Prólogo

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Nunca den por hecho que en la vida las cosas van a resultar como lo planean, la vida tiene sus altas y sus bajas y todo pasa por algo, es difícil, si, pero la vida se hizo para correr riesgos y adaptarse, vivir como mejor se pueda, pasar cada día como si fuera el ultimo y no pensar en la felicidad de los demás antes que en la tuya, porque para que alguien te quiera primero tienes que quererte a ti mismo.

Porque la vida no siempre te da lo que quieres, a veces te da justo lo que necesitas.

Guillermo Diaz, un chico de 17 años que iba en su penúltimo año de secundaria. La vida de Guillermo no fue fácil desde que nació, para nada, había nacido en una familia poco adinerada. El dinero no es algo tan necesario siempre y cuando se tenga amor, el amor que le daban sus padres, desafortunadamente para él, no pudo disfrutar de ese amor por más de 10 años.

Cuando Guillermo cumplió 7 sus padres tuvieron un accidente automovilístico en el que ambos perdieron la vida. La desgracia lo afecto tanto que después de eso muy pocas cosas lo hacen sonreír, muy pocas cosas lo hacían feliz, entre ellas su abuelita, una hermosa señora que era la bondad y la amabilidad personificada. Desde el accidente se había encargado de hacer que la vida de Guillermo fuera lo mejor posible, aun así, existen límites para una señora de tan avanzada edad, eso conllevaba a que Guillermo solo tuviera lo necesario y unos pocos caprichos de vez en cuando, uno de esos sin duda era un balón de fútbol.

Su vida no era color de rosa, pero nadie dijo que iba a ser fácil. Guillermo ayudaba en todo lo que podía, tenía buenas notas en la escuela y en sus ratos libres todo era fútbol. Era muy bueno desde niño, aunque nada que llevara a mayores, solo jugaba clandestinamente en las calles de su barrio, sin embargo, nadie podía negar su talento. Ahora, a sus 17 años era el jugador estrella del equipo de fútbol de su secundaria. Su único objetivo era graduarse y echar adelante su sueño de ser futbolista, sacaría a su pequeña familia de la pobreza, le daría a su abuela todo lo que se merecía y más, sin importar que, sin importar nadie.

Por otro lado estaba Samuel de Luque, el chico más despreocupado que te puedas echar en cara, nacido en una de las familias más adineradas de toda España. Samuel tenía su vida asegurada desde que fue concebido y él lo sabía, eso le había formado un carácter despreocupado y sin nada de estrés, todo le daba igual, pero eso fue lo que lo llevo a estar estudiando en "una secundaria de segunda clase".

Había descuidado sus estudios justo antes de graduarse, había perdido todo un año escolar y en una familia tan estricta como la que había nacido, sin duda alguna esa actitud sin vergüenza y mal agradecida debía ser castigada, por lo cual Samuel a sus 19 años fue obligado a estudiar en esa secundaria, pero no todo era tan malo, podía seguir haciendo lo único que no suponía una pérdida de tiempo para él, su amado fútbol. El nunca fue una persona demasiado caprichosa, por eso, y solo por eso, su padre le permitía practicar ese deporte, que desde niño había mostrado su máximo desempeño, siendo en boca de otras personas "un genio", pero aun así no hacía sentir a su padre medianamente orgulloso.

Desde pequeño no le falto nada nunca, todo lo que quisiera lo obtenía, una buena vida ¿no?, lo que nadie sabía era que Samuel tenía un secreto, era Homosexual. Samuel sabia de sobra que no había nada de malo con eso, pero sus padres, eso era otra historia... sus padres eran las personas más prejuiciosas que cualquier persona tuviera la desgracia de conocer, por eso decidió mantener su secreto en lo que era, un secreto, nadie tenía por qué saberlo, él podía casarse con una chica solo para aparentar, tener hijos y volverse viejo... sin haber sido feliz, no le preocupaba en lo absoluto, había sido obligado toda su vida a hacer cosas que no quería hacer, de resto su vida era completamente perfecta, pero pronto conocería a alguien, un chico trabajador y humilde a la par de terco y competitivo, un chico que pondría toda su vida de cabeza y mandaría a la mierda su plan de vida, pero sin importa que, un chico que por las buenas o por las malas...
Lo haría feliz.

Nacho había puesto un mensaje para el final del capítulo, pero debido a que lo he matado (o lo voy a matar) es imposible transmitirles el mensaje :3

Dreamers {Wigetta}Where stories live. Discover now