Capítulo 6

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Narra Jungkook

Hoy sería el última noche que pasaríamos en la cabaña y Hobi hyung quiso cambiarse de habitación. Me mataba pensar que tomó esa decisión por mi causa. Yo quiero que compartamos tiempo juntos pero es obvio que él no quiere lo mismo.

Me es difícil aceptar esa actitud, pues siempre ha sido cálido, atento y, no es que los demás no lo sean pero, es diferente en muchos aspectos a todos los hyungs.

Por ejemplo, la mayoría me trata casi como un niño cuando me gustaría tener más libertad. Esa libertad me la da él, a pesar de ser protector, no me limita, me brinda su apoyo incondicional y me ínsita a luchar por mis sueños, por más locos que estos suenen.

Es de esas personas con las que puedes hablar de cualquier cosa por horas sin aburrirte, con el que puedes ir de fiesta o simplemente tomar un café, su compañía es tan agradable que no te cansas.

Recuerdo los días en que éramos traines, yo era bastante tímido y gracias a sus halagos constantes y su apoyo incondicional, pude adquirir confianza. La exigencia era tan pesada que pensé en rendirme varias veces y dejarlo todo, pero cada una de esas veces estuvo presente él, recordandome que mi esfuerzo no era en vano y que yo era alguien valioso en verdad.

No sé en qué momento pasó pero me enamoré y no quería ocultar mis sentimientos, por eso me acercaba tanto a él, no pretendía incomodarlo; sin embargo, hasta ahora lo único que habia logrado con eso era quedarme a solas con Tae.

-Buenas noches Kookie -sonrío metiéndose en su cama y yo a la que estaba junto a la de él.

-Buenas noches -pretendí estar bien y recosté mi cabeza sobre la almohada intentando dormir.

Me dolía la cabeza pero poco a poco sentí como todo a mí alrededor se ponía oscuro, escuché a alguien gritando mi nombre y mi corazón se aceleró.

No veía nada, solo se oían los gritos, igual que una película de terror. Los gritos se volvieron intensos y me obligué a despertar. Voltee a ver Tae notando que dormía plácidamente en su cama y me calmé.

Verlo ahí, tan tranquilo, me ayudó a recobrar la cordura y la paz. Suspiré tocando mi frente y me levanté. Recargué mi espalda en la cabecera de la cama y tomé el celular del buró para jugar un rato "piano tiles 2".

Jugué un buen rato hasta que mi garganta empezó a sentirse reseca y necesitada de agua. Devolví el celular al buró y me dirigí a la cocina por un vaso, me serví un poco y cuando comencé a beberlo escuché unas voces provenientes de la estancia.

Entrecerré mis ojos encontrando a Jimin y Hobi hyung platicando en la sala de estar, tomé mi vaso para acercarme a ellos y entonces pasó... escuché con claridad a Hobi decir que le gustaba un chico...

¿Podría ser yo?

En ese instante mi corazón comenzó a latir con fuerza, sentía que había olvidado cómo respirar y sin querer, dejé resbalar el vaso por mi mano.

-¿Jungkook? -el mayor volteó la mirada hacia mí- ¿Qué haces despierto?

-Yo... solo...-busqué una excusa coherente para librarme de la situación- tuve una pesadilla.

-¿Una pesadilla? –esta vez preguntó Jimin viendo el vaso que había sido estrellado en el piso. Se levantó de su asiento y se dirigió a la cocina para traer una pequeña escoba y recogedor con los que comenzó a juntar los vidrios rotos.

-¿Estás bien? ¿Hace cuánto tuviste la pesadilla? -Hobi se levantó preocupado y entonces reaccioné.

Impulsivamente me arrojé hacia él y lo abracé en busca de su protección -tranquilo, solo fue un sueño –respondió a mi gesto poniendo su mano sobre mi cabeza y acariciando suavemente mí cabello.

A la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora