Capitulo 30

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Pasaron dos semanas desde que vi a Nicholas con Emma. No lo volví a ver, por lo menos hasta ahora y espero que sea así para siempre, antes, cuando pensaba en el, seguían esas mariposas en mi estómago pero ahora ya no siento nada.

Esta semana estuve muy ocupada, tuve muchos examenes, apenas tenia tiempo de almorzar porque luego tenia que empezar a estudiar. En una semana más nos vamos a Hawaii, todos estamos muy emocionados, hoy Abby y yo iremos de compras, tenemos que comprar ropa para Hawaii. Por fin hoy era sábado, eran las 10 de la mañana y ya estaba con mi uniforme del equipo de fútbol terminando de desayunar para ir a mi práctica.

Hace mucho que no iba, así que decidí retomarlas hoy, necesitaba volver a hacer lo que más me gusta.

-Adiós -grité para que me escucharan y salí de casa.

Subí a mi auto, pero apenas me senté me empezó a doler él pecho y la espina dorsal, apoye mi cabeza en él volante, me dolía demasiado pero ya me había acostumbrado, siempre tenia estos dolores. Cuando él dolor fue bajando arranque y me dirigí al lugar donde practicamos.

No tardé más de 10 minutos en llegar, parquee y bajé del auto. Me dirigí a la cancha donde se encontraban todas mis compañeras y mi entrenadora. Saludé a todas y me quede charlando con ellas hasta que empezamos a entrenar.

Primero teníamos que calentar y de ahí empezábamos a jugar. Estaba dando la última vuelta a la cancha cuando empecé a toser exageradamente, sentía que me estaba ahogando, dejé de correr y me senté en él césped, no podía dejar de toser y me empecé a sentir asfixiada era un dolor que nunca había experimentado. Me empezó a doler terriblemente la cabeza, y mi espalda, mis compañeras se acercaron a mi muy preocupadas.

-Ambulancia, necesito que vengan urgente a la cancha St'Thomas, hay una chica que se está ahogando, por favor -escuché la voz de la entrenadora y eso fue lo último que escuché porque caí desmayada al suelo.

Me desperté por él sonido de unas voces, abrí los ojos y me encontraba en una ambulancia con dos enfermeras a lado mio tomandome la presión y poniéndome él tubo para respirar.

-Que paso? -pregunte. Lo ultimo que recuerdo es haberme sentido asfixiada, pero tan grave fue?

-No hable por favor, esta muy delicada -dijo una enfermera con una amable sonrisa, agarró una jeringa y me la puso en mi brazo, empecé a ver todo negro hasta que mis ojos se cerraron.

-Anna, despierta por favor -escuche la voz de mi mamá.

Abrí los ojos y la vi a lado mio, toamandome de la mano y con los ojos llorosos.

Al verme despierta sonrió y me abrazó.

-Te desmayaste demasiado tiempo, me preocupe mucho -dijo mientras limpiaba sus lágrimas y me daba un beso en mi mejilla.

-Cuánto tiempo estuve desmayada? -pregunté un poco confundida.

-Casi tres días -dijo con una sonrisa triste -Hay personas que quieren verte -dijo antes de volver a abrazarme y salir del cuarto.

A los minutos entraron mis hermanos, mi papá, Troy, Abby y Jake. Todos me abrazaron y venían con globos como :Que te mejores o cosas así. Empezamos a hablar animadamente y empezaron a contar chistes y a hacerme reír demasiado, como quiero a estos chicos.

-Chicos, perdón por romper su charla, pero alguien quiere ver a Anna -todos me miraron un poco discretos y con una sonrisa todos salieron del cuarto. Que están tramando?

-Apenas se enteró se quedó aquí todo él día a esperar a que despiertes. Está muy preocupado -dijo mi mamá con una sonrisa y salió de la habitación, quien es esa persona a la cual le importo tanto?

Esperé unos segundos hasta que se abrió la puerta y la sonrisa que tenia desapareció por completo. Que hacia Nicholas aquí?

Al parecer Nicholas se dio cuenta de mi cara porque al instante me miró triste.

-Que haces aquí? -le pregunté mientras él cerraba la puerta y se sentó en un sillón un poco alejado de mi. Mejor. Él me miró por unos segundos, cuando entró al cuarto normalmente empezaría a llorar y a pensar en todo lo que pasamos, pero no sentí nada. Estoy aprendiendo a bloquear mis sentimientos y eso es muy bueno.

-Estaba muy preocupado por ti -dijo mientras me miraba a los ojos. Este momento era demasiado incómodo.

-Tu novia sabe que viniste? No quiero que se enoje -dije lo más indiferente posible, sinceramente no me importa si Emma se enoja o no, solo quiero saber si están juntos.

Hizo una pequeña mueca, como si le incomodara mi pregunta.

-No se va a enojar, ella no es así -y para que mentir, eran novios y él me lo había confirmado, fue un golpe duro, pero no voy a llorar, no por él.

Asentí y nos quedamos en un silencio bastante incómodo.

-Ya viste que estoy bien, porque no te vas? -pregunte fastidiada, aunque odiaba actuar así con él, él se lo ganó.

-Estoy esperando él veredicto del doctor, solo quiero saber que tienes y de ahí me voy -dijo seco.

Nunca me había hablado así, pero no me importa, él ya no me importa.

Tocaron la puerta y entró Abby y Troy, sentí un gran alivio porque llegaron en él momento exacto. Empezamos a charlar y hasta Nicholas habló y siempre me miraba de reojo pero yo volcaba la mirada, no quiero saber nada de él. Mis papás también se unieron a la plática.

La charla estaba muy interesante hasta que entró él doctor.

Mis papás se pararon y lo saludaron.

-Buenos días a todos. Sientense por favor -dijo él doctor hacia mis padres.

-Ya sabe lo que tiene nuestra hija? -preguntó mi papá.

-Si. Y lamentablemente no son buenas noticias.

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