Cap 7: Fuera de control

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-¿Qué estás haciendo aquí?-replicó entredientes presionandola contra la pared-.

Era una chica morena, más o menos de su misma estatura aunque por su aspecto parecía mayor que él, tenía el pelo corto y unos grandes ojos de color verde grisáceo.

-Creo que yo debería hacerte esa misma pregunta...-gruñó bruscamente intentando liberarse de su agarre pero él no le permitió moverse-¡Sueltame!

Él agarró su arma y tirándola a un lado con un rápido movimiento la arrástró bruscamente hacia la pared más próxima, haciendo que se golpease la cabeza y soltara un pequeño gemido de dolor.

-Esa no es la respuesta que quería oir-respondió tensando la mandíbula-¿A esto es a lo que te dedicas ahora? ¿A cazar a tus antiguas amistades?

- Tecnicamente eso es lo que pone en mi contrato pero, he de admitir que estoy empezando a pensar que no fue tan buena idea como creía al principio-sonrío de forma forzada-No pensaba que hubieras vuelto a la ciudad...

-Las cosas han cambiado mucho desde entonces.

-Pero tú no-hizo una pausa- Por lo que veo sigues siendo el mismo tipo arisco y solitario que desconfía de todo aquel que se le acerca.

-No me has contestado

-Eso es porque no has hecho la pregunta correcta

Suspiró.

-Vamos, Derek... No intentes esconderlo. Te conozco lo suficiente como para saber que en realidad te trae sin cuidado las razones por las que he decidido volver- contestó con tono burlón-Lo que de verdad te interesa saber es... si estoy de su parte. Si vas a tener que partirme el cuello cuando no te quede más remedio que soltarme

-¿Por qué iba a dejarte ir?

-Bueno, estás aquí por algo ¿no?-susurró girando la cabeza hacia un lado para comprobar si alguien se acercaba-Debe de ser muy importante para haberte expuesto a que te vean a estas alturas. No todos los días un Alfa decide ahorrarnos la partida de caza y venir a nuestra casa sin una buena razón.

-Vaya, parece que Darrel ya te ha puesto al corriente de todo-respondió con desdén deshaciendo su agarre y dándole la espalda- No tengo tiempo para esto

Se dirigió hacia la puerta sin volver la vista atrás.

-No te muevas-replicó la chica sin moverse, pero él continuó avanzando-.

-He dicho que no te muevas, Hale-gritó Leena sacando de su chaqueta una pistola corta y apuntándole-.

Derek se giró hacia ella lentamente al escuchar el sonido del cargador.

Los colmillos y las garras habían aparecido y se le veía realmente cabreado, tanto que Leena por un segundo pensó que realmente quería matarla

Disparó varias veces intentando mantenerle a raya pero era demasiado rápido y sabía que a pesar de todos sus esfuerzos acabaría ganando.

Y de hecho, así fue, no supo como pero para cuando quiso darse cuenta tenía el puente de su arma presionando con fuerza la base de su barbilla

-¿De verdad creías que ibas a detenerme con eso?

-Yo no quiero detenerte ¿entiendes?-consiguió articular- Solo quiero que me escuches...

-No necesito oir nada más

-¡Escuchame!-gritó perdiendo los nervios, su pecho subía y bajaba rápidamente- ¡YO NO ESTOY CONTRA TI! ¿me oyes?
NO SOY TU ENEMIGA

Derek permaneció en silencio un par de segundos para escuchar con atención los latidos de su corazón, estaban acelerados pero a pesar de todo, parecía que no mentía con lo que estaba diciendo.

Cuestión de instinto (Libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora