Veintidos

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Tomé aire, dejando que la luz resaltara mi silueta y que los aplausos me abracen en señal de bienvenida.

Analicé al público, en el centro encontré a Leonn y a Aarón, se veían tan lindos tomados de la mano. Sonreí para mis adentros y a lo lejos encontré a Bones, estaba en una esquina, siendo cubierto por su usual máscara de zorro. Me alegra verlo por aquí. Aun así no podía encontrar ni a JTK ni a Stalk, tal vez se les hizo tarde.

Es curioso como todos parecen comportarse aquí dentro, hasta que vi guardias en el fondo, eso lo explicaba. Tomé aire.

-Los muros cayeron y los demonios no tardaron en entrar-

Al momento que hablé, un violín hizo aparición. No sabía que pondrían música, no, no, pero Red debió decirme. Esto es raro, pero ahora no puedo cuestionar esto, ya inicié mi acto y por respeto lo llevaré hasta el final.

Presioné mi pecho caminando al frente –Juré que los protegería a todos, se lo juré a mi familia, a mi gente y ahora yacen en el suelo junto a mis lágrimas, sólo Dios sabe lo mucho que lloré ¿Pero ahora qué sigue?- extendí mis brazos al público y un aire movió mi capa, parecía como si la música se acoplara conmigo, con mi voz, no sé cómo explicarlo pero... ¿Parece hecha para mí?

–¿Sepultarme en un ataúd de lágrimas sin fin y dejar morir los anhelos de mi gente?- negué con la mirada –Así mi cuerpo sea partido en dos- señalé el cielo atrayendo las miradas del público, así como la intensidad de la melodía

–Lucharé, y si el cielo se oscurece- las luces se apagaron y la música se detuvo sorprendiendo a la gente – ¡Yo seré tu luz!- mi vestido comenzó a brillar, el aire me dio mucha ayuda y la música me abrazó llenando mis pulmones de una pasión por actuar que daba por muerta

–Y quizás no me creas cuando te lo digo, pero yo sé que- entre el público vi a una muchacha muy parecida a Karen, me congelé por unos segundos y le extendí la mano a ella, imaginando que por un momento, ella estaba aquí –Por mi fallecida familia, por mi pueblo y por mi honor, juro que yo seré la esperanza cuando los monstruos vengan de nuevo- retrocedí a la par que mi vestido se apagaba, hasta que el telón se cerró frente a mí al igual que la música terminó

Los aplausos me dieron la señal de que hice un buen trabajo, sonreí sumamente satisfecha y caminé a las bambalinas. Donde todos los actores me recibieron, Irvin me esperaba con una hoja.

-¡Eso fue increíble! Frisweet, ¿Dónde conseguiste al violinista?- ¿eh?

-¿No lo planearon ustedes?-

-El presupuesto no es para tanto, Frisweet- habló Red detrás de mí –Entró y dijo que le pagaste para tocar-

Sólo conocía a un violinista, y no lo veía entre el público. Mierda, si iba a hacer algo así debió decírmelo antes...

-Bien, dulce, sólo queda que firmes esto y te llevaremos tus cosas- sonreí ante la voz de Red, tomando la pluma que me ofreció

Cuando terminé de firmar, no sé porque veía venir esas palabras.

-Pudiste llorar, pero lo hiciste bastante bien-

-Iba a hacerlo pero algo me distrajo- es que se parecía mucho a Karen, y si...no, es imposible

-Bueno, fue un placer trabajar contigo, puedes llevarte el vestido, no me hará falta- me reí

-Creí que el presupuesto no daba para tanto- ahora el rio

-Bueno, nunca repito un acto, eso es aburrido- alzó sus hombros –El show debe continuar, ¿Dónde están las gemelas?-

-Esperando a que se abra el telón- respondió Irvin

FrisweetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora