-¡Thomas!- grité.
Hacia una hora que estaba gritando el nombre de Thomas por toda la casa y todavía no podía dar con él, no sé dónde se había metido este chico. Mi furia aun aumentaba cada vez que tecleaba el nombre de Ethan y éste no me respondía, tampoco sé dónde se metió Ethan.
-¿Thomas, donde rayos estabas?
-Uhm...- él estaba nervioso, sé que no debí hablarle de esa forma.- estaba lavando el coche, yo...
-Tranquilo, tranquilo...-suspire frustrada.- hoy tengo un malhumor y no es mi día. Necesito que me lleves al médico y me acompañes, por favor.
-Claro, ya saco el coche. Usted espéreme afuera.
-Sí... voy a buscar mi abrigo.
***
El tráfico estaba insoportable. Ahora no era yo sola la que suspiraba frustrada dentro del auto, sino que Thomas también lo hacía. Y justo en ese momento quise tener una moto, ellas pasaban entre los autos sin importarle quedar atascadas o el embotellamiento de autos que había.
Mi celular vibro entre mis dedos y conteste a Ethan.
-Ethan, que sucede contigo... ya ni los mensajes me contestas.
-¿Hola, que necesita?
¡¿LA VOZ DE UNA MUJER?!
-¿Q-qu-que? ... ¿Quién eres?
-¿Quién es usted?
Ay, no solo era el tráfico y Ethan quienes me jodían hoy, también esta chica.
-Necesito hablar con Ethan, dame con él.
-¿Quién llama?
-¡¡Te he dicho que me pases con Ethan!!
Se sintió un ruido del otro lado del móvil y la voz de Ethan apareció.
-¡Amor! Aquí estoy...
-Ethan, no me llames amor y explícame que es eso de que otra mujer contesta tu móvil.
-No Esperanza, no pienses otras cosas...
-¡Ja! Dile eso a una embarazada...
-Ella no es nada importante mío, solo es mi entrenadora personal, hoy te deje una nota en la almohada que me iba al gimnasio. Tengo que entrenar.
-Pe-e-ro... Ethan...-estaba desesperada.
-Princesa... no te preocupes, ella no es nada mío y tampoco quiero nada con ella, solo es una entrometida que le gusta contestar mi celular y aun no sé porque lo contesto.
-¡¡Porque no paraba de llamar, está loca!!- grito la chica anterior, apenas sentir su voz me hizo poner más loca de lo que estaba y además me había tratado de loca.
-Perra.-gruñí entre dientes.
-Esperanza...- me regaño Ethan.
-¿Qué?... Bueno, Ethan, ella no me importa, bueno sí. Pero hay algo más importante, hoy tenía la cita con el médico y no quiero que faltes.
-Perdona princesa, de verdad, lo siento... es que en dos días es la gran pelea y necesito entrenar realmente.
-Está bien. Total tengo a Thomas que me está acompañando.
-No, cualquiera, pero él no.- gruño Ethan.
-Adiós...
-¡Esperanza!¡Que no te toque!
Y le corte..
-Señorita.
-Thomas, llámame Esperanza, ya te lo he dicho.
Thomas se sonrojo levemente y me sonrió asintiendo con la cabeza.
-Esperanza, ya hemos llegado al hospital.
***
-Felicidades, ese niño crece muy bien.- me dijo el doctor con una sonrisa.
Yo le sonreí, no solo el niño crecía bien, sino que yo también había mejorado mi anemia y todo estaba perfecto, mis resultados dieron muy bien así que ya no tenía que preocuparme en cualquier enfermedad o algo así. Porque había algo que me volvía loca el pensar que el bebe naciera con alguna anormalidad o tuviera problemas en el parto, no podía parar de pensar en ello, aunque quisiera siempre me crecía una preocupación en mi pecho que reprimía mi corazón al pensar en que mi niño o niña naciera con alguna anormalidad o problema.
Thomas cogió mi bolso y juntos salimos hacia los pasillos del hospital. Íbamos hablando con Thomas hasta que volteo mi cabeza y observo al final del pasillo a Margot, la mama de Ethan, ella traía unos papeles en su mano y su cara era de preocupación tremenda.
Camine rápido con Thomas a mis espaldas y llegue hasta Margot.
-¡Margot!- le llame.- que sorpresa verte aquí.
Ella me busco con su mirada, me sonrió y se acercó a darme dos besos cada uno en cada mejilla.
-Cariño, un gusto verte. ¿Cómo anda mi hijo maleducado? Ese niño ya ni vista a su madre...
Reí.
-Ethan está de maravillas, ya le voy a decir que les dé una vuelta.
-Gracias mi niña... ¿y qué haces aquí?
-Vine por una revisión médica, por ahora el embarazo lo llevo excelente.
-Estoy feliz, ya quiero que nazca y me convierta en una abuela guapa.
Las dos miramos mi vientre un poquito abultado y sonreímos al unísono. Margot levanto su mirada hacia Thomas
-¿Quién es él?
-Oh... él es el chófer de Ethan.
-¿Y porque te ha acompañado el chófer y no mi hijo?
-Ethan esta con sus prácticas de boxeo.
-Ay, mi niño sí que es maleducado...
-Thomas, si quieres vete al auto.
Thomas sonrió y pasó por nuestro lado pidiendo permiso y se retiró.
Margot me agarro de las manos y me condujo hacia unas banquetas que allí había, nos sentamos y ella comenzó a darle calor a mis manos con las suyas. Le sonreí, pero ella ya no llevaba la misma sonrisa.
-Estoy preocupada, mi niña.- dijo Margot.
-¿Por qué, Margot?
-Hoy vine al médico, me sentía muy mal esta mañana, he perdido peso, vomito sangre, estoy todo el tiempo con cansancio... y pues, pensé que era la edad.
Yo asentí esperando a que ella continuara, no sabía a qué venia esto pero quería saber que le sucedía.
-Por favor, linda, no le digas nada a Ethan.
-No sé si hay que ocultar algo así a Ethan, usted es su mama y si es por su salud, le tiene que decir.
-No, no, él le caería mal si yo le digo lo que me sucede.
-Tranquila Margot, tal vez tiene razón... no le decimos... ¿Pero que le sucede?
Margot suspiro, apretó más mis manos y hablo.
-Tengo cáncer.
No, no podía ser.
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Embarazada en apuros
Romance《Completa. 35 capitulos + capitulo extra. No contiene segunda parte》 Y cuando Esperanza pensó que todo le iba mal, llegó él y la colocó debajo de sus alas protectoras salvándole de todo mal que la rodeaba. Únete a esta historia apasionante, única y...