Capítulo 3 "Las pesadillas regresan"

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Otra vez no, esa pesadilla de nuevo no, tengo que dejarlo pasar, tengo que reprimirlo pero no puedo.

- Sálvate Kelly- hablo una voz masculina que liberaba a su hermana menor del asiento mientras que el trataba de liberarse también. El miro al frente y sus padres no respondían, no hablaban dándole a entender que ellos ya se habían ido.

-Por favor, no me dejes sola- hablo la pequeña Kelly de 8 años con miedo, miro a su hermano que seguía tratando de liberarse así que decidió ayudarlo. Su hermano al notar que no tenía escapatoria detuvo a su pequeña hermana y la miro.

-Corre lo más lejos de aquí Kelly y no olvides que te amo- dijo Joshua, quien después empujo a su hermana con todas sus fuerzas del auto, ella rodo un poco por la fuerza pero la alejo lo suficiente del auto que segundos después estallo llevándose a su hermano al igual que había hecho con sus padres.

Ella solo se quedó en el suelo sin saber que hacer pero lloraba en mitad de la carretera, sus ojos veían al auto en llamas, todo lo que ella amaba más en el mundo se había ido, ella está sola. Varios vehículos de emergencia llegaron al lugar del accidente, varios bomberos trataban de apagar el auto en llamas mientras que la pequeña niña era revisada por los paramédicos. Desde ese día ella jamás volvió a ser la misma niña feliz que era antes. .................................................................

Narra Kelly

Desperté agitada como siempre pasaba cada vez que tenía ese recuerdo en mis sueños, mire toda la habitación que se encontraba a oscuras y puedo apostar que estoy sudando por la pesadilla, mi respiración esta agitada y las ganas de llorar son enormes, respire hondo varias veces para calmarme pero no funcionaba, vi la hora en mi nuevo teléfono que me regalaron los señores Cimorelli, el reloj marcaba las 3 de la mañana así que deje el teléfono aún lado volví a ver la habitación que compartía con Lisa y Christina ellas aún dormían y agradecí que siguieran así. No quería que me vieran así y se preocuparan.

Me levanté con cuidado de la cama me acerque poco a poco hacia la puerta sin hacer ruido, la abrí y salí de la habitación.

Baje las escaleras y al llegar al primer piso fui al patio abrí la puerta corrediza y salí, me senté en el pasto no muy lejos de la puerta, saque de mi camisa un pequeño collar que era más un dije, era en forma de corazón y adentro había una foto de mi hermano conmigo. Ese fue el regalo que me dio Joshua antes del accidente por haber tenido buenas notas en el colegio, me traía varios buenos recuerdos con él a mi lado.

Sentía como cada recuerdo me golpeaba muy fuerte la cabeza que me hería más, si lo hubiera ayudado más el estaría conmigo ahora, si no me hubiera entrado el miedo el seguiría vivo ¿no?, sé que solo era una niña pero pude ayudarlo más pero... no pude.

No pude evitar llorar y apreté más el dije contra mi pecho, tenía la sensación de que así mi hermano estaba conmigo, de que jamás se fue, que él estaba a mi lado en todo momento aunque en cierto punto lo está, pero yo necesitaba mucho escucharlo, verlo y sobre todo abrazarlo.

Estaba tan metida en mis sentimientos que no me di cuenta que alguien me miraba, de inmediato guarde el collar de nuevo a su sitio, luego esa persona hablo.

-Tranquila... está bien llorar- esa voz la reconocí de inmediato, era la de Nick, pero aun siendo él no quería que me viera así.

-Pensé que estabas dormido- hable lo más gentil que pude, cuando estoy así tiendo a contestar muy mal.

-Vine por un vaso agua, luego te vi aquí sola así que...- dijo mirándome pero yo no lo miraba, realmente odiaba mucho que me vieran llorar.

-Necesitaba aire fresco- mentí, lo único que quería es que él se fuera a dormir de nuevo sin que se preocupara por mí, no me mal entiendan pero solo que así siento que no molesto. Él se sentó a mi lado dejando su vaso de agua del lado contrario.

-Sabes que puedes confiar en mi ¿no?, no le diré a nadie lo que me cuentes, puedo ser tu caja fuerte si quieres- hablo tomándome de la mano, no sé porque pero el toque de su mano con la mía provoco una sensación rara en mí y lo peor es que no se cual.

-No quiero preocuparte Nick- dije mirándolo a los ojos y el solo me dio una sonrisa de lado.

-Ahora somos hermanos ¿no?, tenemos la misma edad, así que dime ¿Por qué estabas llorando?- dijo pegándome hacia él en forma de abrazo, fue raro al principio pero luego me acomode, pude sentir que podía relajarme y lo hice.

-Es solo que... se acerca una fecha que quisiera olvidar pero para mí desgracia no puedo- dije bajando la vista pero sin despegarme de Nick.

-¿Lo de tu familia?- dijo y asentí- no te puede decir que se cómo te sientes porque te estaría mintiendo, pero sí puedo decirte que puedes desahogarte conmigo y siempre estaré ahí para apoyarte, eres parte de mi familia ahora y no dejaré que te derrumbes, las cosas las afrontamos juntos, como familia y no te dejare caer nunca, si sientes que caes yo estaré para sostenerte.- dijo y lo abrase, necesitaba un abrazo y él era el único despierto.

El me abrazo de regreso y empecé a llorar en su hombro, necesito a Joshua a mi lado, y sé que lo está pero olvide su voz, su risa, todo. Tengo una nueva familia que amo y aprecio pero jamás llenarán el vacío de la pérdida de mi hermano.

Se preguntarán porque solo digo de mi hermano y no de mis padres, pues ellos siempre trabajaban y nos dejaban con un amigo suyo. Casi no pasábamos tiempo en familia y la única familia que tenía cerca era Joshua. Y si extraño a mis padres pero eran las pocas veces que los veía y en cambio con mi hermano siempre estábamos juntos.

Seguí llorando un poco más en el hombro de Nick y él me decía que no estaba sola, que Joshua estaba a mi lado y no le gustaría verme así, que él jamás me abandono, talvez su cuerpo si pero su alma no.

-¿Ya éstas bien?- dijo el alzando mi cara con sus manos.

-Si...gracias por todo Nick- dije separándome de él lentamente el me sonrío para después pararse de donde estaba. Y apenas me doy cuenta de su pijama, tenía puesto un short del equipo de basquetbol de Nashville y una camisa de tirantes.

-Es mejor entrar, está haciendo frío y no quiero que te enfermes- hablo y me extendió la mano para levantarme.

La tome y me levante, al estar de pie, el me colocó su brazo alrededor de mi hombro, entramos a la casa y el me dejo en la puerta de mi habitación que compartía con Lisa y Christina.

-Cuando necesites hablar no dudes en hablar conmigo o con las chicas ¿ok?- dijo el con una sonrisa.

-Tú entiendes a las chicas ¿no?- dije y el solo asintió algo avergonzado pero con una sonrisa muy linda.

-Si...si algo me han enseñado al tener seis hermanas ahora 7 –río un poco- es que una chica es única y nos bonito verlas llorar- dijo y solo lo abrase.

-Gracias por ser mi hermano Nick- dije cuando me separe del abrazo.

-Descansa ¿sí?, dentro de un rato papá y mamá nos llevarán a una alberca- dijo y después de eso se fue.

Entre a la habitación y vi a las chicas durmiendo así que fui directo a mi cama al llegar me senté en forma de mariposas y saque de nuevo el dije.

-Ojala estuvieras aquí- dije tomando un respiro profundo, cerré el dije lo guarde de nuevo y me acosté en mi cama. Luego sentí a alguien del otro lado de mi cama y luego unos brazos rodeándome. Volteo y era lisa.

-¿Estas bien pequeña?- dijo acariciando mi cabello, y yo solo asentí.

-Ahora estoy mejor- dije y ella me acercó más a ella, que pude sentir su corazón latiendo y me relajo mucho más.

-Te amo hermanita, no lo olvides ¿ok?- dijo ella en un susurro sin dejar de acariciarme el cabello.

Luego caí dormida en los brazos de lisa.

Me haces tanta falta Joshua.

Adoptada Por CimorelliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora