Heridas de amor "Wigettaxx Mpreg"

Capitulo 28

Guillermo
-Esto debe ser una maldita broma verdad... Mire a mi amiga que tenía cara de susto -Jose... Ella solo me miraba sin decir una palabra y eso me desesperaba más -Esto es falso verdad?-

Mi amiga negó, y un escalofrío recorrió mi cuerpo, -No es una broma Guillermo- ella se veía tan confundida como yo.

-Pe-pero como... Como puede ser esto posible Jose, esto es imposible, que a caso no me has visto...-

-Guillermo cálmate, debe haber una explicación, debe... No se, yo no sé... Nos quedamos en silencio por un momento, yo aún no podía creérmelo, pero si yo estaba... Entonces... -Frank- dije sin pensarlo, atrayendo la atención de mi amiga.

-¿Frank?- me mira atenta -Que tiene que ver Frank en...- Se hizo un silencio...

-Si yo estoy... Entonces Frank es... Tragué grueso, -Debo llamarle, debe venir ya mismo- tome mi móvil y marque su número, por la hora que era, él estaría aún en clases, pero no me importaba, debía venir ya mismo, esto era algo importante, muy importante... Un tono, dos tonos, -Vamos Frank atiende- tres tonos, cuatro tonos y nada, el móvil seguía sonando y no atendía, así que decidí terminar la llamada. Me comenzaba a desesperar más, ¿por qué no atendía? ¿Desde cuando me molestaba eso? Joder mi cabeza era un lío, esto no podía estar pasando, debía ser un mal sueño o una broma, si una broma.

Pasarían unos cuantos segundos cuando mi móvil comenzó a sonar, lo cogí pronto y mire el nombre de Frank, así que atendí lo más rápido que pude, -Guillermo que pasa, estás bien- lo note algo preocupado, yo estaba respirando algo agitado, no sabia como decirle esto, y me pise a pensar, si no puedo decírselo así, de frente será mucho más complicado... -Frank tu... Tu ti.. tienes que... Me estaba costando hablar, esto era más difícil de lo que pensaba. -Guillermo yo que, dilo- tome aire y lo solté de golpe, -Tu tienes que venir ahora mismo- no quedaba otra que esperar.

Pasarían unos cuantos minutos, cuando escuchamos que llamaban a la puerta, sentí como los nervios me invadían de vuelta, cuando ya había logrado, aún que por un instante, calmarme. Jose se apresuró a abrir, sabíamos quién era y yo di un suspiro largo, ahora como se lo diría, que es lo que él iba a pensar, que es lo que iba a pasar ahora, -Que está pasando- escuche la voz de Frank cerca, pero no pude moverme, me mantenía quieto, mirando el trozo de papel, pensando en que en cualquier momento iba a despertar y todo esto habría sido solo un sueño.

-Guille- lo veo acercarse a mí y siento más nervios,m -Que pasa,mesitas bien?- yo no respondo nada, simplemente extiendo la mano, entregándole el papel que respondería a su pregunta, lo mire como comenzaba a leerlo, atentamente, como si estuviese grabándose cada palabra, y conforme avanzaba, mis nervios aumentaban más, si es que eso era posible, hasta que mire su rostro, y supe que había llegado ahí, trague grueso y sentí algo extraño en mi estomago, ¿ahora que seguía?...

Me preguntó nervioso si esos exámenes eran míos, y a mi pesar le respondí que si. Se quedó en silencio por unos minutos, todos nos quedamos en silencio, como intentando procesar todo esto, intentando asimilar lo que estaba pasando, -Guille pero como es esto...-

-No lo sé Frank- lo interrumpí, yo tampoco sabía cómo es que esto podía estar pasando, era algo ilógico, algo imposible, bueno, prácticamente...

Frank se acercó a mí, inclinándose en frente, quedando a mi altura, hasta el momento, había imaginado millones de reacciones de su parte, confusión, bueno, más de la que ya tenía, conociéndolo, imaginaba que se alteraría como yo, repitiendo mil veces que esto no podía estar sucediendo, que todo estaba mal, o quizá repitiéndome que los exámenes eran de alguien más o que estaban equivocados, pero no fue así, se acercó a mí, quedando a la par de mi, me tomó del mentón y juntó sus labios con los míos. Al principio no correspondí, me sentía confundido, alterado, pero poco a correspondiendo, sentí sus manos acariciar mis mejillas, y no pude evitar sonrojarme. Cerré mis ojos dejándome llevar, sintiéndome más tranquilo, aún no sé cómo lo lograba.

-No sé qué esté pasando, ni por qué está pasando, pero ya ha sucedido, si, sé que no es algo común o normal, o no sé cómo decirle, pero ya está, Guille, puedo imaginar cómo te sientes, puedo imaginar lo confundido que has de estar, yo también lo estoy, y tengo miles de preguntas y sé que tú también las tienes, y solo voy a decirte una cosa- se acercó más a mí y me abrazó -Ya no vale preguntarnos un por qué, si ya ha sucedido, y quiero que sepas que yo voy a estar contigo, y te cuidaré, los cuidaré- colocó una de sus manos en mi estomago, provocando que me pusiera aún más rojo, que sintiera nervios y millones de cosas más. A caso era posible estar tan tranquilo, o es que solamente se comportaba así para tranquilizarme a mi.

Se separó de mí y se puso de pie, miró a mi amiga y después me miró a mi, con una enorme sonrisa, -¡¡¡Que vamos a ser padres!!!- dijo en un grito y yo no pude evitar sonreír al verlo así, aún me sentía confundido y en shock, pero como dijo el, para que buscar el por qué, de algo que ya ha sucedido, de que me serviría saber por qué, cuando ya está hecho, supongo que si esto me pasó a mi, tendrá alguna razón, y ya la sabré, a su tiempo, cuando deba saberlo.

...

Después de ese día, las cosas siguieron normales, demasiado normales para mi gusto, había intentado contactar con Samuel, no sabía si debía contárselo o no, pero de igual manera nunca lograba contactarlo o verlo, es como si hubiese desaparecido o simplemente se escondía de mi. Frank ha venido todos los días a verme, al igual que Jose, mis padres vienen cada cierto tiempo, pero como siempre, es como si yo no existiese.

Han pasado dos meses, y yo tengo tres meses de embarazo, aún sigue siendo extraño, aún no puedo hacerme a la idea, pero ver a Frank todos los días tan feliz, me hace sentir algo extraño pero placentero, gracias a él, estoy pasando los días mejor, pero, no logro acostumbrarme a verlo hablarle a mi panza, con esa voz de estúpido, que parece tonto. Con respecto a las consultas, pues vemos a un médico particular, y todo marcha muy bien.

Hoy no me sentía muy bien, tenía malestares al por mayor, así que falté a clases, no era la primera vez, pero Frank siempre se encargaba de mis apuntes y tareas del día. Hoy, como todos los días, Frank vendría a comer conmigo. Esta mañana nada más al levantarme, me metí a la ducha, necesitaba de un baño para estar despierto del todo, saque algo de ropa u me vestí, con un poco de dificultad, pues la ropa me quedaba justa, y sabía que al llegar, Frank me regañaría, por qué según el, molesto al bebé, que debo ponerme algo flojo y esas cosas, pero si aún me queda mi ropa, la seguiré usando. La mañana se pasó rápido, y cuando menos lo esperaba, Frank ya se encontraba aquí en casa.

-Como han dormido?- pregunta mientras entra y deja su mochila en el sofá, -Para serte sincero, como nunca, por primera vez no me desperté en la noche con malestar- y agradecía eso, pues desde el primer mes no había dormido bien y me hacía demasiada falta, -Recuerda que el doctor dijo que los malestares cesarían un poco al tercer mes, y que para el cuarto desaparecerían por completo- agradecía tanto que Frank me acompañase siempre a las citas, pues yo no me grababa ni una sola palabra de lo que decía el doctor, en cambio el, era como un grabador de voz.

-A ver- dice acercándose a mi, con esa cara de idiota, ya sabía lo que se venía, me dio un pequeño beso en los labios y después se inclinó frente a mi, -Como está hoy el bebé de papá- yo solamente rodé los ojos y me cruce de brazos, -Como se ha portado papi Guille contigo- acaricia mi estomago y deja un beso, causándome un escalofrío, -Guillermo que te dije- me llama un poco molesto -Por qué traes la ropa tan ajustada, vas a hacerle daño- suspire pesado, siempre era lo mismo.

-Frank por favor, no pasara nada- bufa y se para, comienza a desabrochar mi pantalón, -Como se nota que no pones atención a nada de lo que dice el doctor, debes andar cómodo, tú y el- y ahí iba de nuevo.

-Frank, que no sabemos lo que será, deja de llamarle el, que tal si es ella- Frank negó con la cabeza, acaricio mi estomago y me besó, -Será un niño, lo sé- rodé los ojos y sonreí, siempre teníamos esta misma conversación. Estábamos a punto de sentarnos a comer, cuando escuchamos que alguien llamaba a la puerta, -Yo abro- dijo Frank dirigiéndose hacia ahí, yo me senté y lo esperé.

-Que haces aquí!?- escuche a Frank alzar la voz.

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Perdón por teneros tan abandonados, aquí os tengo un nuevo capítulo, espero que os guste.

Os quiero muchísimo!!

Lieed...