Sí, profesor [TERMINADA]

Capítulo 39: Preparados

¿QUÉ HA OCURRIDO HASTA AHORA?

―¿A qué hora es el concierto? ―Pregunté, al recordar que justamente ese día, el 28 de Mayo, era la graduación.

―A las 22h ―Me contestó, después de pensárselo unos segundos―, pero se tiene que estar aquí 2 horas antes para ensayar. ¿Eso es un sí?

―Seguramente, pero lo tengo que hablar con mi madre. ―Calculé mentalmente y supuse que me daría tiempo de llegar al concierto (en el caso de que tocara en él), ya que la graduación era a las 16h. Realmente me hacía ilusión poder tocar en la Orquestra Sinfónica, era como un premio de mí para mí.

Me despedí de Miguel y, al girarme, vi a Jack. Me estaba mirando mientras sacaba el violín de la funda sin prestarle demasiada atención, pero cuando yo me giré, bajo la mirada y lo terminó de sacar.

CAPÍTULO 39: PREPARADOS

Yo lo miré y después me dirigí a la puerta para salir del aula y no prestar demasiada atención a Jack.

Nada más salir, me encontré con Pau demasiado cerca de otro chico, cogidos de la mano. Supuse que era Roberto; estaban apoyados en la pared.

Me giré hacia el otro lado para no deprimirme. Los miraba y me imaginaba a mí, sola. Por un momento pensé que me gustaría ser homosexual y no tener tantos problemas. No pensar en lo que pueda decir la gente de mí por si tengo una pareja u otra. Por si es chico o por si es chica. Por si es un compañero de clase o un chico de una fiesta. Por si es un estudiante o es un profesor.

***

Seguí por el pasillo y me encontré con Laura, que iba hablando con otra chica.

―¿Qué quería Miguel? ―Me preguntó en cuando me vio―. He intentado escuchar lo que decía, pero Pau no me paraba de hablar del examen que ha hecho hoy y no he podido oír nada.

―Me ha comentado de tocar en la orquestra sinfónica. ―Le dije contenta, sonriendo.

―¿En serio? ―Dijo ella mostrando una grande sonrisa―. ¡Enhorabuena! ―Añadió, y me dio un abrazo.

―Felicidades ―Me dijo también la otra chica sonriendo, a lo que yo le di las gracias.

―¿Vas a decirle que sí, no? ―Me preguntó Laura.

―Supongo ―Le respondí yo―, pero todavía no lo sé. Tengo que hablarlo con mi madre. Además, son muchas más horas de dedicación... Exactamente 2 horas cada día.

***

En cuando llegué a casa lo hablé con mi madre, que enseguida se puso muy contenta y me dijo que sí.

―Pero ten en cuenta que tendrás poco tiempo libre ―Me advirtió.

―Sí ―Le contesté yo―, ya lo sé. Pero creo que los fines de semana no se ensaya. Además, como empezamos a las 18h, tengo un poco de tiempo antes.

―Como tú quieras.

***

Los días siguientes pasaban rápido. En clase ya casi no hacíamos nada, ya que ya habíamos terminado los exámenes. Muchos días, después del Instituto, íbamos todos a tomar algo o a comer, y después yo me iba al conservatorio.

Al final había entrado en la Orquestra Sinfónica de Barcelona. En ese grupo, había conocido gente nueva; aunque seguía viendo a Pau y Laura antes de empezar a tocar.

Ahora éramos 7 que tocábamos la flauta: Carlos, Andrea, Marc, Judith, Mireia, Silvia y yo. Jack tocaba el violín, y estaba sentado al otro lado, de manera que seguíamos sin hablarnos ni nada.