CAPITULO 5

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-¿Qué estás diciendo? -Preguntaba Alan por teléfono.

Sí, por las tardes mi única distracción era hablar con Alan por teléfono, ya que estaba presa en este horrible lugar, regularmente Mara salía con sus hijas y se olvidaban de mí, por lo que Alan siempre era mi salida por momentos de la realidad.

-Es enserio, él me invito a estar juntos mañana para el almuerzo -Dije emocionada.

-Pero él, él es mayor que tú, y además... es demasiado conocido en la escuela, ¿Cómo le hiciste? -Él no creía lo que decía, tengo tan bajo perfil que seguramente pensaba que estaba engañándole o algo similar.

-¡Ya sé!, pero así sucedió, solo se dio, aunque, no pienses mal, es solamente como amigos, ahí está la gran diferencia.

-Bien, te creo. Pero... ¿Y yo?

-Puedes venir

-No, no voy a interrumpir su cita.

Sonreí ligeramente, él no podía verme-No es una cita. -(Pero desearía que lo fuera)

-Pero eso quisieras -Adivino lo que estaba pensando.

-No, solamente espero encajar, conseguir más amigos, claro nunca nadie será como tú, pero espero por lo menos intentarlo.

-Ya veremos pinocho... -Reí levemente ante su acusación.

Desperté como siempre muy en la mañana, preparé el desayuno, me bañe intentando hacer todo demasiado rápido, arreglarme y demás, cuando llegue al desayuno, ya habían casi terminado todas, lo que me forzó a comer con mayor velocidad.

Mara me miro con repudio-comes como un animal.

Digerí lo que tenía en la boca-Sí no lo hago así, no alcanzaré a comer.

-Pues, no lo lograrás, toma tus cosas, qué ya nos vamos.

Ella se burlaba de mí, demostraba su superioridad de esa forma, ¡Maldita!

Todas subimos en su automóvil, fuimos hasta la escuela sin decir mucho, como siempre ella y sus hijas buscan hacerme la vida imposible, las detesto tanto.

Ya una vez llegando a la escuela, seguí mi camino en soledad, no encontraba a Alan por ningún lado, eso se me hacía extraño.

Caminando cerca de mí y en mi dirección se acercaba un grupo de chicas casi perfectas, una de ellas era Alexandra, la chica que un día antes había conocido levemente en la clase de física.

-Hola -Se dirigió Alexandra hacía mí. Hizo una seña para que sus seguidoras se marcharan.

-Hola -le sonreí amistosa, pero no demasiado.

-Te toca la primera hora con Gina, ¿Cierto?

-Sí -Dije desconfiada.

-Ella no vino hoy, ¿Quieres ir a dar una vuelta conmigo? -Humm, qué extraño.

-Estoy esperando a un amigo, no puedo. -Me excuse.

-Tonterías -Hablo queriendo ser agradable -Vamos a caminar, quiero mostrarte las instalaciones.

Me tomo del hombro y comenzamos a caminar, ella parecía extrañamente rara, aunque signifiqué básicamente lo mismo, no era normal su comportamiento.

-¿Para qué quieres caminar?

-Solo para charlar, quiero ser tu amiga, saber más de ti y que tu sepas más de mí.

Estrellas Rotas (Bryan Mouque y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora