capítulo 27

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Llegué a mi habitación y me deje caer en mi cama y intenté dormir.

-Emily- me hablo Alison al entrar en mi habitación. Y yo no le contesté, esto se estaba haciendo difícil para mi, yo no quería que se fuera pero la vi tan determinada y yo no la puedo detener.

-y-yo no quería decir eso- dijo mirándome fijamente.

-Y que era lo que querías decir?- pregunte dándome la vuelta en la cama quedando sobre mi estomago para no verla. Sentí como se sentaba a mi lado en la cama y acaricia mi brazo.

-Mirarme- susurro pero yo no me moví, puso sus manos en mis hombros tratando de girar me, me puse boca arriba y ella me miro fijamente. Suspire rendida y ella sonrió.

-Se que eso sono mal pero lo que quería decir es que...- me miro indecisa y algo nerviosa.- no quedará nada en está ciudad que me detenga porqué quiero que vengas conmigo- sonrió como sí fuera una gran idea cuando claramente no lo era, al menos no para mi. Estaba asustada y creo que Alison se dio cuenta de esto porque cualquier rastro de sonrisa se borró de su rostro. Abrí la boca para tratar de decirle algo pero no sabía que decirle porque. ¿Que se supone que le dices a una persona que te ofrece irte con ella, no se a donde, y tal vez no regresar jamás dejando todo lo que tienes?

-Mm, no lo se Ali, ¿como te lo digo sin que pienses mal?- dije frustrada, no sabía que decir, quería dejar todo e irme con ella y hacerle caso a mi lado irracional. Pero ese es el problema que mi lado irracional no existe y todo lo tengo que pensar antes de hacerlo, tengo que pensar siempre las consecuencias de todo esto, ahí está el problema soy tan racional.

-Sólo dilo- dijo alison tomando mi mano.

-mm, voy a ser sincera contigo- suspire tratando de encontrar palabras para decirle esto- no es que no quiera irme contigo es sólo que no puedo, tengo miedo de las consecuencias, y tengo aquí a mis amigas, mi carrera está aquí y no quiero dejar todo tirado y no lo se pero me encantaría irme contigo pero simplemente no puedo.- asintió con un gesto triste y me sonrió - quédate por favor, no dejes todo sólo por no enfrentarlos, y yo siempre estaré aquí para ti - dije con las pocas esperanzas que me quedaban, tomé su rostro, no dejándola contestar a mi petición y la acerque a mi basándo lentamente sus labios con todo el cariño y el amor que había en mi, esperando tan sólo que cambiara de opinión y no me dejara nunca, pero basta decir que eso no sucedió.

-No puedo quedarme, Em,- dijo Alison al separarnos.

-Entonces esto es el fin de todo esto- dije con tristeza y sentí que pronto me iba a soltar en lágrimas, llorar por el fin de algo que tal vez no inicio nunca .

-No, esto jamás va a ser el final,- dijo mientras sus ojos se nublaban- por lo menos vente conmigo por un tiempo.- dijo esperanzada.

-No puedo dejar las clases.

- Quién dijo que las dejarlas, las vacaciones de navidad están cerca por lo menos vamos, pasa ese tiempo conmigo.- dijo con una sonrisa y no pude evitar sonreír también ante sus ojos esperanzados.

- y de dónde sacarás el dinero?.

-eso ya esta cubierto no tienes de que preocuparte- sonrió tranquilizadoramente - en realidad herede la fortuna de mi abuela hace un año al morir- hizo una cara de tristeza- así que podemos ocupar ese dinero e irnos- dijo

-Está bien, al menos podemos hacer eso- Sonreí mientras ella se acercaba y me besaba en los labios, sí nuestro tiempo era limitado tendría que disfrutar al máximo el estar con ella.

-Y eso me da tiempo de convencerte de que te quedes conmigo mientras tanto- sonrió segura de sí misma.

-Hey, como. esto es un plan maligno de convencimiento- dije tratando de dejar atrás la tristeza y jugar un poco con ella. Alison pensó un poco y luego dijo que sí.- y como piensas convencerme?-dije juguetona.

- tengo muchas Armas de convencimiento- dijo mientras me guiñaba el ojo con picardía.

-Ok, ahora estoy curiosa por descubrir cuales son esas armas. Pero antes dime, donde me piensas llevar?- pregunte.

-Mmmm, eso no se puede saber, es secreto, es algo así como un secreto de vida o muerte.- dijo sonriendo con malicia.

-Me piensas secuestrar?- levante una ceja interrogante en broma y ella sonrió más amplio.

-Calma pequeña, esa ya es demasiada información- dijo dando un beso en mi mejilla.

***

Bajé las escaleras camino a la sala de estar a ver un poco de televisión, Alison se quedó dormida, las chicas no han venido todavía y Kate, bueno no se donde está y la verdad tampoco me interesa.

Comencé a pasar canales y no encontraba absolutamente nada, justo cuando encontré una película sentí pasos provenir de las escaleras y vi una recién levantada Alison que prácticamente se venia cayendo del sueño, sonrió al verme y se sentó a mi lado abrazándose a mi.

-por que me dejas sola?- dijo haciendo un puchero. A lo que Sonreí embobada al verla.

-lo siento solo quería salir de ahí un rato.- dije sonriendo - en fin ahora si piensas decirme donde iremos- pregunte y ella se quedó pensativa estoy segura de que ni ella misma lo sabe- mmm, por lo que puedo ver no tienes ni idea de donde ir.- dije y ella asintió.

-la verdad no lo se- dijo dudosa.

-ahora tengo miedo de saber a donde me llevaras- dije viendo su sonrisa.

-ya tengo el lugar perfecto.

-si. Y cual es? -

-eso sigue siendo secreto.

-okay

-oye, y cuando piensas decirle a las chicas que te vas conmigo eh?- pregunto y la verdad es que no tenia ni idea y sabía que probablemente no se lo tomarían nada bien. Y justo hablando de ellas ahí aparecieron como por arte de magia. las tres me veían entre impresionadas y enojadas. Hay personas que aparecen cuando no deben.

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Destinos InciertosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora