Capítulo 7: Indirecta

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MARINETTE
La luz del amanecer se filtraba a través de la habitación, abrí los ojos lentamente y los frote con mis manos. Tome mi teléfono, me había levantado temprano.

-Buenos días Tikki- di un largo bostezo.

-Vaya- floto hacia mi y abrazó mi mejilla -Me alegra que estés despierta, qué mariquita te pico? Ya van dos días seguidos- dijo burlona.

-Nada- contesté -Es solo que me siento mejor y con mucha energía- el recuerdo de la visita de Chat Noir me había alegrado.

-Desde cuando sientes algo por tu compañero de batallas?- soltó, no pude evitar un sonrojo -Desde cuando te sonrojas por el?- extendió la pregunta.

Suspire fingiendo restar importancia sin embargo una tonta sonrisa se escapaba de mis labios.

Acaso Chat Noir me gusta? No! Seria como engañar a Adrien

-No lo se Tikki, tal vez es solo que le extrañe y ahora me alegra estar con el. Vamos, debo de cambiarme.-

Media hora después ya estaba lista. Baje, había una nota en el refrigerador.

Marinette:

Lamentamos no haberte avisado ayer pero cuando queríamos ya estabas dormida.
Nos fuimos a comprar unos cuantos ingredientes fuera de la ciudad pues son exóticos y difíciles de encontrar, los necesitamos para un pedido y no llegaremos hasta mañana.
Hay comida en el horno.
Te queremos mucho
Atte: Mamá y Papá

-Al parecer hoy estaré sola- dije a la nada -Tikki, puedes bajar. No hay nadie!- la pequeña kwami bajo de las escaleras y se acercó a la mesa para tomar una galleta y comerla.

-Por qué no están tus padres?- dijo con la boca llena. Le pase la nota para que la leyera -Oh-

-Hoy estaremos solas- conteste -Lo mejor sera que ya nos vayamos a la escuela- dije señalando a un reloj en la pared de la cocina -Se hace un poco tarde-
Caminaba con tranquilidad hacia el salón pues faltaban aun diez minutos para la primera clase, sin embargo yo no podía evitar que mi mente estuviese solo concentrada en Chat Noir. No fue que salí de mi burbuja hasta que alguien me interrumpió.

-Marinette! Marinette!- Alya se acercó a mi corriendo -Qué tal te fue ayer?- dijo

Me puse pálida, había olvidado por completo a Adrien.

-EH... Yo... Pues m-muy bien- comencé a tartamudear.

Otras dos personas se unieron a la incomoda conversación.

-Alya, Marinette- dijo cortes Niño.

Adrien nos saludo moviendo la mano y después tomó la mía para besarla.

-Buenos días princesa- me guiño una ojo.

Esto es un enredo de verdad.

-Tengo una idea!- exclamo Alya -Ya que nuestros tórtolos están unidos qué les parece si por la tarde hacemos una cita doble?.

Negué energéticamente.

-No, la ultima vez nos obligaron a besarnos. Qué tal si las cosas no hubiesen salido bien?-

-El hubiera no existe Marinette, ahora por ese "beso" están juntos-

No todavía, no hasta que resuelva el lío en mi cabeza.

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