Narra J Hope
Los sueños a veces se tornan de una dificultad asombrosa y pueden hacerte pensar que no los alcanzaras nunca, pero, en realidad, estos sueños solo se aplazan, se incrementan y, sin lugar a dudas, se transforman para ser alcanzados a través del esfuerzo y la perseverancia, porque, admitámoslo, los sueños se construyen y se ganan.
Como ahora, he alcanzado mi más grande sueño que es la felicidad, lo sé muy bien porque esa embriagadora sensación que te recorre desde el centro hasta las extremidades del cuerpo, llenándote por completo de comodidad y satisfacción, no se compara con ninguna otra y puedo sentirla cada vez que Taehyung me toca.
Incluso el sentimiento de incertidumbre se esfuma cada vez que lo veo caminando a mi lado, pues sé, que pase lo que pase, lo tengo a él y él me tiene a mí. Aun cuando lo veo correr de un lado a otro desde que llegamos a la playa, sé que es lo bastante maduro para cuidar de mi corazón como yo haré con el suyo.
-¡Vamos ahí! ¡Vamos! ¡Vamos! -su voz radiante de felicidad me guiaba a un tercer puesto de comida presente en nuestro camino.
-En casa también puedes comer pescado -me acerqué acariciándome el vientre de lo lleno que ya estaba. No entendía como, un chico tan delgado como él, podía comer tanto.
-Ninguno como este -tomó un gran pedazo y lo metió rápidamente en mi boca.
Sonrió dejándome ver todos sus dientes para que no me quejara y enseguida saboreó por su cuenta un poco del pescado que, a decir verdad, sabía diferente a cualquier otro.
-A partir de ahora rodaré -bromé caminando con las piernas abiertas y mis brazos estirados para simular unos costados muy amplios- gracias a ti soy como una ballena.
-Ya que estamos en la playa, te regresaré al agua -me sacó la lengua y reaccioné rodeando su cuello con mi brazo- ¡ya! ¡deja! -luchó cuando comencé a jugar con su pelo.
-¡No! -apreté ligeramente mi agarre para no lastimarlo.
Dirigió sus manos hacia mis costillas y lo terminé soltando, me hizo hacia atrás de un brinco y sin querer le di con la cadera a una chica que iba pasando.
-Lo siento -me reverencié un tanto avergonzado mientras la chica se alejaba viéndome raro y, la ingrata risa de Tae burlándose a mi costado, me hizo voltear hacia él fingiendo estar enojado.
-¡Ya! No hagas esas caras -suplicó tomando mi mano y jalándome para seguir caminando hasta llegar a la playa.
La brisa fresca que rodeó nuestros cuerpos terminó por sacarnos del agua horas antes de ese incidente, y, ahora, solo caminábamos por el muelle en busca de una banca libre que nos permitiera disfrutar de la vista.
-¡Ahí hay una! -señalé el asiento que miraba directo al horizonte.
Caminamos hasta ahí tomados de la mano y, en cuestión de segundos, ya estábamos sentados disfrutando del paisaje.
Tae me había platicado de esta playa, pero la verdad es que se quedaba corto, Gujora era por demás un lugar verdaderamente hermoso, era como una delicada obra de arte hecha por la naturaleza. El agua, tan clara, dejaba ver a la arena ser arrastrada hacia el fondo del mar y, a lo lejos, algunas montañas perdían su cúspide a través de las nubes.
Estar en ese lugar, a lado de Tae, me hacía sentir bastante bien, como si los problemas mundanales no pudieran tocarnos y el constante golpeteo de nuestros corazones fuera suficiente para que las emociones explotarán en un total frenesí.
Suspiré cuando el sol comenzó a caer en el horizonte y sus tonos anaranjados inundaron el cielo.
-Siempre he pensado que las puestas de sol son de lo más romántico -sonrió dejando caer su cabeza contra mi cuerpo.
-Conozco algo que es el doble de hermoso -extendí mi mano y fui dibujando pequeñas siluetas sobre la línea del mar que se apreciaba a lo lejos.
-¿A sí? ¿Y qué es?
-"Y O T E A M O" -escribí en el aire.
-Hobi -musitó entonando con el ambiente a sus mejillas rojizas- ¿eres feliz?
-Mucho Taehyung, soy el más feliz desde el primer momento en que tomaste mi mano -no dude ni un poco, yo sabía que a partir de ese momento todo estaría mejor, porque con el solo hecho de estar rodeado por sus brazos, yo podía sentirme el hombre más afortunado y amado de todo el mundo.
-No nos separemos de nuevo -suplicó levantándose nuevamente y mirándome directamente a los ojos- ¿puedes prometerlo?
-No puedo prometerte eso -negué y lo vi bajar la cabeza- los problemas siempre van a existir y pelearemos un par de veces -levanté su rostro para encontrarme con su mirada- pero eso no significa que dejaré de quererte, lo sabes ¿verdad?
-Tengo miedo -mordió con suavidad su labio- he sido tan torpe que podría arruinarlo de nuevo.
-Yo también he cometido errores pero... ¿sabes algo? -sonreí animándolo- por ti seguiría intentando toda la vida de ser necesario y no me detendría nunca si la recompensa es poder estar a tu lado.
-Tomé su mentón y lo acerqué lentamente a mis labios, mi mano pasó por su cabello acariciando su mejilla y posé mi boca sobre la suya. Cedió ante un beso dulce y suave que estremeció mis adentros.
-¿De verdad eres feliz? -sonreí en su boca y me alejé lentamente.
-Como no tienes idea, eres mi sueño, hecho realidad.
-Entonces... ¿Nos quedamos y formamos una familia? -sonreí vacilante- si vas a envejecer conmigo y al revés, este lugar será perfecto.
-Vale -mordió su labio y levantando su mano hasta mi rostro se acercó a mi boca- formemos una familia juntos.
Su mano sosteniendo la mia, fue la perfección del amor que llegó en el momento correcto.
~FIN~
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A la luna
FanfictionCuando Jungkok, Taehyung y Hoseok comienzan a sentir atracción el uno por el otro, surgen los problemas, porque a nadie le gusta ser rechazado y rendirse, para ninguno de ellos, es una opción.