Cap 31: Terrores nocturnos

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WARNING: PELIGRO DE SUFRIR DEMASIADAS EMOCIONES AL MISMO TIEMPO.

*Dar al play para ambientar, importante.

Amber se dirigió a casa después de visitar a Ethan, apenas tenia hambre por lo que decidió subir a su cuarto, no sin antes abrazar a su padre.

Habia sido un día demasiado largo y pesado. Ethan ingresado, Boyd en la manada, Scott, la pelea con Derek... demasiado solo para veinticuatro horas.

Se sentó en la cama lentamente, soltando un gemido de dolor, había aprovechado la ocasión de estar en el hospital para tomar prestadas unas gasas y ponerselas en su costado y cambiarse de camiseta con algo que Scott le había dejado.

Parecía que la herida se estaba curando bien, pero era un proceso lento aunque, ya no dolía tanto como antes. Se cambió de ropa y se puso algo más comodo para seguidamente meterse en la cama.

Se acurrucó en un lateral y trató de dormir un poco.

Las horas pasaban y pasaban pero ella no conseguía mantener los ojos cerrados durante más de cinco minutos. No paraba de pensar en Derek, en lo que estaría haciendo, si él tambien estaría despierto, si estaría con Seleena, si pensaría en ella, si la necesitaba tanto como ella a él en ese momento...

 No paraba de pensar en Derek, en lo que estaría haciendo, si él tambien estaría despierto, si estaría con Seleena, si pensaría en ella, si la necesitaba tanto como ella a él en ese momento

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Y lo hacía...

Amber volvió a revolverse en la cama, quedando bocarriba, mirando al techo.

"Deja de pensar en eso" le recriminó la voz de su conciencia "Deja de pensar en él"

No podía evitarlo, seguía dolida pero por alguna razón que no llegaba a comprender no podía quitarselo de la cabeza. Volvió a colocarse de lado en su cama, de cara a la mesita donde cargaba su movil y permaneció mirándolo por unos segundos.

Tomó aire, por un segundo se le había pasado por la mente coger el aparato y marcar su numero.

De repente, la pantalla se iluminó.

El corazón casi se le paró al ver cual era el nombre que aparecía,dejó el movil sobre su cama y despues de dudar un segundo descolgó.

-¿Amber?-preguntó, ella no dijo nada- Amber, sé que estás ahí...

Hubo un instante de silencio. Ninguno de lo dos decía nada, Amber se había tapado la boca con la mano para contener la respiración y Derek esperaba que  respondiera. Algo que ella no hizo.

Necesitaba oir su voz, pero eso no implicaba necesariamente hablar con él.

Derek suspiró.

-Me parece bien si no quieres contestar. De hecho, si fuera tú supongo que yo tampoco lo haría, pero si eso no es posible, me gustaría que me escucharas-respondió siguiendo atento a cualquier sonido que pudiera oirse de fondo- Solo quería que supieras que...-tomó aire- Lo siento.

Cuestión de instinto (Libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora