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Apuestas

Perrie respiro profundo -No creo que quiera matarme- La rubia se adentró a la habitación donde estaba la morena -Hey pez- Perrie sintió como su cuerpo se estremecía -Como te sientes?- La morena de encogió de hombros -Me duele la cabeza- Respondió Jade.

Perrie ladeó su cabeza -Lo lamento tanto, debí haber esperado- La rubia se dejo caer sobre la silla que estaba junto a la camilla de de Jade -Me caes bien pero te he escuchado lamentarte toda la noche, debes parar ya- Espetó la morena la cual solo obtuvo una mirada de confusión -Estaba desmayada no muerta, podía escucharte- Las mejillas de Perrie se tornaron rojas -En verdad lo lamento- La ojiazul dejo su mirada en el suelo, Jade suspiro -Pez por favor para- Jade se dejó caer de nuevo sobre la camilla -Te encuentras bien?- Pregunto la rubia al ver la reacción de la morena.

-Me ha dolido la cabeza- Jade cerró los ojos con fuerza -Podría culparte justo ahora, pero no lo hare- Musito la morena -Solo dormire- Murmuró -Hey Jade, hay alguien a quien pueda llamar?... Tus padres o algo?- La morena abrió sus ojos -Si los hay pero no vendrán... Viven en Londres- Perrie con asombro a Jade -Vives sola?- La morena solo asintió.

-Poopey descansa mañana hablamos- Perrie salió y de la habitación rezando porque aun las Kaylor estuvieran esperando por ella y así fue.

-Chicas- Llamo la rubia -Hey pez, como esta poopey?- Taylor esperaba ver alguna reacción que le dijera que ganaría la apuesta.

-Ella tiene un poco de dolor de cabeza, se ha dormido- Perrie miraba al suelo constantemente -Es mi culpa- La rubia seguía martirizándose -Oh pez, no es culpa de nadie los accidentes pasan- Taylor trataba de calmar a la rubia.

-Perrie, he hablado con Lauren y le he comentado lo sucedido- La sangre de la rubia se congelo -Hey no pongas esa cara, me ha dicho que te relajes y que ojala hubiese sido yo la accidentada- Perrie no sabia si reír o llorar por lo que Karlie acababa de decirle.

-Además dijo que te tomes dos días de descanso al igual que Jade- La ojiazul respiro tranquila -Algo que quieras decir?- Cuestionó la castaña a lo que Perrie asintió.

-Jade no tiene familia aquí ellos están en Londres- La rubia se detuvo y eso capto la atención de Taylor -Yo tengo pensado quedarme con ella, solo llamaré a mi abuela y bueno... Me quedaré-

En la mente de Karlie lo único que rondaba era que la apuesta con Taylor ya la tenía perdida.

-Necesitas algo pez?- La rubia negó.

-Segura?- Cuestionó Karlie y Perrie solo asintió -Llamaré a Leigh-Anne, para decirle que tu y Jade estarán ausentes- Informó la castaña.

-Si necesitas algo no dudes en llamar de acuerdo!- Agrego Taylor.

-Bien sin mas que decir, nos vamos- Las chicas se despidieron de la rubia con un abrazo.

Perrie dudaba si volver o no a la habitación pero opto por seguir afuera.

Cerca de las dos de la mañana la rubia comenzó a sentir mas frío por lo que opto por volver a la habitación, la ojiazul se sintió morir cuando vio dormir plácidamente a la chica de ojos color miel.

-Y pensar que cuando estas despierta eres toda una tormenta de energía- Murmuro Perrie con una enorme sonrisa.

Perrie se acomodo en la silla junto a la camilla de Jade.

-Sigo sintiendo culpa Poopey, soy un desorden para algunas cosas, Lauren y Karlie confían en mi y casi te mato-

-Joder Perrie el mundo trata de dormir- Murmuro una somnolienta Jade -Y no me mataste sólo resbale-

Azul y miel chocaron al verse de frente -Puedes apagar la luz?- Perrie asintió.

-Oooh mierda- La rubia se quejó y Jade miró divertida la situación -Te esta matando la espalda?- Perrie asintió.