Embarazada en apuros

Capitulo 23

Ethan estaba sentado en la silla de la cafetería, no quería entrar, no quería charlar con él y no quería volver a verlo de cerca. Todo esto me sacaba. Lo que más me molestaba era que él me llamaba como si nada y yo caía a sus pies, tenía que controlar más ello.

Entre a la cafetería caminando lentamente, esperando a no llegar nunca a su lado, pero lamentablemente llegue a su lado y él me observo serio, algo estaba pasando. Me senté y coloque la cartera sobre la mesa, de mi lado había un café recién hecho y de su lado había un café a la mitad.

-Hola- le salude.

-Buenos días, Esperanza.

-¿Necesitabas decirme algo?- estaba desesperada, quería saber ya que sucedía.

Ethan saco el periódico de hoy de su mochila que estaba a su lado, busco entre las páginas y me entrego la sección de chimentos, leí la noticia y me cubrí la boca.

-No... no... es lo que dice aquí.

-Cállate, no necesito tus mentiras solo quiero saber la verdad.

Releí el periódico, no podía creer que publicaran estas cosas:

¿FIEL O INFIEL?
Mientras Ethan, nuestro boxeador sexy y preferido, está tomándose un tiempo a causa de la última pelea, la cual gano, su nueva amante, Esperanza, la chica embarazada, está disfrutando a su nuevo amigo, el cual hay que decir que es muy apuesto... ¿Ethan sabrá de la nueva relación que tiene su amante con este bombón?

Observe la foto en donde Javier me estaba abrazando y había otra en donde él estaba tocando mi vientre. Ethan todavía me miraba compasivo pero no estaba nada contento ya que su mandíbula estaba apretada.

-No lo puedo creer que me vaya un tiempo de tu vida y tú ya andes atrás de un nuevo hombre, no me importa la relación que compartas con él, solo te cite aquí para decirte que te acuerdes que ese bebe que llevas en tu vientre es mío y punto.

-Ethan yo no tengo nada con él...

-Pues, no parece...

-¡Yo te amo aun, date cuenta Ethan!- le grite llamando la atención de algunos clientes, pero no me importo ya que no iba a perder al amor de mi vida por un hombre como Javier, él no tenía nada de malo, solo que mi corazón ya pertenecia a otra persona.

-Yo también te amo Esperanza, pero de alguna forma siempre hay algo que se interpone entre nosotros y debimos saber que lo nuestro no iba a funcionar, no sé porque no nos dimos por vencidos desde un principio.

-No nos dimos por vencidos desde un principio porque teníamos la esperanza de que algo bueno nos iba a suceder, tu solo debes elegir entre Erika o tu familia, que siempre vamos a estar aquí- acaricie mi vientre.

Él me sonrió dulcemente, pero un rasgo de tristeza tenia- Quiero terminar de solucionar todo con Erika, si termino con ella de la nada tu y yo y nuestro bebe estaremos en peligro y no quiero eso, amor- agarro mi mano sobre la mesa y le dio una suave caricia, se sentía tan bien tener su tacto sobre mi piel.

-Te esperare todo lo que quieras, solo por favor no te tardes- le susurre.

Él acento con la cabeza y me sonrió, miro a su hijo/a en mi vientre.

-Esta tan grande esa hermosa panza.

-Ni me lo digas... hasta a veces me duelen mis pies y mi espalda.

Me levante del asiento, él también y me miro con una cara de asombro al ver mejor mi panza, cada día crecía más y más.

-Me encantaría ver a dos hombres hermosos cada mañana que me despierte- le dije.

-A mí me encantaría ver a dos princesas a las cuales molestar cada mañana cuando me despierte.

Nos abrazamos y me coloque mi cartera al hombro, tenía que ir a ver a mi madre, no aguantaba más ir a verla.

-Me tengo que ir, Ethan... ¿Nos vemos mañana?

-Mañana será, princesa.

Me acompaño hasta la calle, cogí el taxi y lo vi despedirse con las manos en sus pantalones al lado de la acera, la sonrisa que tenía era hermosa. Esa sonrisa me iba a quedar grabada en mi mente y en mi corazón, no me iba a dar por vencida e iba a esperar la eternidad, con tal de tenerlo todos los días para mí y para mi bebe.