Capitulo 32

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Al salir del hospital, ninguno de nosotros dijo una sola palabra. Todos estábamos sumidos en nuestros pensamientos.

Me siento demasiado mal. No puedo evitar pensar que tal vez si le hubiera hecho caso a mi mamá y hubiera venido al hospital antes, ahora ya estaría mucho mejor de lo que estoy ahora.

Mis papás entraron al auto junto a mis hermanos y se quedaron ahí esperándome hasta que termine de despedirme de Nicholas y mi amiga. Miré a lado mio y ahí se encontraba Nicholas, mirando al suelo sin decir nada.

Me acerqué un poco más a él y lo tomé de su barbilla para que me mirara. Cuando nuestros ojos se encontraron, estos se veían apagados y reflejaban tristeza. Nos miramos un buen tiempo, hasta que el rompió el contacto visual y me atrajo en un abrazo. Al separarse, me dió un suave beso en la frente.

-Irás a mi casa? -le pregunté mientras él entrelazaba nuestras manos y besaba mis nudillos, uno por uno.

-Si. Quiero estar todo él tiempo que pueda contigo -le sonreí melancólicamente y él me devolvió la sonrisa.

Esto último que había dicho hizo que mi corazón se estrujara. No quiero pensar en cuanto tiempo me queda para estar con él y con mi familia...

-Iré contigo -él asintió y se separó un poco de mi para que les hable a mis papás.

Cuando les dije que Nicholas me llevaria a casa ellos aceptaron y emprendieron él camino a casa.

Abby se fue con nosotros ya que cuando vino no trajo su auto, vino en taxi. Me senté de copiloto en él auto de Nicholas, él de piloto y Abby atrás.

En él camino nadie habló, no había ni música, todo era un silencio sepulcral. Lo único que se escuchaba eran nuestras respiraciones.

Odiaba estar así, odiaba que nadie hablara, odiaba que todos estuvieran tristes por mi y odiaba tener cáncer.

Jamás pensé que llegaría a tener una enfermedad tan grave,y todavía no llego a asimilar la noticia que acababa de recibir. Estoy realmente asustada.

Nunca me esperé tener esto, pero ahora que lo tengo no quiero que todos estén en silencio y que hablen lo necesario. No quiero que todos estén tristes por mi, quiero que ellos sean felices y que no se preocupen por mi.

Llegamos a mi casa en unos minutos, pero sentí que fueron horas, odiaba ese silencio y la cara de tristeza que todos tenían.

Nicholas me abrió la puerta y me tendió una mano para ayudarme a salir del auto. La tomé y le agradecí con una sonrisa pero él no sonrió, lo intentó, pero sólo logró una mueca.

Entramos a mi casa y ahí ya se encontraban mis papás y mis hermanos. Troy y Jake tuvieron que irse porque ya era un poco tarde, pero me dijeron que mañana vendrían a verme.

Nos sentamos en él sillón y de nuevo ese silencio que tanto odio llegó.

-Quieren algo de comer? -preguntó mi mamá intentando alivianar un poco las cosas. Asentimos y ella se dirigió a la cocina.

De nuevo él silencio. Mi papá prendió la televisión y empezó a hablar con mis hermanos sobre él partido que estaban transmitiendo para que no siga ese insoportable silencio.

Y ahora se escuchaban sus voces y él ambiente se destensó un poco, pero Nicholas y Abby seguían en silencio mirando a un punto fijo.

Sabía que era casi tan difícil para ellos como lo era para mi, y era comprensible que nadie quisiera hablar del tema, pero lo que molestaba era que actuaban y trataban de pretender que nada había pasado, porque eso era imposible.

Me levanté del sillón, ya harta de la situación y subí las gradas hasta mi cuarto, sin decirle a nadie porque ni a donde me iba.

Al llegar, cerré la puerta detrás mio, una vez que entré, caminé directamente hacia mi balcón. Abrí las puertas y salí a este, apoyándome en la baranda, con la brisa de la noche dandome en el rostro mientras miraba al cielo.

Se que es difícil, para mi esa noticia es muy difícil, y lo será hasta que me muera, pero no tienen que quedarse en silencio todo él tiempo.

Sentí un brazo que rodeo mi cintura y me besaron la mejilla. Me di la vuelta y era Jack, mi hermano.

-Porque viniste aquí? -preguntó mientras se paraba a lado mio sin dejar de abrazarme.

-Porque abajo me sentía mal. Todos están en silencio pensando en lo que tengo y no debería ser así. Ustedes no se merecen estar tristes, merecen estar felices pero yo lo arruiné -digo mientras lágrimas caen de mis mejillas, siento que soy la culpable, no merecen sufrir por mi.

-No arruinaste nada Anna, nisiquiera vuelvas a pensarlo. Lo único que haces todos los días es sacarnos una sonrisa a todos lo que te rodean, no te culpes de nada. Y ahora seguiremos adelante, y todo irá bien si? -dijo Jack mientras me besaba la cabeza -Entiende a Nicholas y a Abby, ellos están en una especie de shock. Que tu mejor amiga y que él amor de tu vida este con una enfermedad... terminal, no es algo que se digiere muy bien -dijo haciendo una mueca.

Y lo abracé, él me envolvió en sus brazos y lloré, me desahogue con la persona que más confio y quiero en él mundo, sin Jack no podría seguir adelante él es más unido a mi que Luke y siempre estuvo para mi.

Y como dijo él, vamos a salir adelante, voy a salir adelante, esto simplemente va a ser un bache en mi vida que luego será parte de mi pasado. No voy a rendirme tan fácilmente. Voy a luchar hasta él final, con todas mis fuerzas, y me voy a aferrar a la vida con garras y dientes. No solo por mí sino también por las personas que amo y se preocupan por mi.

Desde hoy empieza mi lucha, pero ahora simplemente estaré con las personas que más amo y disfrutaré mi vida como se debe.

The Perfect LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora