CAPITULO 19

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-¡Victoria!- Escuchó como la llamaba aquel hombre. ¡Sí! Era Salvador Salerno, su padre.

-¡Papá!- Gritó de la emoción al verlo ahí, lo había extrañado. Corrió a refugiarse en sus brazos. Lo necesitaba tanto.

-Mi princesa hermosa, te quiero mucho. ¿Está claro eso?- Preguntó, abrazándola con todas sus fuerzas.

-Sí, papi. Yo también te quiero mucho.- Se separó de él y lo miró a los ojos.

-Tienes que contarme todo, por favor.- Le pidió. -Lo único que sé es que ya ni siquiera vives aquí. ¿Por qué no me dijiste?

-No quería darte preocupaciones, además... He estado muy estresada. Todo es un caos.- Se llevó ambas manos a la cabeza.

-Me imagino... ¿Y cómo es eso de qué tu mamá, Lucero, está enferma?

-Tiene cáncer. Es una larga historia.- Dijo con pesar.

-Leí el comunicado que publicó cuando venía de regreso para Querétaro. También vi algunas fotografías donde sales con ella y con el señor Colunga. Tú papá.- Comentó hostilmente.

-Tú siempre serás mi padre.- Le recordó.

-Mocosa, ahí estás.- Corrió a abrazarla otra persona.

-¡Adrián!- Exclamó emocionada. -Los extrañé bastante.- Les dijo a ambos.

-Estuve haciendo unas prácticas en Monterrey pero vi el comunicado, las fotos... Así que decidí venir.

-¡Genial! Todos vieron el desgraciado comunicado.- Comentó exasperada.

-Oye, no te preocupes.- Le sonrió. -Lucero es una persona muy fuerte, ¿y sabes qué?- Le preguntó. Victoria se encogió de hombros y negó con la cabeza. -Estoy seguro que en unos cuantos meses, estaré escuchando noticias muy buenas de ella. Seguirás gritándole a la pantalla cada vez que salga y seguirás emocionándote cada que diga algo sobre sus fans.Los mejores fans del mundo.

-Eso mismo que dice tu hermano, princesa.- Agregó Salvador.

-Lo sé, pero no puede dejar de importarme. ¡Ella es tan importante!-Intentó decir, pero su voz terminó quebrándose.

-Lo sé, Vic, es tu mamá. Ya después nos contarás como fue que todo pasó, ¿está bien?- Inquirió Salvador.

-Sí, está bien. Regresaré a la capital en tres días, creo.- Les informó. -José Manuel no está acostumbrado a estar sin su mamá, ¿saben?

-¿El hijo de Lucero...?- Preguntó Adrián.

-Sí, él.- Le sonrió. -Por cierto, él no sabe nada de lo que está pasando. No sabe sobre el cáncer, tampoco sabe que soy su hermana ni que sus papás se van a divorciar. No vayan a comentar nada si lo ven.- Les pidió. -Ahora esta con Laura. Se quedaron jugando Flappy Bird.- Comentó con hastió.

-Odias ese juego.- Le recordó Adrián.

-Por eso puse esa cara.

-Lo sé. Por cierto, tú seguirás siendo mi hermanita, ¿está bien?- La empujó a modo de juego.

-Toda la vida.- Le devolvió el empujón.

-¡Bueno! Hace mucho frío.- Anunció Salvador. -¿Por qué no vamos a ver qué explicación me dará Renatta sobre esto?- Comentó Salvador, con hostilidad.

Errores PlacenterosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora