izzy - él chico se acerca con rápidez y la vuelve a tomar de las mejillas y a besar pero esta vez de forma apasionada como si en ese beso se fueran todas las penas de una vida, las manos del chico cambian de dirección hacia sus hombros y de ahí bajan por su espalda hasta su cintura para así roderla ella rodea él cuello del chico, ambos sonrien durante todo el momento hasta que Isabella se separa un poco para verlo a los ojos.
- No solo me gustas Phinn yo te amo.
- Y yo a tí Izzy. Tal parece he sido muy distraido.
- Si, así es - responde entre risas.
- Prometo compensarlo.
- Ansio ver como lo haces.
- Aun me parece que quince preguntas en el juego no fueron justas.
- Yo creía que con las primeras tres lo descubririas teníendo en cuenta que hablabamos de tí.
- Bueno da igual ¿Responderías otra pregunta?
- Con esta serían dos Phinny - responde riendo.
- Cierto, ¿Is quieres ser mi novia?
- Umm no lo sé - se acerca y lo besa - ¿Eso responde tu pregunta?
- Umm creo que necesito más para asegurarme - le dice sonriendo mientras se acerca a ella.FIN : heart:
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COLECCION DE HISTORIAS DE LIZY98
FanfictionLas historias no me pertenecen a mi sino a "Lizy98" en DeviantArt solo cree esta collection para tener mis historia favoritas de ella juntas este es el link de su DA original con todas sus historia: lizy98.deviantart.com para todo Phinbella adicter