Dos semanas y media después...
Despierto alrededor de las cuatro de la madrugada, intentando calmar mi cuerpo de todos esos sueños que estoy teniendo, no es que me moleste, me parecen agradables hasta un cierto punto; pero necesito que paren, ahora.
Vuelvo a la cama intentando dormir pero todo lo que ha pasado en el día vuelve a mí como los fragmentos de una película vieja en blanco y negro, miro mi celular y noto que tengo un mail se instala un cosquilleo en mi panza y entiendo que tengo ganas de que el mensaje sea de él.
Christian Town
Hermanita, estoy por tomar un avión a Nueva York, lo más posible es que llegue a las diez en punto, ¿Pasarías por mí? Te quiero, nos vemos en unas horas, pequeña.
¡Al fin! Christian va a regresar y quizás mi vida regrese a la normalidad. El es mi hermano mayor, me lleva solo dos años pero desde pequeños tenemos esta increíble relación en la que no podemos estar el uno sin el otro y me encanta. Respondo su mail asegurándole que ahí estaría y cierro los ojos intentando dormir, aunque parece que será una larga noche.
9:53 am.
¡Mierda, mierda! Me quede dormida, me levanto de la cama despojándome de la sabana y mi almohada de plumas que abrazo para dormir mejor, me doy una ducha rápida y me cambio con lo primero que encuentro –Realmente me cambie dos veces- Tomo las llaves del auto y bajo desbocada por las escaleras intentando llegar lo más rápido al estacionamiento, necesito llegar antes que él.
- Buenos Días. –El Sr. James me dedica una sonrisa mañanera y me detengo a saludarlo.
- Buenos Días Sr. James. –Saludo con la mano y recuerdo la hora así que vuelvo a correr, mi hermano debe de estar aterrizando. –Nos vemos.
- Siempre corriendo Alice. –Escucho que se ríe y lo dejo atrás.
Llego al auto jadeando y me subo con rapidez, avanzando lo más rápido que pueda hasta el aeropuerto. Christian me va a matar, enciendo la radio intentando que pongan la señal del trafico pero en cambio tengo que aguantarme la música mala de esa estación radial.
Si dejaras de estar soñando estupideces, quizás te hubieras despertado.
Cuando las cosas no salen como quiero suelo ponerme de mal humor, así que más vale que llegue a tiempo o juro quemar todos los autos que tengo enfrente de mí. El celular suena en señal de llamada y lo tomo rápido rezando para que no sea Christian.
- ¿Qué paso? –Pregunta Ellen al atender. – Quiero detalles Sucios Town. No nos has hablado por dos semanas, quiero suponer que algo paso.
- Ahora no. –Bufo mal humorada
- ¿Tan malo es? –Dice con decepción y no quiero contarle en este momento que casi logra que me corra sin tocarme yo estoy tratando de olvidarlo y de evitarlo.
- Ellen, estoy buscando a Christian que está de regreso, prometo contarles todo a Mery y a ti pero más tarde, si quieren nos comemos algo o solo charlamos.
- Entonces, si fuiste. –La conozco tanto que se que esta sonriendo- Salúdame a Christian, acuérdate que hoy vamos a comprar las cosas para el cumple de Mery, por favor, no dejes que vaya sola. –Suplica.
- Lo prometí, ahí estaré. –Cuelga y el manos libres quedas en silencio.
Llego al Aeropuerto a un cuarto para las once, busco los vuelos aterrizados y el de Christian venia con retraso, acaba de aterrizar y están en proceso de embargue. Respiro tranquila y me quedo esperando a que me avise mientras compro un café.
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Prohibido
Romance[SIN EDITAR] La ciudad que nunca duerme, un trabajo, una casa, amigos y la locura de Nueva York. Alice esta acostumbrada a vivir así, cree que tiene la vida perfecta, tan perfecta como aburrida. Tiene un novio, un buen trabajo, unas buenas amigas y...