Existe una profecía que dicta sobre dos almas pasadas que volverían a reencontrarse después de milenios.
Marinette y Adrien deben enfrentarse a diversos retos que les depare el destino descubriendo que ellos en realidad son más que unos simples port...
Marinette se encontraba inconsciente el el suelo de su sala después de todo lo que había pasado, cometí un gran error pues me deje llevar por el deseo de besarle ¿Desde cuando me gusta Marinette?
Por lo menos mis pensamientos me mantuvieron despiertos, de lo contrario estaría en el suelo junto a ella.
-Flashback-
Recuerdo perfectamente el día en que me salvo de un akuma?). Nos encontrábamos a mitad de clases cuando en un estruendo todas las ventanas del salón se rompieron de golpe, de todos los vidrios rotos salio una chica.
-Ohhh pero que ternura, mortales indefensos- dijo la joven pelirroja con sarcasmo-Ustedes formaran parte de mi colección de sombras- A diferencia de los demás akumas esta llevaba el rostro completamente descubierto, parecía alguien común a diferencia de que en sus brazos y piernas se hallaban sombras que se adherían a su cuerpo, estas se movían constantemente.
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-Verán- dijo parándose en el escritorio de la profesora -Yo no soy cualquier villano, esa mariposita no me controla Chat Noir y Ladybug- hablaba como si supiera de nuestras identidades pero ¿Donde estaba Ladybug? -A diferencia de ese idiota yo si tengo un verdadero motivo de venganza. Me presento, mi nombre es Thalia- después de sus palabras abrió los brazos para dejar salir alguna clase de neblina que en pocos segundos rodeo al salón-Y vengo a robarles parte de sus almas-
Agradezco que mis habilidades como Chat Noir también estén presentes un poco como Adrien, en ese momento podía ver perfectamente. Sigilosamente busque la salida para buscar un lugar donde transformarme pero antes de lograrlo Thalia me detuvo.
-¿A donde vas minino?- sonrió maliciosamente -No sabes cuanto me alegraría que fueses el primero en quedar bajo mi dominio, entrégame tu anillo- voltee para revisar si alguien en esos momentos nos observaba, nadie.
-¿Cómo sabes quien soy?- dije
-Fácil, puedo sentirlo. Tengo más años que cualquier tonta reliquia que exista, en verdad no quieres meterte conmigo- acerco una de sus manos peligrosamente hacia mi rostro -Prepárate para ser un esclavo-
-¡ADRIEN!- Una chica de coletas azabache salto repentinamente hacia Thalia -¡Déjale en paz!- le golpeo la cara, la pelirroja le empujo para tirarla al suelo.
-Vaya, vaya- le tomo por el cuello elevándola peligrosamente -Qué tenemos aqui, Ladyb...-
Aun siendo ahorcada Marinette le dio una fuerte patada para zafarse de su alcance.
-No se que haz hecho pero no te puedo patear el trasero como corresponde- la chica mostraba confianza y determinación -Pero no es necesario, aun así puedo hacerlo- jalo la pierna derecha de Thalia lo que hizo que perdiera el equilibrio y cayera al suelo -No quiero pelear contigo Katherine-
