DECISIONES

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En el momento justo en el que abrió los ojos a esta nueva vida, nosotros estuvimos a su lado. La confusión era clara en sus frías y hermosas facciones. Sus cabellos ahora parecían más rubios, su piel era porcelana, sus ojos rojos, y ojeras rodeándolos, sus labios más rojos, que de tan rojos parecían morados y hermoso, parecía la representación perfecta de la belleza masculina.

Un gemido salió desde el fondo de su garganta, y en menos de un segundo Emmett y Rose estuvieron a su lado.

-mi amor... todo estará bien... -dijo mientras lo rodeaba con cuidado, Renato no se movió, solo nos observo por una breve fracción de segundo, antes de recostarse en el pecho de Rosalie.

Para saber con mayor exactitud en que consistía el don de Renato, fuimos visitados por el clan Denali. Eleazar no pudo darle un nombre exacto a la facultad con la que Nat contaba pero logramos saber como funcionaba.

Nat controlaba todo tipo de dones, solo bastaba que el captara, "su esencia", por decirle de alguna manera, puede mantenerlos con el y usarlos a su antojo, o bien puede darle ese don a otro ser de nuestra misma naturaleza, claro que eso en lugar de una ventaja es una desventaja.

Por ejemplo, cuando el quito el don de Edward para dárselo a Jasper en aquella fatídica noche, lo que ocasiono fue confusión por ambas partes, por el hecho de que uno perdió su facultad, mientras que al otro se le otorgaba el control de algo que no sabia como manejar. Quizás por eso fue que jane perdió el control aquella noche.

Por otro lado, mientras más tiempo Nat se preocupaba en controlar su facultad, más ansioso y aislado se volvía. No hablaba, y se cerraba completamente. Cuando su mente empezaba a vagar con cosas poco agradables, era cuando me quitaba mi facultad, para proteger su mente de Edward, y eso era más que frustrante para mí esposo y para mi.

Cuando se te arrebata tu don, es como si te estuvieran quitando parte de ti misma, te sientes vacio, incomodo, confundido, y Renato me ponía de mal humor a mí también. Quería pedirle que dejara de hacerlo, pero entendía que quizás eso empeoraría su situación.

-has intentado expandirlo... -propuso Kate a Nessie, una tarde, mi hija se veía interesada en la idea de logar que su don no fuera simplemente al tacto, ella quería lograr que los demás supieran lo que ella pensara, sin tocarlos.

-¿eso como será útil? -le había preguntado Emmett divertido.

-bueno supongamos que un vampiro quiere patearte el trasero y no lo has visto... yo podría informarte desde una distancia, sin hablar... -soltó mi hija, mi cuñado se quedo en silencio

-cierto, muy cierto... -dijo con gesto solemne -apréndelo enana... -la animo, haciendo que todos nos riéramos.

Aquello había hecho que la estancia de los Denali en nuestra casa se alargara. Lo que no me molestaba, después de que Tanya conociera a nuestra hija, parecía haber entendido su falta de oportunidades con mi esposo, además de que Carmen y Eleazar eran una excelente compañía.

Un estruendo se escucho en la parte inferior de la casa, haciendo que todos nosotros nos congregáramos en el jardín.

-¿Qué paso? -pregunte, y Jasper sonrió ampliamente

-Eleazar tenia practicando a Nat, pero ocurrió un error... -dijo mientras lo veía apretar los labios, para no reírse.

-le dije que le quitara el don a Kate, y se lo diera a Ness, y viceversa... pero... -empezó Eleazar, antes de ver a Emmett, el cual estaba en le piso maldiciendo y lanzando improperios al aire.

-hubo una confusión, se lo dio a Edward. El toco a Emmett y... lo electrocuto -dijo Alice burlona y entonces todos rompieron a reír

-me las van a pagar -gruño Emmett desde su posición -¡diablos! -Gimió -tu poder es terrorífico Kate...

Isabella CullenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora