Sangre

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Narrado por Nicolás

Baño. Baño. Baño. Baño. ¿Dónde estaba el baño?
La casa es demasiado gigante y ha sido tan bien decorada en una mansión embrujada que apenas distingo dónde está cada cosa... hasta han puesto una puerta falsa que intenté abrir pero que terminó siendo un pedazo de madera apoyado a la pared.

Además me siento asfixiado en el pasillo porque la gente está haciendo la misma búsqueda que yo, intentando encontrar algún lugar para rellenar su vaso con agua, o algún lugar privado para hacer lo que Dios sabe qué.
Paso por una pasillo estrecho, que me deja ver el primer piso de abajo, como si fuera una especie de balcón. Es un mar de personitas de colores bailando en la sala de estar que me saca una momentánea sonrisa. Hace un rato vi a una Khaleesi y a Jon Snow besándose en la cocina que encontré bastante tierno... además de otras parejas con disfraces nada coordinados.

Luego alzo la vista de nuevo, y veo parada frente a mi a la Alicia en el país de las maravillas más fea que haya visto en mi vida. 
Sus uñas pintadas aprietan el vaso rojo cuando nuestras miradas chocan.

Me doy vuelta en sentido contrario.

—¡Eh! Necesito una palabra contigo— me dice Victoria.
Apresuro el paso, pero ella se apresura más en ponerse en mi camino y detenerme.

—Solo quiero pasar al baño, no quiero problemas.— le digo.

Gus está hecho mierda—me dice.

—Pues felicitaciones, me parece que fuiste tú quien orquestó todo eso—digo intentado pasar a un lado de ella. Avanzo, pero me retiene con la mano.

—Sí, pero—se rasca la peluca, incómoda—no me habla. Me ignora completamente. Le hablo y pareciera que no escucha nada... ni siquiera actúa enojado. Ni siquiera me grita, ni mira. Es horrible. Es como si me hubiera bloqueado.

—¿Y a mi me coño me importa?

—Las cagué. Las jodí lasjodílasjodílasjodí. Lo sé, pero... tal vez...tú...

—Tu estás en el periódico escolar, también ¿no?— la detengo, y ella se queda callada—... y te apuesto que has sido tú la que filtró todo ese romance mío con él... ahora hasta te aseguraste de los que no lo sabían, se enteraran de todos los detalles.

—Intenté quitarlo pero ya se había subido. Además ocupó sólo una columna. Lo juro.

AAAGHHH.

—Dios, ¿no estás cansada? ¿Quién mierda te crees que eres, ah?— siento como la rabia comienza a apoderarse de mi, y me tomo ambas manos para que dejen de temblar— Me das asco, Victoria, enserio. Antes creí que de ninguna manera August podría tener alguna relación sanguínea contigo, pero ahora veo que son igual de manipuladores. Ambos. Me has quitado todo solo porque me ha gustado tu hermano... me tuve que esconder, y salir del armario apresuradamente a todo el mundo por miedo a que algún día no estuvieras de humor y decidieras revelar mi vida privada como si fuera una especie de juego para ti... me has arrebatado literalmente todo y...sabes, ni siquiera te puedo ver a la cara ahora.

Está a punto de llorar. Así que me giro porque sino, yo me pondré a llorar. Porque odio ver a la gente llorar, y es el cuádruple de efectivo si es que yo soy la razón por la que lloran.

Lo que está adelante de mi no es mejor.
August parado mirándome como si no me viera hace años. Él está disfrazado de Jon Snow.

Me lo quedo mirando, y entro en pánico... así que abro la primera puerta que está a mi derecha y entro a la habitación. Escapando.
Siento todo el enojo acumulado arder en mi pecho, en mis manos...

La Teoría De August (boyxboy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora