• . . • . ⋆₊⊹Eggsy no es el único candidato para convertirse en el nuevo Lancelot. Harry tiene a su hija, Anahid Hart: letal, brillante y con una lengua tan afilada como sus cuchillos. ¿El problema? El problema es que, aunque tiene todo lo nec...
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Un bufido de hastío abandonó mis labios mientras me atusaba el vestido, viéndome en el espejo.
Me di la vuelta frente al espejo; el vestido, elegante y oscuro, caía con la precisión de un torrente de agua negra. Suspiré, admitiendo que al menos era lindo.
El escote estructurado, las mangas largas, la falda que se estrechaba hasta las rodillas antes de abrirse en una leve cola. Detrás, una pequeña abertura apenas perceptible, como si el diseñador hubiera previsto que la dueña de aquel vestido no solo caminaría: también correría, pelearía, sobreviviría.
—Diseño especial. Seda elástica, fibras reforzadas, discreto bolsillo interno —Me señaló mientras me miraba a la distancia.
—Por un momento creí que no entraría en él — admití mientras pasaba una mano por el vestido.
—La tela se adapta al cuerpo de quien lo porte sin verse demasiado ajustado— declaró .
—¿A prueba de balas?— Alcé una ceja pasando mis manos por el material que se sentía suave y duro al mismo tiempo.
Merlín asintió.
—La parte interna del vestido está hecha a base de un compuesto no newtoniano— lo miré sorprendida.
Mis mejillas estaban más rojas de lo usual y los bultos bajo mis ojos habían sido corregidos por una gruesa capa de corrector. El labial vino que me puse, al menos hacía que la atención de mi rostro fuera a ellos.
Mis ojos se dirigieron a las gafas que descansaban sobre el lavamanos. Ni siquiera las había sacado de su caja desde que Merlín me las entregó.
Al colocármelas, tuve acceso a toda la base de datos móvil de Kingsman y fui conectada al intercomunicador grupal, escuchando la conversación de Roxy y Eggsy.
—Roxy, soy yo. ¿Qué tal la vista?—escuché la voz de Eggsy.
—Odiosa— la respuesta de Roxy no se hizo esperar. —Sé que lo que te diré es trillado, pero no mires abajo— me hice escuchar mientras soltaba una pequeña risa.
—La mía es muy buena, ¿te mandaron a hacer un traje?—habló de nuevo Eggsy.
—No, aún no— admitió la rubia. —Ya tienes algo por lo que regresar. Vamos a aparecer en la base de Valentine me voy... Suerte —
—Roxy cuando llegues a la atmósfera, me cuentas cómo está la vista desde ahí arriba— agregué cuando me di cuenta de que Eggsy se había salido de la línea.
—Eres mala Anahid— Roxy soltó una risa nerviosa y yo también reí dándome cuenta de que estaba logrando relajarla.
—¿Estás bromeando? Estarás en la cima del mundo, Roxanne, no todo el mundo tiene ese lujo— declaré mientras me miraba en el espejo.