Bad; j.b

37. ¿Adiós?

''Te quería, ¿sabes?''

Cassie Delaney

Sujeto con fuerza la taza entre mis manos, mis ojos perdidos en un punto en el suelo de la comisaria y mi cuerpo cubierto con una manta. Doblo mis rodillas un poco más hasta que estas tocan mi pecho, provocando un sentimiento de protección a mi misma. Ni siquiera noto el calor abrasador de la infusión hirviendo que tengo entre las manos. No siento nada. Nada, excepto un intenso dolor dentro de mi.

Él me había ocultado todo, había jugado conmigo pero lo peor es que incluso lo hizo antes de que yo hubiera tenido la mierda de accidente. La peor parte fue saber que fue él quien me atropelló aunque el hecho de que haya sido Kate la verdadera culpable de la perdida de control del auto me enfada mucho menos con Justin.

Recuerdos vagos pasan con rapidez por mi mente causando unos pinchazos en mi cabeza. Son insoportables, pero los aguanto. A mi lado derecho esta Macy, junto a Tayson quien mira a todas partes menos a mi. No quiero mirarlos, no después de descubrir lo que he descubierto. A mi otro lado están Dave y Silvia, mis supuestos padres. Silvia llora y Dave intenta consolarla, pero su expresión demuestra de todo menos tranquilidad. Y frente a mi, Jasper.

-Bebe-me dice este último colocándose de rodillas frente a mi. Doy un sorbo al líquido, pero vuelvo a mi anterior postura. Me acaricia las rodillas con suavidad y me entran ganas de llorar. Esa caricia se sintió diferente, demasiado real. Algo que ahora esta noche me di cuenta me faltó durante muchos años.

¡Eres una zorra!

Que sea la última vez que me llamas mamá.

Eres la decepción de la familia.

Das asco.

Vas de guarra.

Ella no es como tú, zorra.

Justin no te quiere.

Esos y miles de recuerdos más me dan dolor de cabeza. Después de lo del yate, y de enterarme de la mierda en la que estaba metido mi hermano, mi mundo se volvió mierda. Si pensaba que lo peor que me había pasado en la vida era haberme quedado sin memoria, me equivoqué. Ojalá siguiera viviendo entre la mentira. Mis padres no querían creer nada, pasando por todas las fases hasta superar la de negación, cuando empezaron a maldecir-se a ellos mismos por todo lo que me han hecho.

No lo recuerdo todo, pero sí lo suficiente como para saber que desde la muerte de mi hermano, ya no era feliz. En la sala de interrogatorio esta Kate, el tío de Justin ya ha sido encerrado en una celda hasta el día del juicio, al que no pienso ir. No estoy obligada por mi situación, así que pienso aprovecharme al máximo de ello. Kate, por cómplice, también esta condenada. Lo que más me jode es que Justin sólo tendrá que estar en un juicio como testigo, y el muy cabrón esta fuera de la comisaria, de rositas.

¿Que he hecho mal para merecer esto?

Las lágrimas vuelven a deslizarse por mi mejilla a la vez que veo como se llevan a Kate, con la cabeza baja y en el momento en que desaparece por la esquina, Katrina sale de la sala de al lado escoltada por un guardia civil. Se me queda mirando seria, pero en su mirada veo todas y cada una de las disculpas que me lanza. No acepto ninguna. Otra que sale de comisaria con las manos limpias.