Shadows & Secrets

Capítulo 3

La persona en la entrada se quedó quieta aun con la mano en la puerta y una segunda persona apareció junto a ella sosteniendo algo en su mano. La luz estaba apagada y mis ojos aún no se acostumbraban a la oscuridad del recibidor, pero la silueta de lo que parecía ser un arma, activó algo en mi cabeza, y al parecer también en la de Mark, ya que ambos quitamos el seguro de la pistola.

En el silencio de la casa, el click del seguro se escuchó fuerte y claro. La segunda persona se arrojó hacia la mesa junto a la puerta y por puro instinto Mark disparó. La chica rodó en el suelo y tomó algo de debajo de la mesa, para cuando procese que era lo que había tomado, ella ya estaba disparando. Me arrojé al suelo llevándome a Mark conmigo, el sonido del cristal quebrándose sonó con estruendo.

Rodé poniendo una rodilla en el suelo para impulsarme, pero la chica ya estaba frente a mi y sostenía su pistola contra mi frente. Pasos apresurados se escucharon y cuatro guardias aparecieron en la entrada. La luz del recibidor se encendió. Unos ojos verdes me observaban fijamente.

- ¡Señores, qué están haciendo! - La voz de Rick, uno de nuestro jefes de guardia, sonó entre sorprendida y enojada

El agarre en mi pistola vacilo y el peso de la sorpresa me empujo hacia atrás, haciendo que cayera sentada. Paris aun me observaba pero su mirada era completamente diferente. De reojo alcancé a ver a Miranda dejar caer su cuchillo al suelo y a Mark dejarse caer arrodillado mientras respiraba agitado.

La habíamos cagado con toda.

- ¡Santo Dios! ¿Están todos bien? - René, nuestra nana, se acercó a paso apresurado

- Mierda - dije soltando todo el aire que había en mis pulmones

Miranda frunció el ceño asestando un golpe en el hombro a Mark

- ¡Idiota! - El bufo poniéndose de pie y abrazándola con fuerza

- Me enorgulleces enana - Dijo revolviendo suavemente el cabello castaño de Miranda - Solo un poco mas de practica y podrías haberme ganado - Ella bufo frunciendo el ceño

Paris me extendió la mano ayudándome a levantar y dándome un abrazo, sus manos aún temblaban un poco por la adrenalina del momento.

- ¿Estás bien? - Asentí mirándola

- ¡Estás sangrando, Dios mío! - Nana prácticamente se abalanzó sobre Mark y lo obligó a girar la cabeza para ver mejor el corte en su cuello

- Estoy bien Nana - dijo mi hermano mirándola - Debo irme ya - Ella frunció el ceño negando con la cabeza

Del cuello de Mark brotaba un delgado hilo de sangre producto de la presión del cuchillo de Miranda. En realidad no era nada grave, pero a los ojos de Nana el prácticamente se estaba desangrando.

- Nana, ni siquiera apuntó bien - dijo Mark burlón mirando a Miranda - La vena es mas arriba

El reloj que hasta hace unos minutos estaba en la pared, pero debido a nuestra pequeña confusión ahora estaba medio roto en el suelo, sonó marcando las 12 de la noche.

- Wow - dije observándolo - Es un excelente reloj

- Tenemos que irnos - Mark dejó un beso en la cabeza de Nana y me hizo una señal con la cabeza mientras recogía su arma del suelo.

- Pero estas sangrando mi niño - Nana parecía entre desesperada y asustada

- Me curarás cuando vuelva - dijo Mark despidiéndose con la mano mientras salíamos

- ¿Estás bien? - Pregunte subiendo con él al ascensor. Mark asintió llevando su mano al cuello para comprobar que tan grande era la herida

- No crees que muera, ¿verdad? - Dijo sonriendo. Reí negando con la cabeza y dándole un empujoncito