The Past Is Behind [Supernatural]

14. Confesiones de cazadores

14. Confesiones de cazadores

Los tres cazadores no tardaron en llegar al punto que Sam les había indicado. Bobby había sido el que tardó más ya que él estaba en la otra punta del pueblito de Dodge City.

Emma estaba apenas consciente pero escuchaba voces. Al abrir los ojos se mareaba y solo veía personas borrosas. En esa condición pudo ver que había tres personas a su lado. Notó que una era extremadamente alta, otra tenía una gorra roja en la cabeza y supo que el que quedaba era el hermano del más alto. Se sentía avergonzada de volver a encontrarse en una situación que se mostraba débil. Estaba cansada de que cada encuentro con los Winchester se viera así.

Sam se encargó de volver a coser las heridas proporcionando una dosis de alcohol donde cosía para que Emma no sufriera. Luego de limpiarle la sangre seca de la cara e intentar desvanecer un poco esos moretones, la dejaron descansar. Emma no se resistió cuando Morfeo la tomó en sus brazos.

El menor de los hermanos se fue a la lavar la sangre de Emma al baño cuando Dean se le acercó. Se apoyó en el marco de la puerta y miró a su hermano.

-¿Estás bien? -preguntó el mayor. Estaba empezando a sacar conclusiones de que su hermano estaba interesado en la castaña.

-¿Por qué no lo estaría? -preguntó él sin entender qué buscaba su hermano.

Dean levantó los hombros y miró hacia abajo. Luego miró a su hermano a través del espejo del baño.

-Tal vez podamos llamar a Cas. Ya sabes, para que la cure más rápido -ofreció el mayor sabiendo que el ángel Castiel respondería a su llamado y que tal vez Sam se sienta mejor sí sabía que Emma estaría bien.

-Cas tiene bastantes problemas como para ocuparse de nosotros -expresó Sam sin mirarle.

Después de que sus manos estuvieran limpias volvieron a la sala principal. Era una linda y pequeña habitación. Tenía un baño, una cama de una plaza y una muy pequeña cocina. Suficiente para los cazadores. Había una mesa al entrar a la habitación, donde había recortes de diarios y los dos informes de Mecha Roberson y Peter Randy. Dean se puso a hojear toda la información que Emma había recogido mientras que Bobby no se movía de estar a su lado. La miraba sin decir nada, simplemente recordaba cómo esa chica, antes llena de vida, se encontraba ahí con heridas y perdida.

Bobby sabía que Emma no estaba del todo bien. Lo sabía porque la conocía tan bien como a los Winchester. Ocultaba algo, tal vez algo grave y malo o algo que sintiera vergüenza o ira. No le compartió aquel secreto, pero sabía que existía. Se quedó pensativo, con las manos entrelazadas sobre su cara y los codos apoyados en sus rodillas. Ignoró la entrada de los Winchester.

-Esta chica tiene algo con los demonios -comentó Dean al ver la lista virtual que apareció en la laptop de Emma. Sam se le acercó y observó todos los casos enumerados.

-¿Por qué? -preguntó Sam mientras seguía leyendo.

-Un demonio mató a su familia -explicó Bobby. Era lo poco que sabía de aquella noche. Robert y él habían sido buenos amigos, luego perdieron el contacto pero Bobby de mantenía al tanto de las hijas de él. Cuando murieron, Emma se había encargado de informarles a todos los contactos del celular de su padre que Robert Carver, su esposa Tracy y su hermana Rachel murieron en un caso en la misma ciudad en la que estaban.

-¿Y qué? ¿Está buscando al hijo de perra? -preguntó Dean algo confuso y sarcástico al mismo tiempo.

-¿Acaso no hicimos lo mismo, Dean? -preguntó Sam defendiendo a la castaña. Dean levantó las manos como si se estuviera rindiendo.