Querido, Caleb:
No puedo parar de pensar
En ese gran 'te quiero' que dejaste en mi ventana
Me gusta saber que piensas en mí
Casi tanto como yo pienso en ti
No te he visto realmente en tanto tiempo
Las semanas se las ha llevado el viento
Y si pudiera ponerle un repetir
A ese día donde te conocí
Lo haría
Te conocería mil y un veces
Y jamás me cansaría
Quien lo diría
Podría jurar que no me enamoraría [con tanta intensidad]
Caleb, vamos a dejar de sufrir
Apuesto por el amor verdadero y sincero
En este mundo de perversos y de corazones rotos sin remedio
Hay espacio para mentirosos y esquizofrenicos
Pero aun no es momento de pensar en ello
Estas ocupado haciendo tu supuesto plan siniestro
Y ahora sé que vendrás
De mi no te vas a olvidar
No mientras contigo lleves ese lápiz y ese papel
Donde dibujas, y por fin encuentras quien has de ser
Yo también te quiero Caleb
Y quisiera dejar de dudar tanto
Eso me desespera
Y puede que a ti también te desespere igual
Confío plenamente en que estoy lista
Pero a veces entro en pánico
Y cuando mi cólera traspasa las agujas de mi cerebro
No logro pensar con claridad
Y solo me consigo alterar
Agradecería que ignorases lo de la carta de ¿atrás?
Fue solo una tontería
No es que llegase a cierto extremo donde me mataría
Solo a una metáfora me refería
¡No te asustes!
Estoy bien
Y deseo que tu también lo estés.
ESTÁS LEYENDO
Dear, Caleb.
Tiểu Thuyết ChungQuerido, Caleb. Así empiezan las cartas, para el chico de los cigarrillos, ese que rara vez sonreía, el que a un lado de mi ventana siempre se encontraba, pero en algunas madrugadas escapaba de casa, por supuesto, yo rara vez sabía donde estaba, y m...