Estoy Aburrido #2 Saga CHDDCH (COMPLETA) ©

Aburridos #48

Ryan atravesó los pasillos del instituto en busca de la culpable de la humillación de Sandy.

Megan.

Al entrar al salón la vio, charlando animadamente con las que se decían ser sus amigas.

-Tú y yo necesitamos hablar -aseguro parándose frente a la morena.

Megan miro nerviosa a sus "amigas" pero rápidamente se recompuso y sonrió en dirección a Rayn.

-Claro -dijo y se puso de pie.

Ryan no dudo un segundo en comenzar a caminar, con Megan detrás.

Llegaron hasta las gradas del campo de football y se dio la vuelta rápidamente sorprendiendo a la chica.

-Quiero que me digas ya mismo, que le dijiste a Sandy -ordeno entre dientes.

Megan suspiro.

-Solo hice lo mejor para ti. No te servía estar con ella ¿te imaginas lo que dirían los demás?

-Estas loca. En dos meses acabamos la preparatoria, acabara tu época de reinado. Deja de malgastar tu tiempo de "líder" en perjudicar a los demás e intenta ser feliz, por que estoy seguro que tienes que ser muy infeliz para hacer lo que haces.

Megan miro a Ryan atónita.

-No sabes de lo que hablas -aseguro la chica

Ryan suspiro intentando calmarse.

-Quizás no lo sepa, pero tampoco me importa. Solo te pido que si te queda un poco de bondad, me digas que fue lo que le inventaste a Sandy.

-Ya la elegiste ¿cierto? -pregunto Megan viendo a un nuevo Ryan

-Si -respondió Ryan sin dudar.

Megan sonrió, una sonrisa sincera pero inmediatamente una mueca de arrepentimiento apareció en su rostro.

-En verdad creí que te estaba haciendo un favor. Pensé que no te dabas cuenta de lo que significaba estar con ella para tu popularidad y por eso le dije . . . -Megan suspiro -Te quiero Ryan, se que en un principió te acercaste a mi por la popularidad pero en estos años te he considerado mi amigo y lamento lo que hice.

Ryan miro a Megan un poco mas tranquilo. Era muy extraño, por no decir imposible, recibir esas palabras de ella.

-¿Que le has dicho? -pregunto ahora calmado.

-Le dije que . . . que siempre supiste que era ella la de los mensajes, que solo querías enamorarla para luego humillarla y que esa "broma" en el estacionamiento era tu idea -confeso la chica cabizbaja.

-¿Que? -pregunto Ryan en un hilo de voz entendiendo el por que, del desprecio de Sandy.

-Le dije que. . .

-Te he escuchado Megan. ¿Cómo supiste tú todo eso?

- Es fácil revisar tu teléfono mientras entrenas y fui a ver quién era la chica que habías citado allí. Lo siento. Si quieres puedo hablar con ella -se ofreció Megan.

Ryan negó lentamente.

-No, de todas formas no te creería. necesito recuperar su confianza por mi mismo.

Megan asintió aun apenada.

Ryan le regalo una sonrisa y sin pensarlo la abrazó, la chica rodeo la cintura de Ryan y suspiro.

-En verdad lo siento -se disculpó nuevamente con su amigo.

-Esta bien, solo no vuelvas a hacerlo, conmigo ni con nadie.

-Lo prometo - respondió ella -¿No dejarás de ser mi amigo? -pregunto y Ryan noto un temblor en su voz.

-No Megan.

-Mi padre no te eligió para el equipo por que yo se lo pedí -confeso la chica.

Ryan se alejo de ella frunciendo el ceño.

-¿Cómo?

-Eres bueno, el mejor y no lo dudes. Perdón por decir que era gracias a mi que tenías ese lugar, solo no quería que te alejarás, por que a pesar de que estabas en nuestro grupo siempre fuiste diferente y me gustaba.

-Tú querías cambiarme.

Megan rió y acomodo su cabello.

-Yo solo quería que el grupo popular de la escuela creciera y tú eres una buena adquisición -bromeó -pero siempre supe que tarde o temprano te cansarías de todo eso.

-Eres rara -dijo riendo Ryan.

-Y tú un tonto.

-Pero tu tonto amigo.

Megan asintió riendo y Ryan desarreglo su cabello cariñosamente.

-Me despeinas.

-Dramática.

-Ya, ya. Ahora ve por la niña loca.

Ryan miro mal a Megan y ella rió levantando sus manos proclamando paz.

Dándole un beso en la mejilla, vio desaparecer a Megan por detrás de las gradas y se volteó pensando en como recuperar a su Dulce Sandy.

Pero el destino estaba en su contra y allí estaba ella. De pie al final de la campo de fooball y fulminando a Ryan con la mirada, pero no fue eso lo que lo sorprendió, sino que otra cosa.