CAPITULO 20

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NARRA EL HERMOSO Y UNICO EN LA BANDA CON POMPIS... Bryan chiquito, bebé, mi amor, me lo comooo<3

Me puse nervioso, ¿Qué estaría pasando ahora con ella?, ¿Dónde estaría?, ¿Será que no quiere venir?... y de ser así, ¿Por qué?, Oh, ¿O será que llego Mara y le está haciendo la vida imposible?, de ser así iría a defenderla, a sacarla de ahí.

Recibí un mensaje a mi celular "Joven Bryan, al parecer no hay nadie en la casa, todas las luces están apagadas" Decía esté, era un chofer de la familia, ¡demonios!, ¿En dónde estaría?

"Insiste, ella tiene que venir" Respondí el mensaje.

Seguía codeándome con algunas personas de la familia, todos ellos con licenciaturas, maestrías y doctorados terminados, esperando siempre la grandeza del prójimo, pues ya era una costumbre que todos estuviéramos rodeados de gente fina e importante, y esperaban lo mismo de mí, por lo que si les cuento que __________ no es de las personas más influyentes de la ciudad, seguramente se molestarán conmigo.

—Bryan, ¿Y tú chica, ya viene para acá? —Me pregunto mi padre, quien me tomo por sorpresa y me saco de todo pensamiento.

—Sí, no debe tardar... —Le dije un poco nervioso, sonriendo al final para estar seguro.

—No te noto tan seguro —Dijo con recelo.

—Creo que no se siente tan feliz de venir con chofer, debiste haberme dejado que fuera por ella —Le exprese.

—Bueno, es una chica mundana, debe estar acostumbrada a viajar así, no era necesario que fueras... —Me corrigió, asentí sin decir nada.

—No tarda —Le di un par de palmaditas en el hombro y me moví, salí al jardín del salón, ¡Demonios!

Estaba que quería explotar, algo me daría esta noche, ¿Qué sucede?, no me puede dejar plantado. Recibí una llamada del chofer.

—¡Hola!, dime, ¿Qué sucede? —Pregunte.

—Ella no quiere ir, me entrego el vestido, está llorando, y se ve mal, joven Bryan, creo que ella arruino su peinado y maquillaje, está muy mal —Escuche decir de él.

—¡Demonios!, ¿Solo eso?

—Le dije que el vestido es carísimo, y que no lo malgastara, ella me dijo que podía quedármelo, estaba afectada, y bueno eso todo hasta ahora.

—¿Esta completamente sola? —Pregunte.

—Supongo, nadie más ha salido, y eso que llevo un gran rato aquí, tengo que actuar rápido, pues varios vecinos se han asomado por la ventana y me ven mal, ¿Qué debo hacer? —Me cuestiono.

—Bien haz esto... Llámala a la puerta, inventa algo, y súbela a la fuerza a la camioneta, tráela hasta aquí, y cuando llegues me avisas...

—Pero, ¿Qué pasa si me golpea? —Insistió preocupado.

—¡Vamos!, eres mucho más grande que ella, apuesto a que la puedes traer aquí sin problema...

—De acuerdo, lo intentaré joven Bryan... —Él recibió la orden.

—¡No!, no lo intentes, tráela aquí, incluso si la tienes que traer a rastras... —Exigí.

—De acuerdo, usted lo ha dicho.

—Solo, no la lastimes, cuídate —Colgué el teléfono.

Estrellas Rotas (Bryan Mouque y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora