Un rato después que se fue un golpe en mi puerta me asustó haciendo que con algo de lentitud la abriera, era Melina, la secretaria de ese ya lejano lugar.
-Hola Frisweet- me sonrió como si no fuese tanto problema -El director me informó que te trajera esto- detrás de ella, en sus manos había una blusa blanca nueva junto con una bolsa que tenía toda mi ropa interior
-¿Cómo llegó a- me interrumpió
-El director...digamos que el premia a los internados que captan su atención, primero pues algo de ropa, luego quizás permisos especiales- dijo de forma discreta, eso quiere decir que sólo muy poca gente consigue...¿Acaso somos perros?
Tomé la ropa no sin antes escuchar un "¿Qué no te piensas bañar?" Me reí fuerte cerrando la puerta con delicadeza dándole un cantado "Adiós".
Sinceramente, después de lo que paso con el entrenador allá abajo, menos ganas me dan de bañarme, no quiero que me intente tocar una mujer ahora. Suspiré al verme de nuevo en el espejo, no tengo problema con mi cuerpo o rostro en lo absoluto. Amo mis ojos que al verlos piensas que son negros, pero al acercarte descubres ese café obscuro que me hipnotizan a mí misma. Bajé la mirada encontrándome con un ducto que decía "Ropa sucia" en serio...sólo me falta descubrir una televisión de plasma debajo de mi cama, mire de nuevo mi reloj dándome las 8 en punto, decidí cambiarme de ropa interior para dormir sé que es sucio y anti-higeni Blah Blah Blah pero ya no quiero ver a nadie hoy.
-¿Frisweet?- hablé muy pronto, ¿Qué rayos quieren? Entonces recordé la hoja donde venían los horarios, ¿dónde la deje? Agh no recuerdo, me digne a contestar a la voz en la puerta
-¿Mande?- los hombres contestaron con mayor fuerza, dios santo ya que me golpeen
-¡¡Se dice presente, cucaracha!!- eso era lo que olvidaba, se pasa lista en la mañana y en la noche, este horario es de lo peor
-Presente- quiero dormir ya...mañana buscare a Leonn y a Stalk, necesito saber más sobre cómo salir de aquí, conocer el edificio, posiciones de cámaras, quienes y cuantos vigilan todo el lugar etc.
Pero necesitaré hablar con otra persona...JTK, él tiene más experiencia en escapar, pero necesito fortalecerme aquí, pasar desapercibida y sobre todo, fuerza física, pero para eso tendré que hacer la maldita activación física con ese maldito cerdo. Además que tengo que entregar la carta, sólo espero encontrarme con las chicas de nombre raro otra vez.
Froté mi rostro con mis manos algo frustrada, no me siento mal dejando a mi "familia" aunque extraño ciertas cosas, una cama cómoda por ejemplo, comida buena, aunque si lo pensaba bien, yo tomé este camino, yo me haré responsable y cuando salga...Le daré una pequeña visita a mis padres, fue lo último que pensé para terminar mi primera tarde en el infierno.
Unos golpes hicieron despertarme de un sueño sin nada de sentido como siempre, mis sueños no son buenos, pero tampoco malos, simplemente no tienen sentido alguno, mostrándome situaciones al azar en menos de dos minutos, aun así, no me gusta que me despierten como a cualquier persona normal.
-¿Frisweet?- agh ¿En serio es esto necesario?
-Presente- ya que no puedo volver a dormir y son alrededor de las 9 tomé la llave de mi habitación recorriendo de nuevo los pasillos hasta llegar a la puerta que da a las escaleras
Al bajar las ovaciones hacia a mí se hicieron presentes, los hombres me aplaudían, otros me felicitaban por mi llegada ayer, agradecía a uno que otro que pareciera agradable hasta que divisé a Leonn entre la multitud aplaudiéndome con una sonrisa sincera, me acerqué hacia a él sonriendo.
-Buenos días- dije observando como los demás volvían a su desayuno -¿Cuántos gritos tuvieron que darles para que me aplaudieran como si les importara?-
