Prologo

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Septiembre 2010

Me encontraba en el hotel de concentración de la Selección Mexicana de Fútbol, estaba emocionada tenia desde hace como tres o cuatro años sin ver a Giovani y Jonathan los conozco desde mi infancia. Tía Claudia vivía enseguida de casa de ellos cuando aun vivían en México y tenia buena relación con su familia, tan asi que a los hijos de tía Claudia (James y Rodrigo de quince y dieciocho años), mi hermana (once) y a mi (diecisiete) nos querían como si fuéramos parte de ellos. Tía Claudia es esa clase de personas que procura a la gente y le gusta ayuda, estaba dentro de una fundación que ayudaba a niños de escasos recursos y los Dos Santos formaban parte.

Aun recuerdo que cuando Camila y yo nos quedábamos solas, la llamábamos para que nos recogiera porque no había nadie, ella nos llevaba a su casa para que nos quedáramos con ella mientras las aguas con mi madre y abuela se calmaban. Pero cuando ellas se enteraban de que estábamos con ella llegaban enojadas las dos pero mi madre mas porque según ella intervenía en su manera de educar a sus hijas. Cuando eso ocurría, que mi madre comenzaba a gritarle y la abuela a defenderla, ella nos llevaba a casa de los Dos Santos para alejarnos de las discusiones, ellos siempre nos cuidaban a Camila y a mi, y eso no había cambiado del todo, siempre estaban al pendiente de nosotras.

Raúl con el que viajaría a California también siempre estaba al pendiente de mí y de Camila pero más de mí el era hermano del hombre que se hace llamar mi padre.

Recuerdo que un día de los fines de semana que me tocaba quedar con el, tuve un pequeño problema con su otra hija.

FLASH BACK
Septiembre 2005

Estaba sentada cerca de la ventana jugando con el cable de los audífonos del mp3 que tío Raul me había regalado. Cuando la hija de mi padre apareció y me lo arrebato, intente quitárselo pero ella era mas alta que yo y lo subió lo mas arriba que pudo, por mas que salte no lograba alcanzarlo. Maldecía el momento en que había aceptado venir a casa de mi padre el fin de semana, era el cumpleaños de la abuela asi que tenia que estar presente ella quería que todos sus nietos estuvieran y bueno yo era una de ellas.

-Hola inútil -dijo la hija de mi padre.-¿No lo alcanzas? -pregunto riéndose de mi, junto a otros niños, los cuales eran amigos de ella.

Baje la mirada resignada y me iba a retirar de ahí no quería problemas por su culpa, era muy buena haciéndome enojar y después se hacia la victima con su madre y a la que le iba mal era a mi.

Me di media vuelta y ella me empujo. Caí al suelo pero en ese momento un jarrón de cristal se cayo y se quebró haciendo un muy fuerte ruido. Ella y sus amigos se fueron corriendo dejándome ahí, cuando Elena la esposa de mi padre apareció y me miro en el suelo comenzó a gritarme, después me levanto de un brazo jaloneandome y me corrió de ahí.

Con lagrimas en los ojos me salí de la casa y me senté en la acera a dos cuadras de la casa. Ya no aguantaba de estar aqui a estar con mi madre era como la balanza mas horrible, prefería morirme de una vez. No son pensamientos de una chica de trece años. Pero si vivieran en mi lugar eso querrían.

Un auto se detuvo enfrente de mi y por inercia levante la vista y vi a tío Raul salirse del auto.

-¿Ana? Pero... ¿Que haces aqui? -quiso saber cuando me vio sentada en el suelo.

-Nada... solo...

-¿Te intentaste escapar de nuevo?

𝐀𝐋𝐋 𝐅𝐎𝐑 𝐋𝐎𝐕𝐄 || 𝐂𝐚𝐫𝐥𝐨𝐬 𝐕𝐞𝐥𝐚 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora