Capitulo V: Bienvenido Kim Minseok

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¿Debería huir?

¿Debería obedecer a su cerebro?

¿Debería golpear a Tao y Baekhyun por obligarlo a ir al gimnasio?

Si, por supuesto que debería....pero no podía. 

Tres días transcurrieron desde que Tao y Baekhyun se vieron por primera vez, y desde ese momento no han dejado de hablar ¡Incluso organizaron un día de películas! Pero decidieron que primero era el deber, sí, investigar a Chanyeol era una prioridad. Tao se encargó de espiar al hombre el primer día. Se dio cuenta que veía a alguien en el gimnasio, apuntó los horarios e incluso pidió un folleto a la encargada de recepción con la excusa de inscribirse mientras que a lo lejos veía como Chanyeol besaba y acariciaba a un chico más pequeño que él. Era tierno y tenía el cabello de color naranja, Chanyeol se fue dejando al pequeño con su rutina de spinning, el plan entonces se formó tan rápido que no se dio cuenta en que momento se acercó a la recepcionista aun manteniendo la sonrisa para decirle que quería inscribir a tres personas en la misma clase del de cabello de zanahoria. 

Definitivamente debería leer el libro que le dio su padre de cómo hacer nuevos amigos porque los que tenían eran del asco, estaba ahí, sudando como un cerdo en una bicicleta estática mientras un hombre de un metro ochenta, musculoso y bronceado, le gritaba de que fuera más rápido. Después de media hora, el hombre se apiadó de sus alumnos y otorgo un descanso de diez minutos para luego seguir con la rutina que consistía en una hora sin parar. Bajo lentamente de la bicicleta y cayó de rodillas al piso cansado.

—Te lo dije Kyungsoo, deberías hacer más ejercicio, si me hubieras hecho caso no serias el único con la lengua fuera y la mirada perdida—Tao se puso en cuclillas en frente de él otorgándole una botella de agua.

—Hijo...hijo...hijo de...—Kyungsoo ni siquiera podía terminar la frase.

—Hijo de mi madre, mi querido Kyung, y ya deja de hacerte el moribundo, tenemos una misión—Baekhyun se acercó con una toalla a Kyungsoo y comenzó a secarle el sudor.

—Me siento mal por hacerte pasar por esto—Kyungsoo lo miró sonriente, cosa que extrañó a Tao.

—No te preocupes, ya me siento mejor—Kyungsoo se paró lentamente.

—Bueno, es hora—Tao comenzó a mirar a su alrededor, su vista se enfocó en cierto chico solitario con cara de ardilla—Bingo.

—¿Quién irá? —Preguntó Kyungsoo a la vez que tomaba el agua que le había ofrecido Tao.

—Eso no lo había pensado—Dijo Tao con una sonrisa nerviosa.

—Yo, yo puedo ir—Dijo Baekhyun sorprendiendo a los otros dos.

—¿Enserio? Digo, no quiero que te pongas mal—Dijo Kyungsoo.

—Soy capaz de hacerlo, ayer Tao me enseño a actuar como una ¨perra¨, tengo que poner en práctica lo que he aprendido—Tao sonrió.

—Ese es mi pupilo, aprende Kyungsoo, el si toma mis consejos—El nombrado viró los ojos.

—Baekhyun, ¿Estás seguro? puede afectarte—Baekhyun sonrió.

—¿Más? No lo creo, conocerte me ha dado fuerza así que puedo hacerlo, no será como cuando te conocí, sé que esta vez seré más fuerte ¿Confías en mí? —Baekhyun tenía miedo de que le dijera que no, como solía decirle Chanyeol cada vez que le preguntaba lo mismo, siempre era: amor eres buena persona, pero déjamelo a mí, yo me encargo. Cuando lo que él quería escuchar era...

—Confió en ti, hazlo—Kyungsoo alzo la botella en señal de brindis y tomo un sorbo.

—Gracias—Baekhyun lo abrazo rápidamente y se separó para ir hacia su "presa".

El encanto de ChanyeolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora