Capítulo 18: No te alejes

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Byakuya Kuchiki

Pasé ese mes con Renji en el hospital, porque iba a verle siempre que podía, en cuanto acababa de trabajar y rellenar la cantidad de informes de las misiones de mi escuadrón, me acercaba a verlo. La verdad que empezaba a echarle de menos por el escuadrón, porque aunque nunca se lo había dicho, me quitaba mucho trabajo de encima y ahora estaba yo solo en la oficina porque no quise poner un teniente sustituto, únicamente deseaba a Renji como mi Teniente, ni siquiera por unos días consentía que viniera otro en su lugar.

Aún así sentía como Renji cada vez estaba más ausente, más frío conmigo, a cada día que pasaba era peor y no sé muy bien qué le pasaba por la cabeza porque tampoco quería hablar de mucho, me evitaba cualquier tema sobre nuestra relación o sobre mi familia. Sabía que ocurría algo, no era imbécil, pero tampoco podía obligar a Renji a que me contase absolutamente todo de su vida, sé que había hecho cosas que no le habrían gustado en el pasado y creí que podía ser eso, quizá se sentía demasiado avergonzado consigo mismo como para perdonarse él, pero no podía entender la magnitud del asunto si se rehusaba a hablarlo conmigo, me estaba dejando al margen de sus problemas y eso me preocupaba, porque yo ya me consideraba como alguien importante y cercano a él, alguien en quien podía apoyarse para salir de cualquier problema, pero no me sentía así, porque sólo hacía que alejarme una y otra vez de él.

A parte de eso, tuve una gran discusión con el jefe del club, porque estaba dispuesto a demostrar que fueron ellos quienes asesinaron a los padres de Renji para poder manipular a su hijo y es que... sólo era un niño cuando lo reclutaron para esta clase de trabajos, él no debería haber hecho nada de eso, los niños deberían jugar y divertirse, no estar acostándose con clientes para poder sobrevivir. Detestaba a esas personas que le habían obligado a hacer algo así, que le habían engañado y manipulado sólo para ellos ganar dinero a costa de destrozar la vida de unos niños.

Seguía sin entender muy bien por qué esos tipos sólo buscaban donceles en las calles del Rukongai, pero teniendo en cuenta lo que me contó la administradora, yo mismo era consciente de que los donceles tenían algo especial, una seducción innata, porque muchos de la nobleza pagaban por ellos, muchos llegaron a pagar por Renji, era uno de los más cotizados en ese club y eso era lo que peor me sentaba, porque yo le sentía como algo mío personal, no quería que nadie le tocase, no quería verle sufrir como lo hacía, verle intentando dar explicaciones a todo lo que hizo en el pasado como si buscase una forma de perdonare, una forma que no encontraba, porque era incapaz de perdonarse él mismo todo lo que había hecho.

Una de las cosas que me llamaban la atención, era lo pendiente que estaba últimamente mi abuelo de mí, porque él siempre pasaba de lo que hacía, exceptuando la vez que me casé en secreto con la hermana de Rukia y a toda la familia le sentó mal por ser una chica sin sangre noble, una pobre mujer del Rukongai y creo... que mi abuelo empezaba a ver la posibilidad de que estuviera planeando lo mismo con mi Teniente, otra persona el Rukongai, pero no sólo eso, sino también que era un chico y eso no estaba bien visto en nuestra esfera social, pero a mí me daba igual, quería a Renji, quería estar con él y ni mi abuelo ni nadie me lo impediría.

Sé que se lo prometí, no volvería a deshonrar a esta familia, a este apellido pero es que ahora mismo era muy difícil cumplir esa promesa, porque era Renji, porque era la felicidad de mi vida frente a estar amargado el resto de ella por no tenerle a mi lado, pero claro... era mucho pedirle a mi abuelo que entendiera cosas como esta.

Cuando llegué aquel día al hospital, mi abuelo salía del cuarto de Renji y aunque le saludé por educación, no me paré a hablar con él, llevaba unos días enfadado conmigo, de hecho... él ni siquiera me saludó ni se paró a hablar conmigo y a mí lo que me sentaba peor, no era eso, sino que había estado en la habitación de Renji y él no tenía nada que tratar con mi Teniente, de todo lo relacionado con Renji me ocupaba yo.

Último beso (Bleach: Byakuya-Renji)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora