Capitulo 35

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3 años después...

Mordí mi labio. Cerré los ojos y una vaga imagen de mi padre vino a mi mente, le extrañaba... pero no, no podía permitir disgustarme en este día tan especial.

David me esperaba al final del pasillo. Le sonreí mientras caminaba lentamente. No podía creer que estaba a tan poco de casarme, con él, con Ethan, el primer amor de mi vida, el segundo era mi niño, quien ya tenía 3 hermosos años.

-Estas preciosa- me alago.

-Gracias- me sonroje- me siento tan bien.

-Esa es mi chica. ¡Hoy vamos a romper la pista! Espero que hayas traído unas buenas zapatillas para bailar.

Reímos los dos y continuamos caminando por la galería que rodeaba la casa. Me abrace mas al brazo de David, no podía estar tan nerviosa.

Llegamos a la gran puerta blanca. Inspire hondo varias veces.

-¿Estas preparada?- me pregunto David.

-Sí, solo que los nervios me están ganando.

Sonó la marcha nupcial; rece una vez y suspire, que todo vaya bien.

Observe por la ventana chiquita que tenia la puerta. Ethan estaba en el altar con un espectacular esmoquin negro; todos estaban aquí, sentados y mirando hacia la puerta.

-Listo. Listo.- se sintió la voz de la organizadora de bodas- chicos, ahora se abre la puerta.

La puerta blanca se abrió lentamente. David comenzó a caminar y yo cuando reaccione le seguí. Mientras caminaba le sonreía a todos nuestros invitados, todo el mundo estaba muy lujosos vestidos y lucían hermosos.

David me dejo en el altar con un beso en mi mejilla y se sentó al lado de mi madre y Alicia, en la primera fila. Ethan me ayudo a subir los primeros escalones, sus manos estaban sudadas, oh mi amor, estaba tan nervioso al igual que yo.

Observamos de nuevo las puertas blancas y estas se abrieron, de allí salió Theodoro caminando despacio y con la ayuda de Flor. Traía los anillos en sus manitos, todo el mundo susurraba y lo miraban atentos con amor. Theodoro venia riéndose y alzando sus manitos cuando nos vio en el altar.

Denisse apareció atrás tirando rosas rojas y blancas. Llevaba un vestido de marca muy precioso, el cual había elegido ella, parecía una princesa, y en su cabeza tenia una corona de flores que habíamos hecho juntas.

Ethan me planteó la propuesta hace 3 años de que adoptáramos a Denisse, yo acepte sin dudarlo, era una niña tan adorable, educada y hermosa a pesar de haber sufrido tanto. Estaba muy grande, el tiempo se pasaba rápido y crecía mucho. Cada tanto se le escapaba el "mamá" y yo me emocionaba tanto, Denisse se ponía colorada.

Ethan agarro los dos anillos de Theodoro y me tendió uno a mi.

El sacerdote comenzó con la ceremonia de bodas.

-Habéis venido aquí, hermanos, para que Dios garantice con el sello su amor, ante le pueblo de Dios aquí congregado y presidido por su ministro. Un día fueron consagrados en el Bautismo; hoy, con un nuevo sacramento, Cristo va a bendecir su amor, y los enriquecerá y les dará fuerza, para que se guarden siempre mutua fidelidad y puedan cumplir siempre con su misión de casados. Por tanto, ante esta asamblea, dejamos que expresen sus votos.

Ethan se aclaro la garganta y me guiño un ojo. Estaba tan apuesto.

-Esperanza... amor de mi vida. Hemos pasado tantas tormentas, nos hemos caído millones de veces pero juntos pudimos afrontar todo. Nuestra historia no es de esas épicas, que todo va bien, que comienzan bien y terminan bien. No, nada de eso. No comenzamos bien y me arrepiento cada día de haberte hecho sufrir tanto hace 4 años...- suspiro y froto el dorso de mi mano que sujetaba firmemente- pero eso me ha hecho valorarte mas, ha reforzado nuestra relación y nos abrió los ojos; somos hecho uno para el otro. Si Theodoro no hubiera aparecido en nuestras vidas, todo seria diferente, no nos hubiéramos buscado, los dos eramos tímidos para eso, pero gracias a nuestro hermoso bebe, hoy y siempre estaremos juntos. Te amo, Esperanza.

Embarazada en apurosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora