Capitulo treinta y siete

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Camus había estado observando a Dégel desde la distancia, se dió cuenta que había salido de la cabaña en medio de la madrugada .Algo en la forma en que Dégel se movía le había parecido extraño, y Camus había decidido seguirlo sigilosamente.
Se movió con cuidado, intentando no hacer ruido mientras seguía a Dégel. Mantuvo una distancia prudente, observando cómo Dégel se detenía en un claro y se dejaba caer de rodillas.

Sintió un poco de preocupación  al ver a Dégel en ese estado. No sabía qué estaba pasando, pero podía ver que Dégel estaba sufriendo. Se acercó un poco más, intentando escuchar lo que Dégel estaba gritando.

Cuando escuchó las palabras de Dégel, Camus se sintió conmocionado. No sabía que Dégel sentía de esa manera, y no sabía cómo reaccionar. Se quedó ahí parado en la oscuridad, intentando procesar lo que acababa de escuchar.

Entonces decidió acercarse lentamente sin que se dieran cuenta. Dégel se sorprendió al sentir la mano de Camus sobre su hombro. Se volvió hacia él, con una expresión de sorpresa y vulnerabilidad en su rostro.

Camus se acercó un poco más, con una voz suave y calmada - Entonces es esto lo que te preocupa - Susurró con su mano aún sobre el hombro de Dégel.

Dégel se sintió un poco incómodo, no sabiendo cómo reaccionar. Se había sentido tan solo y vulnerable momentos antes, y ahora Camus estaba allí, tocando su hombro y hablando con él de una manera tan suave y compasiva, finalmente escuchó toda la declaración.

Dégel se encogió de hombros, intentando parecer más fuerte de lo que se sentía - No es nada - Intentando minimizar sus sentimientos.

Pero Camus no se lo creyó. Podía ver la vulnerabilidad en los ojos de Dégel, y sabía que estaba mintiendo. Se acercó un poco más, su voz aún más suave y compasiva.

- Dégel, no tienes que fingir conmigo... Puedes hablar conmigo. ¿Qué es lo que te preocupa?

Pero el contrario no decía palabra alguna... Simplemente intentaba evitar mirarlo a los ojos.

Camus se sentó a su lado en la nieve, con una voz suave y compasiva - Dégel, no hay que fingir. Yo también luchó con mis emociones. Todos lo hacemos. Pero la diferencia es que yo he aprendido a manejarlas un poco más.

Dégel lo miró con curiosidad, sorprendido por la honestidad de Camus - ¿Cómo lo haces? -  Preguntó, con una voz llena de interés - Eso siempre me recalcaba mi maestro Krest.

Camus sonrió suavemente - No es fácil, pero he aprendido a reconocer mis emociones y a no dejar que me controlen. He aprendido a respirar, a calmarme y a pensar antes de actuar.

Dégel se sintió un poco impresionado por Camus - Eso suena fácil, pero no lo es... No para mí - De inmediato bajo su rostro.

Camus asintió - No, no lo es. Pero es posible. Y yo estoy aquí para ayudarte, si lo necesitas.

Nadie se había ofrecido ayudarlo de esa manera antes.  Dégel se sintió un poco más esperanzado, un poco más seguro de que podría manejar sus emociones y encontrar la paz.

Camus extendió su mano y la colocó sobre la espalda de Dégel, acercándolo hacia él. Luego, lo abrazó suavemente, permitiendo que Dégel se sintiera seguro y protegido.

- También tengo problemas para manejar lo que dice mi corazón. No siempre sé qué hacer o qué decir. Pero lo que sí sé es que estoy aquí para ti, y que te apoyaré en lo que necesites, en el tiempo que yo esté aquí.

El abrazo de Camus fue como un bálsamo para el alma de Dégel. Se sintió envuelto en una sensación de calor y seguridad, y por un momento, se olvidó de todos sus problemas y preocupaciones. Se sintió un poco más seguro y confiado en sí mismo, y decidió abrirse a Camus.

- Camus, cuando te miro... - Comenzó a decir, con una voz suave y vacilante.

Camus lo miró con curiosidad, su expresión suave y atenta - ¿Qué pasa cuando me miras? -  Preguntó, con Interés.

Dégel se sintió un poco nervioso, pero decidió seguir adelante - Me siento... - Comenzó a decir, y luego se detuvo, buscando las palabras adecuadas - Me siento como si mi corazón se detuviera. Como si todo a mi alrededor desapareciera y solo quedara tú.

Dégel siguió hablando,con una voz llena de emoción. - Me siento como si estuviera flotando en el aire, sin saber qué hacer ni dónde ir. Pero al mismo tiempo, me siento como si hubiera encontrado un ancla, algo que me mantenga firme y seguro.

Camus lo miró con una expresión intensa, con su corazón latiendo con fuerza en su pecho. Podía ver la sinceridad en los ojos de Dégel, y se sintió conmovido por sus palabras.

- Me siento como si te necesitara - Continuó Dégel, su voz apenas un susurro - Como si no pudiera vivir sin ti. Y eso me asusta, Camus. Me asusta porque no sé qué hacer con estos sentimientos. No sé cómo manejarlos.

Camus se sintió conmovido por la vulnerabilidad del contrario. Se dio cuenta de que Dégel estaba arriesgándose al abrirse de esa manera, y estaba agradecido por la confianza que Dégel había depositado en él.
Cerró los ojos por un momento, como si estuviera recopilando sus pensamientos y emociones. Luego, los abrió de nuevo y miró a Dégel con una expresión intensa.

- Dégel, yo también me siento igual - Dijo Camus, con una voz llena de sinceridad - Desde que llegué aquí y te conocí, he sentido algo que no puedo explicar. Algo que me hace sentir vivo, que me hace sentir como si hubiera encontrado algo que había estado buscando durante mucho tiempo.

Dégel no esperaba  que Camus se sintiera de la misma manera, se sintió un poco abrumado por la emoción - ¿Qué es lo que sientes? - Preguntó Dégel, en un susurro.

Camus se acercó un poco más a Dégel, con su rostro cerca del suyo -Siento que te necesito  -  Dijo Camus al fin con una voz llena de pasión. -Siento que no puedo vivir sin ti. Y eso me asusta, Dégel. Me asusta porque no sé qué hacer con estos sentimientos. Pero también me hace sentir vivo... Pese a mi condición en mi era, jamás creí sentir las mismas emociones como un ser humano ordinario.

Dégel se sintió como si estuviera flotando en el aire, sin saber qué hacer ni dónde ir. Pero en ese momento, supo que no estaba solo. Supo que Camus se sentía de la misma manera, y eso lo hizo sentir un poco más seguro.
Poco a poco las dudas se iban disipando.

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