Doble vida, un nombre

Capítulo 16- Duerme conmigo por favor...

-¿Quieres ropa para ir más cómoda?- preguntó.

-Sí por favor.

-Ven.- dijo subiendo al piso de arriba. Lo seguí y entramos en su habitación, abrió el armario y vi un póster mío. Me hizo gracia.

-¿Así que tengo un fan delante mío?- pregunté sonriendo. Él miró el póster y se puso rojo como un tomate.- Ese día estaba resfriada, me tuvieron que repetir tres veces cada foto porque tosía o estornudaba.- dije riendo.- Tranquilo, haré como si no lo hubiese visto.

-Joder, que vergüenza...- dijo riendo nervioso.- Bueno, puedes escoger la ropa que quieras aunque todo es de chico.

-Con unos pantalones largos de pijama y una camisa me conformo.- él se echo a reír.

-¿Una camisa?- preguntó riendo.

-Amo las camisas.

-Bueno mejor, solo tengo un par de camisetas, el resto son camisas.- explicó.

-¿De verdad?- dije feliz. Asintió y me dio una camisa blanca, con rallas verticales azules claro, y unos pantalones largos de chándal azules marino.- Gracias.

-El baño ya sabes dónde está.- dijo cerrando el armario.- Pero si quieres puedes cambiarte aquí, yo bajo... También hay un baño en esa puerta.- dijo señalando la puerta blanca y salió de la habitación. Me quité los pantalones y me puse los que me dio, me desabroché todos los botones de la camisa que llevaba, me la quité y me puse la suya, olía a hombre, me encanta ese olor. Dejé mi ropa plegada encima de la cama y bajé. No quise cotillear su habitación, a saber qué me encontraba. Al llegar a bajo, no había nadie en el salón, mierda.

-¿AARON?- grité.

-¿Qué?- dijo saliendo del baño.

-Nada...- dije sentándome en el sofá y me tapé con la manta.

-¿Ya me echabas de menos?- dijo riendo y reí.- Claro, como soy tu dios griego favorito...- dijo sentándose a mi lado. Yo seguí riéndome.

-¿Aun recuerdas que os dije dioses griegos?

-Para no olvidarlo.- se tapó con la manta y me la quitó un poco del cuerpo.

-No me quites la manta.

-Acércate más.- dijo sonriendo.- No muerdo eh, te recuerdo que he vuelto de ese parque sin chaqueta y contigo en brazos, me podría haber congelado...- reí negando con la cabeza pero me acerqué más a él. Puse mi cabeza en su hombro y bostecé.

-Gracias por contarme lo de tu hermana...- dije poniendo los pies descalzos en el sofá y los tapé con la manta.

-A ti por quedarte y hacerme sonreír.- respondió sonriendo.- El año pasado con Derek fue mucho peor.- y empezó a reír.

-¿Con Derek? ¿También hiciste lo mismo?

-No hombre no, yo no beso a chicos y no lo hubiera llevado en brazos.- dijo riendo y reí.- Me lo encontré cuando salía del cementerio, me acompañó a casa y se lo conté, sacó alcohol y no recuerdo que pasó pero la mañana siguiente nos despertamos vestidos de chicas.- empecé a reír, me imaginé a Derek vestido de chica y empecé a reír más fuerte. Encendió el televisor y puso una serie que no conocía, volví a poner mi cabeza en su hombro y me dormí. Me desperté por unos gritos. Abrí los ojos y estaba acurrucada en el pecho de Aaron, y él gritaba en sueños.

-¡Aaron!- grité sacudiéndolo. Se despertó y me abrazó, se volvió a estirar conmigo en brazos, su pecho subía y bajaba, su corazón iba a mil.- Tranquilo, solo fue un sueño.- me intenté levantar pero no me dejó.- Solo voy a abrir la luz, no me iré.- dije y me dejó ir. Abrí la luz y estaba sudado y con cara de terror.- Venga, te acompaño a tu cama.- dije cogiéndolo del brazo, se levantó y en vez de andar me abrazó.- Ya está, solo fue un sueño... No te pasará nada ¿vale? Estoy contigo...- asintió y después de unos minutos rompió el abrazo. Le pasé mi brazo por los hombros y subimos las escaleras, llegamos a su habitación, entramos, saqué mi ropa de la cama, él se sentó y se me quedó mirando.- Va, duerme, te irá bien...- dije sentándome a su lado. Él negó con la cabeza.