Resfriado

966 73 9
                                        

El invierno estaba en su punto más helado y eso en cierta forma a nadie le molestaba bueno, solo a Karlie, quien por cumplir los deseos de Taylor de pasar sus tardes bebiendo café en el Jauregui's, había pescado un resfriado.

-Heeey Kloss, estas enferma?- Lo unico bueno al menos para Lauren es que podía seguir molestando -Do edtoy enfedma- La congestionada nariz de la castaña no ayudaba, a que la estruendosa risa de Lauren se detuviera.

-Karls, llegando a casa debes tomar tus medicamentos- La ojiverde nego rapidamente -Do- Espeto para seguir bebiendo su café -Edto, ed pod tu culpa- Espeto una vez que termino de beber el liquido caliente.

-No lo es, yo te dije abrigate hace frio- La rubia no iba a permitir que Karlie la culpara, sin embargo Karlie no dijo nada.

-Te duele la garganta?- Karlie asintio -Creo que es hora de ir a casa- Karlie solo volvio a asentir.

La castaña tenía su nariz roja y el resto de su piel tan palida -Estas segura de que puedes conducir?- La ojiverde negó -Lo hare yo- Espeto Taylor, quitandole las llaves de las manos.

-Y no frunsas el ceño, ni levantes tu ceja- Ordeno la rubia y la ojiverde ni siquiera lo discutio.

Taylor se despidio de sus amigas y camino a la salida, seguida por una moribunda Kloss.

Para cuando llegaron a su casa, Karlie camino en modo zombie hasta la recamara, poco le importo cuando se tiro sobre la cama y segundos despues Olivia se acosto sobre su espalda.

-Karls, toma tu medicina- Con una mano arriba y con uno de sus dedos solo pudo decir que no.

Taylor se acosto a lado de ella y la abrazo -Sunshine, te ves fatal y no me gusta verte así- Karlie se abrazo tan fuerte -Edtaño a mi mamá- Taylor no sabía si reir o llorar por las palabras de su novia -Ella cuidaba de ti cuando enfermabas?- Karlie asintio.

-Oh amor- Un leve sollozo fue escuchado por la rubia -Yo cuidare de ti, solo dejame hacerlo- Taylor se levanto y desvistio a la castaña, para rapidamente ponerle su pijama y acostarla bajo las cobijas...

-Descansa, te traere algo de comer... Algo calientito- La rubia salio de la recamara, dejando atras a una resfriada Karlie.

Cuando Taylor regreso, con todo el dolor del mundo desperto a la castaña -Karls, te traje caldo de pollo- La ojiverde no renego y de sento en la cama.

-Veamos una pelicula!-

Cuando mufasa murio, Taylor estaba en un mar de lagrimas y Karlie solo se recargo sobre su hombro, el dolor en su garganta no le permitia hablar.

-Soy una llorona, ya lo se- Espeto entre sollozos la rubia, Karlie solo nego.

-Si lo soy- Espeto Taylor y Karlie solo tomó su mano -Do tu do- La ojiazul solto una suave risa -Eres todo un caso, pero asi te quiero mi sunshine- La rubia dejo un sauve beso en la mejilla de la castaña.

El resto de sus vacaciones de invierno, las chicas pasaron a tener una rutina hogareña.

Taylor cuido de Karlie hasta que comenzo a mejorar, sopas y caldos de pollo, fueron preparados por la ojiazul para que su chica, se pusiera mejor más rapido.

-Tay, vamos al Jauregui's- Karlie había amanecido mucho mejor despues de dos semanas de estar reposo.

Taylor aun dormia, pero eso no le importo a la castaña.

-Tay-Tay?- Quizas su novia tenia el sueño más pesado que ella.

-Do quiedo dalid- Oh ahora Karlie entendía todo.

-Amor estas enferma?- La castaña se mordia la lengua para no soltar la carcajada.

Taylor no respondio, a algo que era tan obvio.

-Tay amor, te encuentras bien?- Pregunto Karlie, mirando al bulto debajo de las cobijas.

-Swift- El bulto comenzo a moverse -Edto ed tu culpa no vuelvo a dodmid contigo- La voz de Taylor estaba ronca y su rostro mostraba dolor.

-Eso no decias la otra noche, ni la noche anterior, ni la noche de ayer- Las cejas de Karlie se movian de forma sugerente.

-Kadlie callate- Espeto Taylor molesta -Tranquila amor, yo te cuidare- Espeto feliz la castaña.

-Te traere el medicamento y am quieres algo del Jauregui's?- Taylor solo asintio.

Karlie deposito un beso en su frente -Descansa enseguida vuelvo-.

-Pero segura que no estas enferma?- Pregunto Karlie, aun cuando sabía era jugar con fuego

-Do edtoy edfedma Klodd- Las carcajadas de Karlie se escucharon por todo el lugar.

-Tambien te quiedo mucho- Los brazos de la castaña resguardaron a Taylor.

-Ahora si, ire por tu medicamento y tu amado café!-.

Karlie estaba feliz de ser util para su chica.

Taylor rogaba porque la distraida de su novia no llevara el medicamento equivocado, o peor aun un café descafeinado.

New RomanticsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora