COLECCION DE HISTORIAS DE LIZY98

Cuando nos volvamos a ver Pt. 9- Phinbella

Respiro para tranquilizarme. Phineas no puede volver a afectarme.
Alguien se sienta a mi lado y me
toca el hombro. Me giro quitandome las gafas.
-¿Isabella?
-¿Si?
Arqueo una ceja.
Frente a mi esta un chico de ojos azul claro y cabello negro lacio, es lindo pero como he dicho no quiero nada con nadie, aún así lo veo confundia porque no lo conozco pero al parecer sabe mi nombre.
-Seguro estaras confundida. Se que eres nueva y bueno me dijieron tu nombre, te lo iba a preguntar yo mismo pero estaba muy nervioso. La verdad creo que eres muy guapa.
-Emm...amm, gracias.
-No se merecen. Mi nombre es Josep, mucho gustó.
Me tiende la mano, para no ser descortes se la tomo.
Crei que me la estrecharia pero en lugar de eso, besa mi mano con delicadeza sin apartar sus ojos de mí.
Suelto una risita boba...un momento.
-¿Dijiste que te llamas Josep?
-Así es-me dice con una sonrisa sin soltar mi mano-¿Por qué?
¿Acaso ese no era el nombre del ex mejor amigo de Phineas aquel qué se metió con su novia? Creo que sí pero este Josep no puede ser el Josep de la historia. No pueden haber tantas casualidades.
-No, por nada. Esque se me hizo un poco familiar el nombre.
-Oh, ya.
Llega el profesor.
-Me tengo que ir, sólo vine a hablar contigo. Bye.
-Bye.
Se pone de pie y se marcha.

Minutos antes...

Phineas:

-Debo ir a hablar con ella-le digo a Mike.
-Sí, ve con todo mi pequeño pelirrojo-me da un puñetazo en el hombro.
Es como buena suerte en idioma de chicos.
Cuando me giro de vuelta para verla veo que alguien se sienta a su lado y llama su atención tocando su hombro.
Frunzo el ceño y aprieto los puños con tal intencidad que se ponen blancos. Son más que celos, si fuera cualquiera serían sólo celos pero esta es una furia iracunda.
-Es ese hijo de puta-digo furioso y entre dientes para no gritar.
Es ese maldito traidor, es Josep.
-Calmate-me dice Mike.
-¿Cómo puedes pedirme que me calme? esta con ella y besa su mano.
Estoy por levantarme pero Mike me toma de los hombros.
-No queremos repetir lo que pasó el semestre pasado ¿o sí?-me dice en tono severo.
-Pero esta con ella.
-Phineas, la última vez conseguiste una advertencia pero te dijieron que si volvias a pelearte dentro de las instalaciones te expulsarian. Además no hay de que preocuparse, esa chica es más que tuya.
Me trató de relajar, Mike tiene razón. Cierro los ojos y pongo mis puños sobre la mesa.
-Ya se fue-me dice Mike.
-¡De manera que sólo vino a estar fregandome la vida!-levantó la voz pero no lo suficiente para que se convierta en un grito.
El profesor ya ha llegado de modo que ya no puedo ir a hablar con ella. Un motivo más para odiar a ese idiota.

Isabella:

Me concentro en la clase para dejar de pensar en mis problemas.
Apenas noto cuando pasan las dos horas, ni siquiera participe, ni mire a mi alrededor.
Veo que los demás se levantan y se van a toda prisa, comienzo a recoger mis cosas y bajo los escalones para llegar a la puerta.

Phineas:

-¿¡Por qué tarda tanto!?-le digo a Mike.
Estamos ya afuera del salón, casi todos han salido menos ella.
-Sencillo, es una chica. Bueno te dejo, tengo clase al otro lado del campus. Suerte.
-Gracias.
Creo que en vez de esperar debo ir por ella. Cuando estoy por entrar choco con alguien.
Es ella, nuevamente le tiré la carpeta y se ha agachado a recogerla con velocidad.
Al levantarse alfin me da la cara.
¡Oh por Dios!
Abro los ojos como platos al igual que ella.
Pese al cabello y que se ve más hermosa y madura es la misma que vi hace ocho años. Siento que me desmayo, estoy mareado estoy en shock, pensé en ella cuando conocí a la "chica misteriosa" pero no imagine que realmente era ella.
-¿I...I...
Las palabras no fluyen, es como si alguien me apretara el cuello para que no hable. Al decir su nombre se que será verdad, y es algo que mi cuerpo se niega a aceptar pero esta aquí frente a mí.
-¿I..Is..Isabella?
Me hace falta colocar todo mi peso en la mano que apoyo en la pared para no perder el equilibrio.
-Eres tu, pero tu...¡no puedo creerlo estás aqui!
Mi éxtasis es tan grande que la abrazo con todas mis fuerzas. Ella se queda helada, completamente firme entre mis brazos. Cierro los ojos y me permito inhalar su escencia, huele a flores, huele a ella.
Me trasporto a hace casi nueve años cuando nos besamos por primera vez, y a hace unas horas cuando nos entregamos al otro con tanta pasión sin saber que éramos nosotros.
Me toma de los hombros y me separa de ella.
-¿Qué haces?
-¿No es obvio?
-No puedes simplemente abrazarme luego de casi nueve años como si nada, no somos NA-DA.
-Yo no fuí quien se fue sin decir adiós-pese a que estoy más que feliz por reencontrarnos me molesta que se comporte así y me defiendo.
-Tu te ganaste que me fuera así. Además ya no importa.
-Oh claro que importa, a mí me importa.
-¡Pues a mí no!-da un paso hacia adelante para gritarme más de cerca.
-¡Pues a mí si!-también doy un paso hacia adelante.
-¡No me interesa! ¡No pienso hablar al respecto!-otro paso.
Estamos tan cerca y ella tan linda.
La tomo de las mejillas y la beso en los labios.
Me vuelve a separar de ella con fuerza y me suelta una cachetada.
-¿¡Cómo te atreves!?
Me vale madres la cahetada, prometí que la próxima vez que la viera la besaria, la tomo de los hombros y la estampó en la pared, la beso nuevamente.
Tarda pero alfin cede y me corresponde al beso que cada vez se intensifica más. Ayer los besos eran buenos, pero ahora sin alcohol, en mis cinco sentidos son más que perfectos.
Levanto una mano y la colocó en su mejilla, la otra en su cintura. Quizás me vuelva a separar pero vale la pena tenerla así.
Mis sospechas por fortuna no se cumplen y rodea mi cuello con sus brazos.
Isabella me hace tan feliz tenerte de vuelta en mi vida.

Continuará..