Capítulo 26

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Kendall

Mi hermano es sacerdote, él estaba en una misión en Latino América y cuando se enteró de lo que me pasaba, vino a verme, claro que era interesante escucharle hablar acerca de los niños pobres y todo eso, pero aquello no me interesaba. Para mí era importante saber cómo estaría Casey, si ella estaría con una chica en este momento o algo. La puerta se abrió haciendo que mi hermano y yo nos volteáramos a ver a la rubia con grandes tacones que entraba como si se tratara de una pasarela, Rachel.

- ¿Usted quién es?

- Ay, dios. ¿Estas pidiendo perdón por tus pecados para entrar al cielo? - Yo reí negando.

- Rachel, él es mi hermano. Jack, ella es Rachel. - Ambos estrecharon sus manos y me pregunte si mi hermano habría notado que era un chico y no una chica.

- Un gusto conocerle, señorita. Bueno, iré por algo de comer.

- Serás un cura gordo. - Él me enseño el dedo de al medio mientras se iba.

- Vaya sacerdote. - Rachel tomo su lugar.

- Si, bueno sigue siendo mi fastidioso hermano. ¿Qué haces aquí, Rachel? - Ella suspiró antes de mirarme seriamente.

- Debes volver con Casey. - Yo negué levemente. - Es su decisión pasar por esto.

- Pero también es mi decisión involucrarle en esto, pensé que estarías de mi lado para que ella no la pasara mal con todo este asunto. - Ella me miró como si buscara algo en mis ojos. - Me duele saber que ella la está pasando mal, ella debería seguir adelante y no estar en un hospital donde ella me podría ver morir.

- Eso es algo noble. Pero ella de verdad te necesita. - Le miré confundida. - Su abuelo tuvo un derrame cerebral, aunque era un viejo estúpido, era el único familiar que le quedaba de parte de su madre.

- ¿El director ha muerto? - Ella asintió. - Oh mi Dios. - Quizás las cartas se referían a él.

- El viejo le ha dejado todo a ella, lo cual a todos nos parecía extraño, pensé que se lo dejaría a Gregor o algo. - Yo asentí levemente. - Casey te ama, y ella en serio nunca se había enamorado de alguien, en su momento pensé que Dianne pudo enamorarle pero no fue así, eres su primer amor y su primer amor está muriendo, ella decidió quedarse a tu lado sabiendo eso, deberías permitirle eso.

- ¿Casey? - Mi hermano entró con una soda en su mano. Ay, no.

Mi hermano siempre estuvo en contra de nuestros padres, siempre fue el chico diferente que iba en contra de todo lo que ellos pensaban, él había encontrado a su "Dios" y siguió su camino, en lo personal solo fue para entrar a una academia privada y al parecer le quedo gustando aquello. La cosa era que él es algo conservador, o eso creo. Al ser el mayor, nunca lo tuve claro por el poco tiempo que pude pasar con el antes de que se fuera de casa.

- Bueno... - Rachel me miró sin saber qué hacer.

- Mi ex novia.

- ¡¿Ex novia?!

- Oye, sé que nunca te dije pero me gustaba una chica y...

- Eso no me interesa Kendall, tuviste una relación y nadie me dijo nada. - Él frunció el ceño y yo le miré confundida. - No puedo creerlo, nadie en esta familia me lo ha dicho, ¿Zen lo sabe?

- Eh, creo que sí. - Murmuré. Zen era el hermano de al medio, estaba trabajando en un hospital en África, salvando gente y todo eso.

- ¿Y por qué ex?, ¿Qué te hizo esa niñata?

- Oye, más respeto es mi prima. - Rachel lo amenazó con su dedo.

- Solo le he dicho niñata. - Jack se encogió de hombros. - Bueno, entonces ¿Qué paso?

- Terminamos por todo esto.

- Que estúpida eres, - Jack negó. - ¿Lo sabes? - Yo asentí levemente. - ¿Por qué no le llamas?

- Porque he sido yo quien ha terminado con ella y...

- No seas tonta, cualquiera comete un error. - Él sonrió levemente.

- Hey, este sacerdote es simpático.

- Gracias, Rachel.

- Si, bueno soy un chico. - Mi hermano le miró sorprendido antes de tomar su cara levantándola.

- Claro, como no lo he notado, ahí está tu manzana. - Rachel se quitó sus manos de encima antes de darme su teléfono.

- ¿Y si esta con alguien?

- ¿Qué parte de que la está pasando mal no has entendido? - Yo asentí levemente antes de marcar el número de Casey. Pasaron algunos tonos antes de escuchar su voz.

- ¿Hola? - Su voz sonaba adormilada.- ¿Rachel? - Suspiré audiblemente.

- No, soy Kendall. - Hubo un silencio al otro lado.

- ¿Kendall ha pasado algo?

- No, es solo que... Necesitaba hablar contigo.

- Me alegra escuchar eso, extrañaba escuchar tu voz. Estar dos semanas sin ti me ha afectado, lo lamento.

- Lo entiendo, me pasa lo mismo.

- ¿Cómo has estado?

- Bastante bien, los exámenes van bien y... Es una mentira, los exámenes van bien pero te extraño demasiado.

- Yo también lo hago, Ken.

- Kendall, te traigo buenas noticias. Hemos conseguido un corazón. - Él medico entró rápidamente dándome la noticia. - Yo me quedé en silencio.

- ¿Kendall?- No podía responderle luego de la noticia. - ¿Kendall estas bien?

- Si, es solo que... Han conseguido un corazón.

- ¡Eso es asombroso!

- Lo es, pero necesito verte antes de ir a la cirugía, por favor.

- ¿Cuándo es la cirugía?

- ¿Cuándo me operarían?

- En algunas horas.

- He escuchado, voy para allá.

- Casey.

- ¿Si, Kendall?

- Te amo.

- Yo también te amo.

Kiss Me?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora