COLECCION DE HISTORIAS DE LIZY98

Phinbella Or Ferbella

-¿¡Cómo pudo ocurrir esto?! es decir yo soy quien le gustaba no él, todos estaban de acuerdo, todos me lo dijieron incluso él. Sólo esto me pasa a mí.
Suspiro con fuerza y me dejo caer en la cama con la cara contra mi almohada. Escucho pasos, por un momento espero que sea ella pero me decepcionó al escuchar la voz de él.
-¿Y cómo te fu...creo que con verte lo sé.
Siento cuando se sienta a mi lado.
-¿Te arrepentiste?
-No-susurro.
-¿Entonces qué pasó?
-A ella le gusta alguien más.
-Imposible, a ella le gustas tu y como no tienes idea.
-No, ella me lo dijo.
-¿Ella te lo dijo?
Muevo lentamente la cabeza aceptando mi verdad.
-¿Quién?
Recuerdo nuevamente el shock que sufrí cuando ella me dijo que gustaba de mi hermano. No puedo decírselo a él ni siquiera le gusta ella.
-Prefiero no hablar de eso.
-Talvez sea un mal entendido, mira...
-¡¿Un mal entendido!? ¡carajo ella dijo me gusta...-me relajo-¿Sabes qué? no importa.
Salgo de nuestra habitación y a continuación de la casa.
Al cerrar la puerta veo la casa de enfrente y la veo saliendo a ella, se encamina para llegar a mí. Le sonrió por cortesía pero realmente no estoy de ánimos luego de su confesión.
-¿Por qué te fuiste sin decir adios? venía a ver que onda contigo. Sólo entre a la cocina por el vaso de agua y cuando volví a la sala ya no estabas.
-Tenía cosas que hacer, lo siento.
Saca una de sus manos de la chamarra y me golpea con su puño en el hombro.
-Auch-me quejó sobandome.
-Lo que hiciste no fue cortés
-Oh y esto si.
Frunzo el ceño.
-No seas llorón ¿vas a salir?
-Sí...caminare un rato.
-¿Necesitas compañía?
-No realmente.
-¿No?
Nunca me había negado a su compañía por lo cual se confunde.
-¿Por qué?
-Simplemente quiero estar sólo Isabella ¿acaso no lo entiendes? ¿o es qué tu enamoramiento te hizo más tonta?
Frunce el ceño.
La ignoro, paso a su lado dándole un empujón con el hombro y comienzo a caminar.
No se porque actúe así. No es su culpa querer a mi hermano y no a mí, además no sabe que ella me gusta cuando me confesó eso no buscaba lastimarme aunque naturalmente lo hizo.
Meto mis manos en las bolsas de mi abrigo aún hay estragos del pasado invierno y como ya son las siete empieza a hacer más frío. Bajo un poco la cabeza hundiendola en el cuello de mi abrigo para calentarme un poco más y sigo caminando.
Aún sin destino y con la mirada cacha voy recordando lo que pasó hace unos minutos.

Flash Back...

-Izzy...no amm...Bella...¡no!...Isabella se que somos amigos bueno no...hay no puedo empezar así. ¡Me gustas!
-¿Hablando con tu novia imaginaria?
Despegue los ojos del espejo y me gire de inmediato para ver al recién llegado.
¿Cuándo llego? con duda pensé.
-¿Qué haces aquí? creí que no estabas en casa.
-Sin duda.
Me enoje.
-¿¡Qué no sabes tocar!?-grite molesto.
-Relájate esta también es mi habitación. ¿Hoy alfin le dirás lo qué sientes?
-No se de que hablas.
-Aja-me contestó sarcasticamente-Ambos sabemos que hablo de Isabella.
Suspire.
-Okey sí, ambos sabíamos de que hablabas pero estamos consientes de que es difícil.
-Decirle a una chica que te gusta no es tan difícil como parece luego de que comienzas a tener confianza en ti mismo. Eres una de las personas más confiadas que conozco sólo ve y dicelo.
-Isabella es especial y lo sabes.
-Puede que pero es una chica ¿quién dice qué no le gustaría que fueras a relevelarle todo lo que sientes por ella?
-Amm pues...no lo sé hermano ¿y si deja de hablarme?
-Vale la pena arriesgarse.
Sus palabras me animaron a cruzar la calle y tocar su puerta, al no desconsentrarme cuando abrió, al no ir tambaleante hacia su sofá y a sentirme confiado.
-¿Y entonces venías?-me dijo ella.
-¿Qué ya no puedo visitar a mi amiga?
Suspiro.
-Supongo que sí. Pero estaría mejor que hablaras y no sólo me miraras.
Creí que todo iba bien pero al parecer mi atención se había desviado a sus hermosos ojos azules.
-Sí lo siento. Esque venía a tocar un tema distinto contigo.
Levantó una ceja, su expresión confundida la hacia ver más linda.
-No comprendo.
-Se que no somos tan amigos de echo aún no se como empezamos a ser amigos pero ese no es el punto, lo que pasa esque me dijieron que estás enamorada y...
-Yo no estoy enamorada.
-¿No? te empezaste a acercar a mi hermano y a mí hace unas semanas cuando antes solías alejarte, mira yo creo que tu estas enamorada de...
-Okey sí...me gusta tu hermano.
-¿¡Qué!?
Abrí los ojos como platos. Yo no esperaba eso, yo pensé que negaría que estaba enamorada de mí pero de eso a confesar que le gustaba mi hermanastro era algo completamente distinto e inesperado.
Tuve que apretar el descansa brazos con mi mano hasta que mis nudillos se pusieron blancos para confirmar que no estaba teniendo una pesadilla y controlar mi respiración para no hiperventilar.
-Ya entiendo estas de broma-comencé a reirme de una forma espeluznantemente nerviosa.
Supe que era espeluznante por la mirada que ella puso, creí que en cualquier momento sacaría mágicamente un arma y me dispararía para que parará pero espero a que recuperará un poco de mi cordura.
-No es broma ¿cierto?
-¿Me dices cuándo yo he bromeado acerca de eso?
Baje la cabeza pero la levante de inmediato para que no notase mi tristeza.
-Sí, tienes razón. Eres tan amargada que no bromeas.
Apretó molesta sus hermosos labios.
El molestarla era mi única forma para que ella no notará mi decepción, mi dolor interno y el como mi corazón explotaba en mil pedasos.
-No se lo vayas a decir-me pidió.
Pensé en decirle "no temas a él no le molestará" pero de inmediato pensé que no quería que él se enterase nunca, es decir aunque no le guste ella debía admitir que no era nada fea, y que con los años sus curvas se habían moldeado muy bien, su personalidad no era la mejor pero al saber de su interés por él podría empezar a interesarse por ella y eso si no lo podría resistir.
-Descuida no se lo diré.
-Oye-la mire fijamente. Jugaba con sus dedos nerviosamente-No se si es mi imaginación pero me pareció que no te gusto lo que te dije.
-Naturalmente no-levanto una ceja por mi osadia-Tenerte como cuñada sería horrible, a duras penas te soporto.
Me miro molesta de echo me sorprendió que no me golpeara.
-¿Oye me das un vaso de agua?-le pedí para desviar la atención a otra cosa.
-Claro, espera aquí-se levantó del sofá igual que yo minutos después.
Salí de su casa directo a la mía porque eso se estaba poniendo raro.
¿Isabella enamorada de él? ¿Como era eso posible?

Fin Flash Back.

-¡Oye!-siento como alguien me toma del brazo y me hace parar.
Me giro a la defensiva dispuesto a pelear-¿Isabella?
-Sí idiota. ¿Qué te pasa?
-¿¡Qué me pasa!? ¿qué te pasa a ti loca? ¿por qué me has seguido?
-Pues por que...
-Haber inventate algo bueno. Odias estar conmigo y ahora que alfin quiero que no estés conmigo insistes en seguirme.
-Yo no odio estar contigo, somos...amigos.
Me lo dice con tan poca seguridad que ni ella se lo cree.
-Si quieres acercarte a mi hermano no es necesario que me hables, siempre me odiaste, deja de sacrificarte obligandote a juntarte conmigo de todas maneras a él no le gustas le gusta alguien más.
Es cierto, a mi hermano le gusta otra chica pero me arrepiento de haberle dicho eso a Isabella, probablemente le he roto el corazón porque ella ha roto el mío.
-Eso ya lo sé-me dice sería sin ninguna expresión en su rostro que delate dolor.
-¿Lo sabías?-pregunto sorprendido.
-¿Olvidas qué tu hermano es mi mejor amigo? él ya me lo había dicho.
-¿Ósea que estarías dispuesta a estar con él sólo como amiga aunque él tenga a alguien más? vaya eso si es amor.
Y así es como yo estaré porque no le gustó a ella.
-Eso es una pende...bueno si tuviera que enfrentarme a eso tal vez si sería amor pero yo no tengo que vivir eso.
-Ya me perdí.
Desvía la mirada, se abraza aunque no se ve que el frío sea quien la afecta, trae abrigo y guantes esta calentita pero aún así lo hace. Suspira dejando salir vaho de su boca a causa del frío.
-Mentí ¿sí?
-¿Sobre qué?
-Sobre ustedes, no podía decirte quien me gusta porque es una locura así que te dije que me gustaba tu hermano pero no es así.
-¿No? ¿entonces quién te gusta? ya me quedo claro que no soy yo, me odiaste desde que me conociste, desde que caí bajo tu casa el día en que acabo la dictadura.
-Lo sé idiota pero tienes ese algo que ni yo entiendo.
Levantó una ceja.
-Espera ¿estás tratando de decirme qué yo te...
No me deja hablar más, cuando menos me lo espero ella ya me está besando y obviamente es algo que le dejo hacer por muchos minutos.
-Sí idiota. Tu eres quien me gusta-me confiesa al separarse.
-¡Wow! eso es tan genial.
Un momento.
Golpeó su hombro con mi puño, naturalmente sin mucha fuerza.
-¡Oye!
-Tu eres la idiota por asustarme así.
Aprieta los labios, frunce el ceño y me suelta una cachetada. Como era de esperarse por mí, ella no mide su fuerza.
-Eres un llorón Phineas Flynn. Además no debes golpear a tu nueva novia imbécil.
-¿Nueva novia? no recuerdo habertelo propuesto.
-No es necesario. Yo ya lo decidí por ambos.
Como siempre Isabella García Shapiro ex miembro de la extinta Resistencia de Danville quiere darme órdenes. Hacia más de seis años que no me daba una orden pero esta última no está mal.
Me encojo de hombros.
-Pues ya que-tomo su cintura la acerco a mí y la beso apasionante bajo la luz de la luna.

Fin .