Capítulo OCho.

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《Al Otro Dia En El departamento De Niall》

-Déjame llevar algo -digo mientras Niall sube las escaleras hacia su apartamento.

-No -contesta- Tú carga los materiales de arte.

Gesticulando con la mano, digo abruptamente.

-Esa bolsa no pesa. ¡Tú llevas tres bolsas de supermercado!

-Oh, por favor, esto no es nada. -Cuando finalmente llegamos arriba Niall se vuelve hacia mí.

-Toma las llaves de mi bolsillo. -Levanto una ceja y se queja-. ¿Bromeas?

Abro la boca.

-Eso es demasiado personal para mí -se me escapa, y hago una mueca. No puedo creer que haya dicho eso.

Rodando los ojos Niall baja las compras.

-Es mi bolsillo no la parte superior de mis pantalones.

Ahora estoy mortificada.

-Lo siento -murmuro-. Nunca he estado realmente con un chico. Tú eres el primero con el que de verdad he tenido mucho contacto.

-Qué gran ejemplar de hombre para que comiences -Se ríe mientras abre la puerta.

-Wow ¿un poco engreído? -le pregunto agarrando una bolsa y empujándolo para entrar-. ¡Oye, no limpiaste la cocina!

Cerrando la puerta de golpe tras nosotros, Tommie exclama-: ¡Lavé los platos como me pediste!

Chicos.

-¡Sí, pero tus encimeras todavía están llenas de cosas!

-Como sea. Ayúdame a despejarlas señorita pantalones quisquillosos.

Bajo la cabeza.

-Por favor, no me pongas apodos. He tratado con eso lo suficiente en mi vida.

-¿En serio? ¿Señorita pantalones quisquillosos es como me burlo de ti? -me pregunta Niall con un tono muy sarcástico-. Bueno, por nuestro amigo el credo, escojo llamarte Emma.

-Tengo que que inventar algún apodo estúpido para ti -replico juguetonamente-. Sin embargo no soy muy creativa en esa especialidad.

Niall coloca sus bolsas en el suelo de la cocina.

-Sé cómo tienes que llamarme.

-¿Y cómo sería? -le pregunto poniendo mi bolsa en el suelo al lado de las otras.

-Semental.

Un gemido se me escapa.

-No te voy a llamar semental o cualquier cosa por el estilo.

-¿Por qué no? -Se ríe Niall-, si el nombre encaja.

-Niall, eres ridículo. Si quieres que alguien te llame eso, llama a una de tus novias.

Abre la nevera.

-Sí, pero la pregunta es ¿a cuál? Hay tantas.

Escogiendo ignorarlo, comencé a mover su correo del mostrador. Veo algunos sobres escritos con letra manuscrita. Todos ellos son del mismo remitente. Recojo uno.

-¿Vas a abrir estos? Hay como cinco de ellos.

Niall me los arrebata.

-Sabes que es ilegal leer el correo de otra persona.

-¡No el exterior del sobre!

Él los mete en un cajón y lo cierra de golpe. Girando para poner las botellas en el reciclaje-: Lo siento.

El Arte De La Vida 《N.H》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora