Heridas de amor "Wigettaxx Mpreg"

Capítulo 17

Antes de comenzar a escribir, quiero daros las gracias, estamos a poco de llegar a las 1000 lecturas, y no pensé poder alcanzarlo tan pronto, gracias.

También quiero deciros que comencé dos historias nuevas, una es la segunda temporada de Dos Caminos Un Mismo Destino y la otra se llama Secretos... Ambas Wigetta. Esta también mi otra historia Así Es El Amor una historia que tiene Lugetta, Wigetta y Lutaxx. Me encantaría que os pasarais a leer alguna, estoy segura que os gustaran. Y una cosita más, son cuatro historias las que estoy escribiendo, pero trataré de tener los capítulos lo más rápido que pueda. Gracias por leerme.

...

Los ojos de Guillermo comenzaron a abrirse lentamente e instintivamente llevó su mano a ellos para tallarlos, se sentó con dificultad y pesadez, cuando sus ojos tuvieron una visión más clara y objetiva, y esa en definitiva no era su habitación, apartó sus manos de su rostro, hacia la cama, sintiendo una mano ajena, volteo rápidamente, encontrándose con la mejor imagen que pudiese haber. Samuel dormía tan plácidamente, se veía cansado y relajado, y fue entonces que los recuerdos de la noche anterior llegaron a Guille.

"-Quiero hacerte el amor- dijo Samuel mientras acariciaba lentamente la pierna de Guille, éste se quedó inmóvil por un momento, esperando órdenes de Samuel, puesto que si llegaba a hacer algo que no estaba permitido, éste se molestaría y las cosas se pondrían feas, pero Samuel no decía nada, solo lo acariciaba y besaba su cuello -Aaahh Samuel- gimió Guille a la vez que llevaba sus manos hacia la cabeza de Samuel, enredando en su cabello los dedos"

Un leve sonroso apareció en las mejillas de Guillermo al recordar eso, pues anoche no hubo prohibiciones, no hubo órdenes, no hubo palabras sucias, solamente había caricias y miles de besos repartidos, volvió a girar su vista, posándola en Samuel, que dormía como un bebé, iba a acercarse a él para poder dejarle un beso, pero entonces comenzó a removerse como queriendo despertar, Guille en un rápido movimiento se acomodó nuevamente, fingiendo estar dormido, y entonces sintió como Samuel se levantaba y escucho un bostezo por su parte. Guille apretó un poco sus ojos cuando sintió como una mano recorría desde sus cabellos alborotados hasta la parte baja de su espalda. Samuel esbozaba una sonrisa radiante y por primera vez sincera, hacia alguien. Para Samuel, Guillermo se veía como un mismísimo Ángel, su cálida piel, su cabello ligeramente desordenado, verlo ahí, indefenso, dormido, lo hizo pensar en la noche que habían pasado.

"Las manos de Guillermo revolvían su cabello, sus labios batallaban, y sus respiraciones se mezclaban, Samuel se apartó un poco de Guillermo, para poder quitas su camiseta, ahora que sus manos ya no estaban atadas, una vez que dejó su torso al descubierto, comenzó a repartir besos por todo este, provocando leves jadeos por parte de Guille -Aaahhh Guille, me vuelves loco- dijo sin despegar sus labios de la piel del menor"

Guille continuaba en su posición, no pensaba moverse, pero entonces sintió unos brazos rodearle por la cintura, y un peso adicional a su lado -Se que estas despierto Chiqui, pude sentir como tú cuerpo se estremecía cuando lo acaricié- dijo esto depositando un beso en su brazo, Guille se giró lentamente, encontrándose con la mirada de Samuel, quien le dedico una sonrisa a penas quedaron de frente -Buenos días pequeño- Samuel acarició su mejilla haciendo que está se sonrojara -Bu... Buenos días- respondió Guille algo nervioso. Se sentía alerta a la vez que asustado, esperaba el momento en el que Samuel lo echaría de su habitación, lo atara y le llevará hacia abajo, pero era todo lo contrario, Samuel se encontraba acariciandole, mirándole, y eso lo asustaba aún más -¿Pasa algo Guille?- dijo ladeando una sonrisa mientras movía sus dedos por todo el abdomen de Guille, quien no dejaba de mostrar esa cara de preocupación -Quieres quitar esa cara Guillermo, comienzas a molestarme- Guille apartó su vista y dio un largo suspiro, tal vez estaba exagerando al preocuparse así, a pesar del poco tiempo ahí, conocía bien a Samuel, y sabía que si él quería hacia las cosas sin pensárselo dos veces, y que si su presencia ahí le molestara realmente, ya lo hubiese echado -Lo siento- respondió Guille -Es solo que...- sus ojos miraban hacia todos lados de la habitación, y Samuel pudo entender a lo que se refería, lo habían hecho solo en la habitación de Guille, y al acabar Samuel siempre se retiraba, pero ahora se encontraban en la que sería la habitación principal, y un detalle, habían pasado la noche juntos.

-Guillermo- dijo Samuel atrayendo su mirada -Ven aquí- dio suaves y pequeños golpes en su abdomen, Guille dejó escapar una pequeña sonrisa y se echó encima de Samuel -Guillermo tú eres mío- afirmó sin titubear y con sus ojos puestos en los de Guille -No puedo, ni quiero separarme de ti- por primera vez las palabras de Samuel no sonaban posesivas, sino llenas de cariño -Guille- lo apartó de él, haciendo que volviera a quedar acostado a su lado -Mañana volverás a tu vida normal- una mueca de confusión se formó en la cara de Guillermo, pensando en que quería decir con eso, a caso dejaría que se fuera, pero si acababa de decir que no quería estar sin el -A que te refieres- preguntó levantándose un poco sobre su brazo, Samuel giró un poco quedando acostado de lado y de frente a Guille -Mañana volverás a clases, con tu amiga, y a tu casa- Guille sintió una opresión en el pecho, ¿a caso lo estaba dejando irse? Así, o es que lo estaba mal interpretando, si, tal vez era eso, entonces mejor solo decidió seguir con la plática -Va... Vale- Samuel acaricio su mejilla suavemente y guille instintivamente cerró sus ojos -No quiero ninguna palabra de esto Guillermo, ¿te quedo claro?- él asintió y se acercó a Samuel para besarlo, pero este se alejó, permaneció quieto por un instante y entonces lo besó, bajando sus manos hasta su cintura, tocándolo suavemente, erizando su piel. Guille por inercia se movió hasta quedar a horcajadas sobre el, las manos de Samuel subían y bajaban por su cuerpo, provocando miles de sensaciones, Guille comenzó a moverse de arriba a abajo -Mmmhh Guille- en cuestión de segundos Guillermo se encontraba bajo Samuel, quien lo tocaba y besaba desesperadamente, completamente diferente a la noche anterior, que todo lo hizo con delicadeza, pero a Guille le gustaba.

Las manos de Samuel comenzaron a bajar hasta las piernas de Guille, separándolas un poco, quitó su bóxer y comenzó a acariciar su miembro -Aaahh Samuel Mmm- decía aferrándose a su espalda, éste se separó un poco para quitarse el bóxer, volvió a su posición y sin pensar y advertir entró en Guillermo de una sola estocada ocasionando un grito de placer por su parte -SAMUEEEEEEL AAAAAHH- el placer era infinito, y las estocadas que daba Samuel eran cada vez más rápidas, al igual que la velocidad con la que masturbaba a Guille, ambos estaban hundidos en gritos y gemidos. Unas cuantas estocadas más fueron suficientes para que ambos terminaran corriendose; el cuerpo de Samuel cayó sobre Guille, y sus respiraciones eran irregulares, por lo que permanecieron así, hasta que estas volvieran a la normalidad -¿Te he dicho aya cuánto me gusta hacerte mío?- Guille sonrió y pasó sus brazos alrededor del cuello del mayor -Creo que las mismas veces que yo te he dicho cuanto disfruto que me hagas tuyo- Una risa escapó de Samuel y le dejó un beso en la mejilla -Levanta, hay que ducharnos e ir a tomar el desayuno, tengo que ir a trabajar- dijo esto levantándose y caminando hasta el baño.

...

El día pasó tranquilo, Samuel llegó un poco más tarde de lo normal, pero no era extraño, puesto que en su trabajo a veces había emergencias y debía quedarse más tiempo de lo esperado, normal -¿Ya estás listo para mañana?- preguntó Samuel mientras se echaba una cucharada de comida a la boca -Si, ya está todo- como Samuel había dicho, Guillermo volvería a su vida normal, pero algo cambiaría -¿Pasarás a recogerme al terminar las clases o me regreso solo?- preguntó Guille para después darle un sorbo a su vaso con jugo, Samuel lo miró fijamente y dejó escapar un suspiro -Guille- dijo soltando los cubiertos -No pasaré por ti, y no regresaras tú solo, no vas a volver aquí ya Guillermo-

-¿¡QUEEEEEEEEE!?-