Capítulo #47: "Londres... Nueva York... 5570.12 km de distancia."

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*Maratón 01/04*

  Nuestras manos estaban entrelazadas mientras caminábamos en silencio por el aeropuerto. Ambos estábamos en silencio, sin decir nada, sabíamos que las despedidas no eran lo nuestro y menos luego de una semana de reencuentro. 

Desde que habíamos subido al taxi Juan estaba en silencio, me miraba fijamente y sonreía pero de su boca no salía ninguna palabra, lo que me decía que era mucho más doloroso para el dejarme ir.

Eso no quiere decir que para mi no sea doloroso partir a New York y alejarme de él. Pero de alguna manera, el destino me había demostrado que nosotros estábamos destinados a estar juntos, por más que nos alejemos, una fuerza siempre nos volvería a unir.

-Te extrañare mucho...- Hable rompiendo el silencio- No sabes lo doloroso que es para mí volver a dejarte, Juan.

-Pero nos encontraremos en tres semanas, volveremos a estar unidos y todo estará bien, lo prometo- Musito con una leve sonrisa, luego me beso la frente tiernamente.

Nos paramos en seco entre el medio de la multitud que comenzaba a caminar hacia las puertas para abordar los aviones. 

Juan poso su mano derecha en mi mejilla delicadamente y me acerco a él, nuestras frentes chocaron.
Miles de pequeños choques eléctricos recorrieron mi cuerpo con rapidez, las "mariposas" volvieron a girar en mi estomago.

Nuestros labios rozaron por última vez, inhale sintiendo su inconfundible aroma. El beso comenzó lento, nuestros labios encajando detenidamente hasta que Juan dio un empujón y nos chocamos con cierta brusquedad, el movía su lengua sexymente mientras yo recorría con mis manos su espalda. Memorizándome cada parte, guardando en mi memoria.

-Te amo más que a nadie en este mundo, Juan Londoño- Susurre sobre sus labios- No dejare de pensar en ti ni en un segundo, lo unico que hare será extrañarte.

El sonrió y volvió a besarme, haciendo que otros trescientos choques eléctricos me invadan. Los minutos parecían segundos y en media hora nuestros vuelos saldrían, primero el mío y segundo el de Juan.

Nos sentamos en unos asientos frente a las puertas de abordaje, yo sobre el regazo de Juan, rodeando su cuello con mis brazos.

Bostece, haciendo un gran ruido.

-Estoy muriendo de sueño...- Comente mirando sus ojos- No me dejaste dormir.

Juan sonrió pícaramente.

-Era nuestra última noche, no podíamos desperdiciarla- Bromeo Juan sonriendo- Además, no puedes negar que te encanto.

-¡Tonto!- Dije golpeándolo levemente en su hombro y soltando un ronca risita.

Juan estallo en risas, luego me tomo por las mejillas y volvió a besarme. Disfrutando uno del otro, recordando nuestros labios y sus detalles. Como encajaban perfectamente y el sabor del otro. Como mis manos tiraban de sus rizos cada vez que nos besábamos o como el posaba sus grandes manos en mis caderas. Costumbres que para mi eran perfectas.

-Pórtate bien, no quiero enterarme de otras muchachas que hayan estado contigo- Le digo algo sonriendo mientras enriendo sus rizos en mis dedos.

-Solo tengo ojos para una muchacha- Contesta dándome un besito- Y tu también compórtate, no quiero a ningún muchacho cerca de ti- Me da otro besito- Tu eres únicamente mía, ¿entiendes?

Asiento levemente, sonrojada.
-Tuya y de nadie más- Afirmo.

Me da un cálido beso.

-Prométeme que no olvidaras que te amo y que tu eres lo unico que me importa en esta vida, la única persona por la cual viaje hasta Grecia para demostrarle cuanto la amaba, la única persona que logro sacarme de mi pozo oscuro- Me coloca un mechón de cabello detrás de la oreja- Te amo, Heilyng Vivas, te amo más que a nada en este mundo, desde aquí hasta el infinito.

Tomo su mano y la coloco en mi corazón, demostrándole como late mi corazón.

-¿Sientes?- Le pregunto mirándolo a los ojos- ¿Sientes como mi corazón late cada vez que te me miras a los ojos y me dices que te amo?- El asiente delicadamente, con una gran sonrisa en la cara- Eres tú la razón por la que mi corazón aun late, por la que aun me mantengo vida... Es el amor, Juan, es tu amor.

Juan sonríe de oreja a oreja, sus ojos brillan llenos de ternura. Nos miramos por varios segundos, hasta que nos abrazamos con fuerza, sintiéndonos. Su olor tan peculiar y su cuerpo marcado, su hermosa sonrisa y su mirada llena de felicidad. Los extrañaría con todo mi cuerpo, el era mi todo.

-Vuelvo 0435 con rumbo a New York, Estados unidos, pueden comenzar a abordar- Chillo la voz en los parlantes- Repito, vuelo 0435 con rumbo a New York puede comenzar a abordar.

-Es tu avión, el mío saldrá después- Habla Juan con la voz algo ronca.

Nos retiramos con los ojos algo llorosos, es la señal, el momento, la despedida. Nos ponemos de pie sin decir nada, mirándonos a los ojos, abrazados. Caminamos hasta la puerta H donde Arthur y Becky están comenzando a abordar el avión.

-Tres semanas, preciosa, solo tres semanas- Dice Juan mirándome fijo- Nos veremos en New York.

Nos volvemos a besar con tanta pasión que siento que salen chispas. Nos besamos desesperadamente, intentando detener el tiempo y quedarnos solos, besándonos por la eternidad. Hasta que de hacerlo me sangren los labios.

-Te amo, Juan y siempre lo hare- Digo posando mis manos en su mejilla, le doy un besito- Jamás lo olvides.

-Jamás lo olvidare- Repite, sonriendo levemente, con los ojos algo llorosos.

Le doy un último beso y me doy la vuelta, mordiéndome el labio para no estallar en llantos. Camino lentamente, hasta la puerta y entrego mi pasaje a la azafata sin mirar hacia atrás. Cuando la azafata toma mi pasaje, me vuelvo hacia atrás y alli lo veo, mirándome con dulzura.

Y sin pensarlo dos veces, con todas mis fuerzas grito:

-¡TE AMO JUAN LUIS LONDOÑO ARIAS! ¡TE AMO CON TODO MI SER!

Las personas se voltean para vernos algunos horrorizados y otros enternecidos.

-¡TE AMO HASTA EL INFINITO _______ VIVAS! ¡TE AMO! ¡TRES SEMANAS!- Responde Juan sonriendo.

Yo asiento levemente, me despido con la mano levemente y subo al avión. Ahora sí, llorando a más no poder. Tomo asiento junto a Arthur que sin preguntarme nada ya me abraza y me consuela y susurra que todo estará bien. Que en solo tres semanas nos volveremos a ver y todo estará bien.
Porque cuando el amor es verdadero, siempre vuelve.  

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¡Holaaa!.. Tanto tiempo :c. No es para que lloren pero... La novela esta llegando a su capítulo final :3

Sé que no he actualizado mucho pero es porque las tareas, trabajos, ensayos, etc. Me consumen el tiempo D:, y sé que no es escusa pero prometo actualizar más seguido para que lleguen al capítulo final y no dejarlos con la curiosidad..

Sin más que decir, me despido. Nos leemos en el próximo capítulo, ¡bye!.

Cambios (Maluma & Tu) *Terminada*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora