With or without you? » hunhan.

Capítulo VII.

Sehun 

¿Esto era realidad o sólo un mal sueño?

Siempre me imaginé a Luhan junto a mí, dándome los buenos días y sonriendo como sólo él sabía hacer. Sin embargo, el destino cambió los planes y se lo llevó lejos, haciéndome sentir un sabor amargo y melancólico al ver su lado de la cama intacto.

Aunque me repitiera que era para mejor, aun sentía la culpa por cómo se dieron las cosas. Nunca estuvo en mis planes que se enterara de esa manera y todo terminara de manera abrupta.

Cuando comenzamos nuestra relación, todo era perfecto: besos de despedida y bienvenida, llamadas y mensajes en horas de trabajo, cenas llenas de risas y noches apasionadas disfrutando al máximo la compañía del otro. Mi felicidad comenzó a depender de él y ese fue el peor que pude cometer sabiendo que era nuestro primer año en el mundo laboral.

Luhan consiguió proyectos que con esmero hizo florecer, inconscientemente dejándome de lado por pasar noches en su taller. Allí fue cuando todo se volvió turbio.

Me forcé a sonreírle para demostrar a Luhan lo feliz que estaba por su exitoso trabajo y guardé mis problemas en lo más profundo de mi ser, todo con tal de no borrar el brillo de felicidad en sus ojos.

Justo cuando me empezaba a sentir solo, Kyungsoo apareció en mi vida.

En su momento, todo con Luhan fue algo regido por el amor, por sentimientos puros, por ese amor ideal que todas las personas quieren tener. En cambio, con Kyungsoo todo fue pasión, emociones desbordantes que no bastaban con ser expresadas por palabras, que necesitaban sentir piel para salir a flote.

La culpa no fue del todo mía, sólo hice mal en serle infiel cuando nuestra relación no tenía futuro. Pero la verdadera culpa no la tiene nadie.

Seguimos el curso normal de la vida y así fue terminó todo. Como estaba destinado a ser.

— ¿Estás bien?

La noche anterior siquiera pude dormir un par de horas, así que decidimos pasar la noche juntos para hacernos compañía, ya que él tampoco pudo conciliar el sueño.

—Creo que si —Volteé la cara y le miré—. ¿Y tú?

—También creo que si...

Estábamos recostados en la cama aun con la ropa del trabajo puesta, mirando como las gotas de lluvia se deslizaban por la ventana.

Es un día abrumador y triste.

—Espero Luhan esté bien.

Apenas llegamos a la casa, nos recostamos y le relaté lo acontecido el día anterior. Kyungsoo terminó igual de aturdido que yo.

—Lo estará. Él siempre sabe cómo salir adelante y sé que esta no será la excepción.

Su mirada estaba cargada de emociones encontradas y lo entendía. Aunque no lo conociese, Kyung jamás quiso hacerle daño a Luhan, sólo quería que esta historia terminara de la manera menos dolorosa posible para él.