Cuatro.

4.2K 526 219
                                    

Después de pensarlo mucho, salió de detrás del árbol y entró al instituto. Las murmuraciones no se hicieron esperar, ¿y cómo no? ¡si se había teñido el cabello de violeta!

Gracias al cielo que en ese instituto estaba permitido teñirse el cabello por cuestiones de libre expresión, o sino su nombre estaría de nuevo en el libro.

¿Qué porqué se lo había teñido? Era una historia bastante simple y en cierto punto... graciosa.

Ella y su madre, Laura, iban caminando por la plaza de la ciudad, hasta que fueron a parar en la peluquería porque su madre necesitaba costarse el cabello.

Rosalba, ¿qué hacemos con este tinte violeta? Ya ha estado por un mes aquí y nadie lo quiere usar. —Una de las trabajadoras salió con dos pequeñas cajas del cuarto de servicio.
Má', ¿me dejas teñir el cabello de violeta? —susurró Leila a su madre que estaba siendo tratada por la peluquera.

Si tú quieres, no hay problema. Pero sé que te vas a arrepentir...

Y de esa manera, Leila se tiñó el cabello gratis y también un corte por parte de la casa. Su largo, abundante y hermoso cabello castaño había desaparecido. Ahora tenía el cabello corto hasta la nuca y violeta; y como no acostumbraba peinarse, había adquirido un genial peinado de forma irónica.

...

—... Y mi madre dijo que podías… Daniel, ¿me estás escuchando? —preguntó Mateo enfadado ante la indiferencia de Daniel.

—Silencio Mat, mira y aprende. Iré a saludar a la nueva que está con Jenni —murmuró Daniel y con pasos apresurados se dirigió hacia la nueva—. Hola ne~... ¿¡Leila!?

—Sí, ¿por qué?, ¿Algún problema?, ¿Quiere pelea? —explotó con su mar de preguntas como siempre.

Leila era el vivo retrato de que las chicas bajitas eran cosa seria.

[~]

Alguien más ama a Leila tanto como yo? Como ya saben, si alguien quiere colaborar es bienvenido a hacerlo.

Los ama, como tormenta.

-BD.

Ser Fan De Steven Universe No Es Fácil ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora